Autor: DRA AMAYA ALVEZ MARÍN Abogada Colectiva Justicia en Derechos Humanos
Columnas de Opinión: Mar que tranquilo te baña, emisarios submarinos y enfermedades
Columnas de Opinión: Mar que tranquilo te baña, emisarios submarinos y enfermedades El Océano Pacífico es un entorno privilegiado para quienes habitamos en la zona costera de la Bahía de Concepción. No solamente es una fuente importante de alimentos, regula el clima y la calidad de agua, sino que también permite actividades económicas de la región, tales como la recreación y el turismo. Sin embargo, esta interrelación entre la vida humana y el océano tiene algunos desafíos. La contaminación fecal del océano costero es una de las formas más extendidas y problemáticas de deterioro de la calidad del agua, y de los ecosistemas marinos costeros. En la bahía de Concepción 110 mil habitantes utilizan emisarios submarinos hoy para ejercer su derecho a saneamiento con un cálculo estimado de 22 toneladas de materia fecal al día. Paradojalmente, Chile es líder en América Latina en la cobertura del derecho a saneamiento a través del tratamiento de aguas servidas. Solamente el 12% de los sistemas de alcantarillado corresponde a emisarios submarinos, los cuales incluyen aliviaderos de tormenta o emergencia.
El Centro de Recursos Hídricos CRHIAM de la Universidad de Concepción publicó un informe sobre los niveles de coliformes fecales en ciertas regiones de Chile, en base a datos obtenidos del monitoreo de emisarios en el periodo 2010-2023. Se obtuvo que en 2.308 oportunidades el valor informado de coliformes fecales fue mayor a la norma máxima permitida, la que ya sobrepasa los límites recomendados por la OMS. Particularmente, la región del Biobío superó la norma permitida, entrando a una situación considerada de emergencia ambiental, en 1.007 oportuniddaes lo que equivale al 43,6% a nivel nacional.
La contaminación fecal de las aguas costeras de la Bahía de Concepción perjudica la calidad del agua y plantea una amenaza para la salud de las personas al promover la propagación de enfermedades infecciosas entre los seres humanos y los organismos marinos.
La ciencia ya entrega información relevante que además asocia, en la zona costera de la Región del Biobío una concordancia, entre los máximos valores promedios de colimetría fecal y el número de casos de hepatitis A reportados por el Ministerio de Salud.
Necesitamos repensar la pertinencia de emisarios submarinos, basado en la necesidad de proteger la salud de la población y los ecosistemas marinos en nuestro entorno inmediato, si queremos entonar con convicción “mar que tranquilo te baña”. ENFOQUE. ENFOQUE