Autor: Por Fabián Ossandón Briceño Ingeniero Civil Magíster en Gerencia Pública y Desarrollo Regional
Columnas de Opinión: Corredor Bioceánico seguro
Columnas de Opinión: Corredor Bioceánico seguro aRegión de Antofagasta es mucho más que un punto de paso en el Corredor Bioceánico.
Somos la puerta del Pacífico, el corazón logístico del norte de Chile y unterritorio que, por su ubicación estratégica, exige condiciones de resguardo superiores para no transformarse en un puntocrítico de exposición frente al crimen organizado. Por eso sorprende y sin asegurar, preocupa quese hable de conectividad e inversión desde el inicio, una estrategia sólida de control y seguridad territorial. La advertencia del fiscal regional Juan Castro Bekios fueclara: este corredor, sino se gestiona con los resguardos adecuados, podría ser aprovechado por redes criminales transnacionales. Y noesuna hipótesis lejana.
En nuestra región ya enfrentamosdelitoscomotráfico de drogas, trata de personas, ingresoirregular de migrantes, robo de vehículos, comercio ilícito y circulación dearmas; problemáticas quese han expandido con fuerza yante las cuales el Estado ha respondido de manera tardíae insuficiente.
Cuandosenos presentó este proyecto en el Consejo Regional, durante mi período como consejero y presidente dela Comisión de Seguridad comisión que creamos precisamente paraabordar con más fuerza estos desafios-, fui enfático en manifestar la importancia del rol que cumple y debe seguir cumpliendo la Policía Marítima. En particular, advertí que su exclusión del diseño operativo del Corredor Bioceánico era una omisión grave, especialmente considerando el rol estratégico que tendránlos puertos del norte, comoel de Antofagasta, enlacadena logística internacional. Esperamos que esos alcances hayan sido considerados, porquela seguridad regional y nacional no puede quedar subordinadaa criteriostécnicosqueno consideren el impactoreal que tendrá esta ruta en el norte del país.
Este corredor requiere una estructura deresguardo operativa, articulada entre Carabineros, Policía de Investigaciones, Policía Marítima, Aduanas y Migraciones, y apoyada por tecnología moderna: camiones escáner, sistemas de trazabilidad de carga, lectores automatizados de patentes, vigilancia portuaria y monitoreo satelital constante, entre otras.
Una infraestructura de esta magnitud debe proyectarse con una mirada integral, que considereno sólo su potencial económico, sino también suimpacto en laseguridad pública, el control fronterizo y la protección de los puntos de acceso interna cionales. El Corredor Bioceánico no puede serentendido solamente como una obra vial; debe insertarse en una estrategia nacional de desarrollo seguro, con planificación interinstitucional, enfoque preventivo y visión de largo plazo. Esto implicaactuar desde ya con criterios claros de seguridad, orden y control, pilares esenciales para evitar que esta infraestructura sea aprovechada para la comisión de delitos. La Región de Antofagasta ya enfrenta suficientes desafíos en materia de seguridad y control. Por eso, si este proyecto quiere cumplir su promesa de integración y desarrollo, debe garantizar desde su diseño condiciones reales de control de la mercancía y protección delas localidades por dónde se transitará. Laseguridad regional y nacional no puede ser una notaal pieenunaobra de esta envergadura; debeser parte central del la implementación. El Corredor Bioceádiseño, la inversión y nicodebeser una oportunidad para el país, y no una carretera para la delincuencia, el crimen organizado y el narcotráfico. Oo Columna.