“Siempre fui fanática de la educación. Creo que es el motor para el país”
“Siempre fui fanática de la educación. Creo que es el motor para el país” 1\Iaría (le la Luz l3oetsch: “Siempre fui fanática de la educación. Creo que es ei motor para ci pais a conversación tuvo lugar en su casa en Lo Barnechea, una residencia que arece un museo vivo de historia ersonal y familiar. La decoración está marcada por objetos heredados: muebles antiguos, retratos enmarcados, obras de arte, emblemas religiosos y detalles que narran décadas décadas de vida familiar y fe. Cada rincón está lleno de símbolos que hablan de su identidad y convicciones. Además de los salones repletos de recuerdos, recuerdos, hay dos jardines: uno exterior y otro interior, interior, ambos cuidados con esmero. Entre plantas plantas ylaz natural, transcurre parte de su rutina diaria. Cómo es un día cualquiera en su semana? semana? “Estoy en reuniones constantemente. Esta semana tuve consejo de comunicaciones de la SIP Red de Colegios, mesa directiva, y también también estuve revisando documentos para Aptus. El fin de semana me lo pasé leyendo miles de páginas del plan estratégico”. A eso se suma el trabajo administrativo de la fundación Arturo Matte Larraín: impuestos, impuestos, sueldos, informes, etc. Sin embrgo, su día a día está lejos de ser solo oficina. Luz, como normalmente la llaman, vive rodeada de familia. familia. “Tengo 28 nietos. Siempre hay uno en la casa. Ayer vinieron unos a tomar té, otros vienen a hacer tareas. Hasta los nietos me piden piden clases de matemáticas, ciencias, biología... biología... de todo”, cuenta. Y es que su casa no solo es un hogar, también también es un centro de enseñanza alternativo. Tiene juegos de ingenio, materiales pedagógicos, pedagógicos, libros y espacio para aprender jugando. “A veces las niñas chicas en vez de ir al jardín, dicen: vamos al colegio de la Tutu, así me llaman. llaman. Y vienen a mi casa”. El tiempo que pasa con sus nietos es esencial esencial para ella. Además de ser “el colegio de la Tutu” para ellos, Luz es la voz de una herencia herencia familiar enorme. “Les cuento historias de la familia, pero también de cómo eran los colegios colegios antes, cómo vivíamos. Y me preguntan mucho también. Hay confianza”, señala. Cómo organiza su tiempo para equilibrar equilibrar familia, trabajo y vida personal? “Tengo muchas agendas: una para las reuniones, reuniones, otra para la familia, y otra para la fundación. fundación. Si no anoto todo, se me olvida”, comenta comenta riéndose. Qué papel juega la religión en su vida cotidiana? “Para mí, la fe es el centro. Trato de vivir con esperanza y misericordia, y eso me da fuerzas”. Esto se nota en su casa que está llena de íconos íconos religiosos y frases inspiradoras. Cuenta que suele ver misas por YouTube, especialmente especialmente en la noche. “Es como terminar el día con un sentido más profundo”, dice. Incluso, no es raro que combine su reflexión espiritual con la planificación de nuevos proyectos. Y fuera del trabajo, cuáles son sus intereses? intereses? “Leo mucho. Me gusta la historia, los libros religiosos.
También escucho muchas conferencias, conferencias, especialmente cuando me desvelo”. Co. uproniniso LrayecLoria en la edLlcación Cómo comenzó su vínculo con la educación? educación? “Estudié pedagogía en Matemáticas, luego hice un máster en Ciencias y en Matemáticas Puras, y trabajé en la Universidad de Chile. Pero después tuve muchos hijos siete en total total y dejé de hacer clases cuando iba a nacer el quinto”. Pese a dejar la docencia formal, Luz nunca se desvinculó del mundo educativo. Desde temprano se incorporó a colaborar en la Sociedad Sociedad de Instrucción Primaria (SIP), una institución institución con historia familiar: su abuelo, su madre y luego ella han formado parte activa de la organización. Su primer trabajo fue arreglar arreglar y recuperar mobiliario escolar para un colegio nuevo inaugurado en 1982. También realizaba reemplazos en el colegio Santa Ursula Ursula (conocido como Las Ursulinas) y daba clases particulares. Cómo ha cambiado su rol en la SIP a lo largo de los años? Partí en cosas muy prácticas. Después fui asumiendo más responsabilidades, hasta que llegué a la vicepresidencia. Aprendí mucho”. Aunque por estatutos tuvo que dejar la mesa directiva al cumplir 75 años, sigue participando participando activamente en comités, revisando estrategias, estrategias, acompañando visitas a colegios y asesorando a nuevos miembros. “Uno nunca deja de aportar si tiene ganas”, afirma. Qué la llevó a comprometerse tan profundamente profundamente con la SIP? “Siempre fui fanática de la educación. Creo que es el motor para el país. Si un joven no estudia, no sabe leer, ¿qué puede hacer?”. La SIP tiene actualmente 17 colegios en zonas zonas vulnerables de Santiago. Aunque en sus inicios solo impartían enseñanza básica, hoy la mayoría llega hasta cuarto medio. Su compromiso compromiso está lejos de haber terminado.
Qué rol cumplen hoy los sostenedores como la SIP? “Creo que son fundamentales, porque tienen tienen experiencia, visión de largo plazo y un compromiso real con los niños”. Para Luz, uno de los mayores aportes de las corporaciones sostenedoras sin fines de lucro es su continuidad: “Nos quedamos, no cambiamos cambiamos cada cuatro años. Eso da estabilidad a los proyectos y confianza a los profesores”. Cuáles son los principales desaifos que enf renta la educación hoy? “La educación se ha puesto más compleja. Antes bastaba con que el profesor supiera su materia.
Hoy se necesita un equipo entero: psicólogos, encargados de convivencia, de relaciones relaciones familiares... Es otra realidad”. Desde la Fundación Arturo Matte, ¿cuál es su modelo de trabajo? “La Fundación se creó para ayudar a niños con problemas de aprendizaje, sobre todo en colegios subvencionados que no tenían apoyo apoyo especializado. Trabajamos con pedagogas 1 María de la Luz Boetsch con su marido Armando Quezada tienen siete hijos e hijas. Profesora con posgrados en Mateméticas y Ciencias, ha dedicado su vida a la educación, con una intensa labor social.
Hoy, repasa su trayectoria, su compromiso con la lectura y su sueño de expandir un modelo de apoyo psicopedagógico que, segun ella, cambia destinos”. Fernanda Guajardo S. loo LM líderes Mayores RECONOCIMIENTO ANUAL A PERSONAS 75+ QUE IMPACTAN EN LA SOCIEDAD Lii A. “Siempre fui fanática de la educación. Creo que es el motor para el país” muchas casas no hay libros.
Y si el niño no tiene tué leer, no avanza”, advierte María de la Luz Boetsh o Luz como normalmente normalmente la llaman. expertas, con programas propios”. En la actualidad están trabajando con más de 1.500 alumnos.
“Nos enfocamos en esos niños que no califican para el PIE (Programa de Integración Escolar), pero que necesitan ayuda urgente para no quedarse atrás”. Por qué pone tanto énfasis en la lectura? “No debería llegar ningún niño a cuarto básico básico en nivel insatisfactorio de lectura. Porque si no lee bien, está perdido”. Para ella, enseñar a leer es una forma de transformar vidas: “La lectura no es solo académica, académica, es emocional. Les devuelve confianza, confianza, ganas. Muchos llegan diciendo que no pueden, que no van a aprender nunca.
Y sf, aprenden”. Por eso la lectura es un elemento esencial en su hogar y en donde sus nietos ya son parte de una nueva tradición familiar: “Cuando aprenden a leer, tienen que venir a mi casa y dar una prueba. Si leen correctamente, les regalo un Kindle para que puedan leer los libros libros que quieran”, explica. “Todos leen y en cualquier parte, porque están acostumbrados a tenerlo (el Kindle) desde chiquititos. Una de mis nietas de 9 años ya se ha leído Harry Potter Potter completo. Ahora una de 10 tiene hasta El señor de los Anillos leído”. Cómo impacté la pandemia en el aprendizaje? aprendizaje? “La pandemia fue durísima. Bajó mucho la asistencia, sobre todo en prekínder y kínder, porque no es obligatorio. Y los más grandes, como sexto básico, fueron los más afectados”. Durante ese período, la fundación implementó implementó clases remotas, envió materiales y adaptó sus programas. Se puso especial atención atención en la lectura, con horas de lectura diarias en todos los niveles.
Pero Luz es crítica: “En muchas casas no hay libros, Y si el niño no tiene tiene qué leer, no avanza”. Cómo define a un buen profesor o profesora? “Un buen profesor es alegre, alegre, quiere a sus niños, se interesa por ellos. Los niños aprenden cuando quieren aprender, y para eso tienen que querer al profesor”. Luz destaca que la conexión conexión emocional es clave para el aprendizaje.
En su trabajo con Aptus se dedica dedica a mejorar la calidad docente docente mediante capacitación, capacitación, materiales y evaluaciones: evaluaciones: “Nos enfocamos en qué hace que una clase sea buena, cómo funciona una buena escuela. Hemos traído traído incluso modelos desde el extranjero”. ,jCon qué sueña hoy? “Sueño con poder ampliar ampliar el programa de la fundación fundación a muchos más colegios. colegios. Lo he probado, sé que funciona.
Solo falta falta la plata”. Ya han replicado el modelo en escuelas fuera fuera de Santiago, como en Puerto Nuevo, en Los Ríos, gracias a exalumnas y conocidas que han querido imitar su trabajo, aunque no forman forman parte de una expansión oficial del modelo. modelo. “Es una cadena de entusiasmo. Formamos a alguien y esa persona forma a otros. Eso me emociona mucho”. Cómo ve el legado que ha construido? “Lo que uno construye en educación no siempre se ve de inmediato, pero sí se siente.
Y cuando uno ayuda a un niño a aprender a leer, le está abriendo el mundo”. Con una mezcla de alegría, convicción y fe, María de la Luz Boetsch Matte sigue entregando entregando toda su energía a la educación chilena. Aunque los reglamentos la hayan llevado a dejar algunos cargos formales, su vínculo con las instituciones donde ha trabajado toda la vida se mantiene sólido. Sigue activa, conectada conectada y comprometida, aportando experiencia, ideas y entusiasmo allí donde más se necesita. : r _ Z1 María de la Luz en una clase de la fundación Arturo Matte..