Autor: MARIANO FERNÁNDEZ AMUNÁTEGUI
El Museo de Bellas Artes
Señor Director: He leído con detenimiento la interesante crónica y entrevistas sobre "La encrucijada del Museo Nacional de Bellas Artes y su colección patrimonial” y, simplemente, como un interesado en estos temas, desearía puntualizar lo siguiente: 1 Hace algún tiempo, visité la exposición "Luchas por el arte” y me permití enviar una opinión al director del Museo en esa época, Fernando Pérez Oyarzún, con contenidos parecidos a aquellos publicados en el artículo actual, mencionando principalmente una pérdida de valor de obras principales del arte chileno instaladas de la manera que lo decidió la curaduría para aquella ocasión. 2. Señalé, adicionalmente, la sorpresa de mis acompañantes extranjeros al no encontrar una colección permanente y solo muestras itinerantes, como pueden observarse en los varios museos y galerías de Santiago. 3.
Considero capital que se imponga la idea, mencionada por diversos especialistas, de que el Museo Nacional de Bellas Artes mantenga una colección permanente y tan solo ocupe algunos espacios para muestras que, ojalá, sean de gran importancia para que el atractivo del Museo crezca notoriamente. 4. Me parece que no existe un libro que presente la obra patrimonial contenida en el Museo. Me consta que alguna publicación se ha hecho, como es el caso de "Primera Mirada", pero pienso que un gran catálogo sería importante. 5.
Revisando las sugerencias acerca de los artistas que deberían ser considerados en la muestra permanente, me ha sorprendido no haber visto el nombre de Manuel Antonio Caro, cuyas obras "La Zamacueca” y "El Velorio del Angelito”, creadas en 1873, son un patrimonio artístico de Chile como pocas otras. Ellas se encuentran en la Embajada de Chile en Londres, pero me imagino que la Cancillería estaría disponible para prestarlas para ser exhibidas en el Museo. 6.
Por último, considero, conociendo casos en otros países, que el club de amigos o la fundación de apoyo al Museo deberían jugar un papel importante en la recaudación de fondos y obtención de obras para el Museo. Creo que todas las personas entrevistadas en la crónica saben en demasía el papel clave que suelen jugar las organizaciones de amigos en las instituciones culturales.