Autor: José Miguel Castro Diputado de la República
COLUMNAS DE OPINIÓN: Seguridad en Antofagasta
- - COLUMNAS DE OPINIÓN: Seguridad en Antofagasta O Columna Seguridad en rante la reciente visita del Presidente Gabriel Boricala D:* de Antofagasta, destacó una supuesta disminución en los homicidios y robos de vehículos, cifras que generaron dudas entre los ciudadanos y representantes políti cos. Lo que el Mandatario describió parece muy lejano a la realidad que enfrenta el norte del país, en especial Antofagasta. Como representante de la región, me parece necesario que seaclare lo que el Presidente mencionó ya que los datos oficiales del Sistema Táctico de Operación Policial (STOP) de Carabineros no coinciden con surelato.
Según Boric, los homicidios habrían disminuido en más del 20% y losrobos de vehículos en un 70%. Sin embargo, los datos proporcionados porSTOPmuestran que los homicidios no han disminuido de manerasignificativa y, en las últimas semanas, han aumentado un 50% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Estas discrepancias generan confusión y, lo que es más grave, debilitan la confianza dela ciudadanía en sus autoridades. Aún más alarmante es el incremento del 225% en los casos de violaciones en laregión, un problema que no puede ser ignorado. Además, los antofagastinos continúan siendo testigos de balaceras en zonas residenciales y otros actos de violencia que afectan su vida diaria. Esto contrasta drásticamente con el optimismo que mostró el Presidente. Además, el descontrolado flujo de inmigración ilegal es otro factor crítico que agrava la inseguridad en el norte de Chile. Si bien muchos inmigrantes lleganen busca de una mejor vida, es innegablela conexiónentre el narcotráfico, la trata de personas y la entrada de inmigrantes ilegales. En Colchane y Huara, el tráfico de personas es una realidad diaria. Este problema trasciende lolocal, impactando al país entero. JoséMiguel Castro Diputado de la República Antofagasta Desde el Congreso he impulsado la tipificación del ingreso ilegal como delito, propuestaignoradasistemáticamente por el gobierno.
Mientras tanto, estamos debatiendo si implementar unazanja o barreras en las fronteras, pero la pregunta es clara: ¿ Se estántomando las medidas correctas para frenarla inmigración legal? ¿ Tienen las policías y el Ejército las herramientas necesarias? Además de la violencia fisica, enfrentamos una crisis de confianza. Muchas personas han dejado de denunciar delitosporquesienten queno obtendrán una respuesta efectiva. Un ejemplo recurrente es el delas fiestas clandestinas en sectores ¡ como Casa de Piedra, dondelos vecinos soportan balaceras, ruido constante y posible tráfico de drogas y prostitución sin intervención policial. Para diseñar políticas públicas efectivas, necesitamos basarnosen cifras daras y veraces, no en números que noreflejan la realidad. Minimizar los problemas -o acusar rencillas entre políticos-no traerá soluciones ni progreso. Si queremos enfrentar la delincuencia en Antofagasta, necesitamos compromiso y transparencia, reconociendo la magnitud del desafio. Es urgente que el gobierno reconozcala verdadera situación deseguridad en la región y actúe en consecuencia. Los antofagastinos merecen vivir sin miedo y contar con autoridades que hablen con la verdad. Este es un llamado a rectificar, a basarse en datosreales y a tomar las medidas necesarias para devolver la tranquilidad nuestras familias. Laseguridad ciudadana no selogrará con discursos complacientes, sino con acciones concretas, como el refuerzo de las policías, el endurecimiento de penas y políticas migratorias claras. Solo así podremos recuperarla confianza de la ciudadanía y devolverla paz a nuestras calles..