Una marca para Puerto Montt
E Considero muy adecuado que la búsqueda de una marca para Puerto Montt se haga empleando, tal como usted señala, unos pocos conceptos, asentados en el pasado y proyectando el futuro (editorial de El Llanquihue del pasado jueves), Creo que de esta manera podemos sortear los problemas de la subjetividad, especialmente el que usted describe como “chovinismo local”. En Puerto Montt tenemos la fortuna de tener una identidad muy bien definida y que hasido constantea través del tiempo.
La primera actividad organizada y estable en este sitio en tiempos históricos, lugar de acopio de tablas venidas del interior, previo a ser embarcadas hacia Calbuco y Ancud; es decir, un lugar de embarque de carga, osea, un puerto.
La segunda actividad permanente quese instaló fue el almacén de menestras del vecino Villarroel, venido de Calbuco; es decir, un lugar de intercambio de mercancías, o sea, comercio, Puerto y Comercio, esto es lo que ha sido nuestra ciudad desde su mismo comienzo. Este carácter no ha hecho más queacentuarse y enriquecersealolargo delos años, a través de circunstancias y episodios degran repercusión, talescomo la inmigración alemana, el terremoto de 1960 y el desarrallo de la industria acuícola. Ahora yanosomossolamente un puerto marítimo, sino también terrestre y aéreo; ahora ya no ofrecemos sólo articulos de primera necesidad, sino que tenemos una gran oferta de bienes y servicios. Esta es la identidad primaria y central de nuestra ciudad y es con la mayor probabilidad la que nos seguirá orientando en el futuro. Con el correr del tiempose agregaron otros dos componentes a las actividades identitarias de Puerto Montt. Comocapital regional, nuestra ciudad adquirió un nuevo papel en el organigrama nacional; ahora somos también un centro administrativo. El otro componente se hizo presente en tiempos todavía más recientes y creo que no hemos logrado asimilarlo como parasacarle verdadero provecho; me refiero al explosivo aumento de oferta académica.
De Temuco al sur somos con larga distancia la mayor oferta para adquirir capacitación en profesiones y oficios, Considero que estos dos componentes también nos acompañarán en el futuro y aportarán otros matices a nuestra identidad primaria.
Por último, abandonando todo método científico y dando rienda suelta a todo mi chovinismo subjetivo y metafísico, pienso que Puerto Montt es una ciudad inevitable, es una necesidad del país; si nuestra ciudad no existiese, Chile tendría que inventarla. Renato Alvarado Vidal