Francisca Walker “Siempre me he creído capaz”
Francisca Walker “Siempre me he creído capaz” Francisca Walker "Siempre me he creído capaz" A UNA DÉCADA DE COMENZAR EN LAS TELESERIES, LA ACTRIZ ANALIZA SU TRABAJO Y LOS CAMBIOS QUE HA TENIDO LA INDUSTRIA. SOBRE SU PRÓXIMO PROTAGÓNICO EN EL REMAKE DE "AMORES DE MERCADO" Y ACERCA DE SUS PROYECCIONES, DICE: "LA MADUREZ TRAE NUEVAS OPORTUNIDADES". POR Juan Toro. FOTOS: Sergio Alfonso López. S orprendería a cualquiera. Mientras en "El señor de la querencia", que aún está transmitiéndose por Mega, es una pelirroja Herminia Pradenas, hoy la actriz Francisca Walker (37) es otra.
Su cabello castaño delata que ya comenzó a trabajar en su nuevo desafío: Fernanda, el protagónico en el remake del éxito de 2001, "Amores de mercado". --Lo de "El señor de la querencia" fue un proyecto relativamente corto y rápido de grabar. Muy intenso. Ahora la nueva teleserie se viene de más largo aliento, son muchos capítulos y muchas escenas --dice Walker, en una videollamada desde su casa en Santiago, la noche del primer miércoles de octubre.
Aunque los remakes son desde hace varios años un recurso que a nivel internacional se ha popularizado para revivir algunos éxitos del pasado, "El señor de la querencia" fue el primero de una teleserie en Chile: --En ese caso, Herminia era un personaje muy recordado y muy querido. Muy icónico. Tenía que honrar ese personaje y no hacer un borrón y cuenta nueva. --¿ Compararon mucho con la versión original? --Mucho, pero la Quena (Rencoret) es súper inteligente en ese sentido. Parte de la gracia de hacer un remake es la expectativa de las personas y el morbo de hacer esa comparación. A nivel mundial. Francisca Walker “Siempre me he creído capaz” ifr L 1. Francisca Walker “Siempre me he creído capaz” siempre se reciben mal al principio, es muy propio del humano pensar que todo tiempo pasado fue mejor y se idealiza la versión más antigua.
Lo positivo que ve Walker en este interés de hacer nuevas versiones de teleseries, es que hay una valoración de lo que se ha hecho en el país: --Se educa a la audiencia a ver cosas nuevas, a ver actuaciones sobre un mismo guion. Es algo bien de la industria que está más consolidada y puede echar mano de lo que se ha hecho en el pasado. Esta vez, Walker enfrenta el remake de "Amores de mercado" con la experiencia del proyecto anterior. Pero más importante aún, con mayor libertad: --Esto es muy diferente porque tengo una visión muy diferente de la que tenía Ángela Contreras del personaje original. Yo no vi esta teleserie, solo el primer capítulo. Así que voy a construirlo desde cero. *** No es una exageración decir que "Amores de mercado" es uno de los mayores éxitos de la televisión chilena.
La historia sobre el intercambio de vidas entre Pelluco y Rodolfo, físicamente iguales pero de estratos sociales opuestos, tuvo la mayor audiencia de todas las telenovelas desde el comienzo de la medición de audiencias con el sistema people meter. Promedió 46,7 puntos de rating, tuvo un peak en 64 puntos y se estima que fue vista por cerca de cinco millones de personas. Aunque entre esos millones no estuvo Francisca Walker: --En general, yo no he visto tantas teleseries. No soy tan de ver tele. Me gusta más el cine, el teatro, la danza. Mis intereses como espectadora van por otros lados.
Aunque igual siempre estoy atenta a lo que se está haciendo. --¿ Cómo afecta su interpretación del personaje el no haber visto la original? --Sobre todo en esta teleserie, sobre todo en la comedia, hay que ser muy auténtico, hay que ser muy fiel a los impulsos que uno tiene. A lo que a uno le sugieren ciertos personajes.
Una de las lecciones es tomar menos en cuenta el ruido que hay afuera y seguir con lo que uno cree. --¿ Y sabe qué tanto difiere de la versión original del personaje de Fernanda? --Solo comparo con el primer capítulo, que es lo que vi. Veía que esa Fernanda estaba muy compuesta, aunque no sé qué es lo que habrá pasado después. Pero para mí, este personaje es una mujer que no sabe muy bien lo que está haciendo. No tiene en verdad todo organizado, está improvisando en el momento y tiene mucho menos bajo control de lo que ella trata de proyectar. El equipo a cargo de este remake le dijo a Francisca Walker que era mejor que no hubiese visto la teleserie de 2001. La idea, explica, es hacer algo nuevo: --A diferencia de lo que pasó con "El señor de la querencia", la gente no debería esperar ver la misma teleserie. Ojalá abran las puertas y le den una oportunidad porque hay nuevos personajes, nuevas interpretaciones. El cambio en el guion, dice Walker, era inevitable.
El original, escrito para ser actuado hace más de 20 años, no tenía sentido en un mundo con redes sociales y donde todo el mundo tiene teléfonos: --Hoy es mucho más difícil que esos dos mundos que muestra la teleserie no se topen.
Hoy, el acceso a la información es inmediato, así que el guion se tuvo que adaptar a eso. --¿ Cambió mucho la forma en que nos relacionamos? --Mucho, es muy distinta la valoración de las relaciones, de lo amoroso, de la amistad y de la palabra. *** En su infancia, Francisca Walker veía cómo el arte rodeaba la familia. Su padre toca guitarra, su madre bordaba, un tío es pintor: --Mi hermano es músico y el otro dibujante, en la familia tenemos todos los ámbitos del arte repartidos. Siempre hemos sido muy cantores, así que yo desde los tres años que hice ballet. Y aunque el primer acercamiento fue el baile y no siempre pensó en la actuación, recuerda haber visto algunas teleseries en televisión: --Más las que daban en el Canal 13 en ese tiempo. Las familias antes escogían su canal de tele por las tendencias políticas, al parecer. Así que en mi casa se veía el 13. --¿ Eran más conservadores? --Sí, la familia era conservadora y católica.
Por lo mismo, recuerda Walker, cuando decidió estudiar teatro en la Universidad Católica, aunque no tenía dudas de que era algo que quería hacer, no fue sencillo: --Me daba miedo estudiar teatro porque vengo de este entorno muy conservador. Sabía que entrando a teatro iba a tener que revisar mis creencias, mis principios, valores, mi historia, mi tendencia polí. Francisca Walker “Siempre me he creído capaz” tica. Sabía que iba a ser un remezón fuerte. La universidad, sobre todo en artes, es mucha ideología, y se te abre el mundo porque te mezclas con personas de diferentes orígenes. &Yfue tan d(ftcil el cambio? Fue hermoso. Fue difícil como cualquier remezón y Ja universidad universidad siempre te da vuelta y te cambia, pero fue hermoso. Yo fui por prueba especial y desde ese momento no tuve duda de que tenía que ser actriz. Francisca Walker comenzó en las teleseries con su primer papel en “Mamá mechona”, en 2014. Desde entonces han pasado diez años y ocho más producciones del género: No me había dado cuenta de que se cumplían 10 años.
Qué lindo, es un lindo momento para una década. ciEn qué sentido? Siempre quise hacer una teleserie nocturna, como lo que hice en “El señor de la querencia”, porque es una exigencia emocional mucho mucho más grande, el rango es más amplio y más intensa Yo partí con comedias y es bacán, pero tenía esto pendiente. Y fue intenso, pero me sentí muy cómoda, sentí que tenía credibilidad en el elenco. Me sentí apañada y segura de mí, y eso es algo que te lo da el tiempo. Y ahora voy a pasar a un protagónico. Es un lindo momento. En este tiempo ha visto cómo la industria ha cambiado. En parte, dice, porque el formato de las teleseries ha logrado reinventarse a la época del streaming: Siempre están diciendo, desde que entré, que hay una crisis en la televisión. Y sí, también ahora que Mega es el único canal con producciones constantes. Pero hoy se habla sobre teleseries de ese entonces como “Papá a la deriva” y “Pituca sin lucas” como clásicos y la rompen. Pasaron a ser parte de la historia de las teleseries. Al parecer, como decía antes, todo mirado con distancia se ve mejor.
Hoy, dice que también se ve mayor profesionalismo dentro de las producciones: No me tocó la época de la vieja escuela con divas, pero sí me tocó ver a los hombres llegando tarde y sin aprenderse las líneas mi que a nadie le importara.
Hoy eso no pasa y la gente que está en televisión está trabajando, valora su lugar y lo cuida. cQué consejo se daría a sí misma en el comienzo de su carrera? carrera? Que me creyera más el cuento. Debí ser más patuda, siempre pedí mucho permiso porque sentía que tenía que probarle al resto antes de poder hacer algo. Me encanta que el feminismo hoy ha hecho que las niñas llegan en otra parada. Se empoderan desde un lugar más descarado, tienen un desparpajo delicioso en la juventud y qué ganas de haberlo tenido yo. S Tiene síndrome del impostor? Nunca. Siempre me he creído capaz. Pero con la sensación de que tenía que pedir permiso. Tiene que ver con un tema de autoestima autoestima más que de creerse capaz. Mientras habla, Francisca Walker mantiene un tono suave y volumen volumen bajo en La voz. En otra habitación está durmiendo su hijo de tres años. Antes de comenzar esta entrevista, después de llegar de un día de grabaciones, estuvo con él para hacerlo dormir.
Son momentos importantes que hay que cuidar, hacerlos con cariño y sin apurar dice Walker sonriendo, y agrega que ya le explicaron explicaron que ella y el padre, el actor Mario Horton, trabajan en la televisión: televisión: Le dijimos que estamos en la tele, como el personaje Pocoyó. Era necesario. Una situación no tan extraña, dice, es que estén en la calle y alguien los reconozca y les pida una foto. En esos casos, procura que su hijo no se vea en ninguna fotografía: Yo no expongo a mi hijo, ni a mi familia, ni mi relación en redes sociales. Porque creo que hay que ser cuidadosos del espacio privada Tenemos que mostrarles el oficio de los papás a los niños con naturalidad. naturalidad. Y si eso implica ser una figura pública, que lo entienda y mostrarle mostrarle los límites. El lado positivo, explica, es que al ser una pareja de actores, los parámetros que se deben aplicar ahí están claros: Ambos conocemos esto y sabemos de lo que estamos hablando. No tenemos que explicarle al otro cómo funcionan estas cosas y se raya la cancha con conocimiento de causa Esos límites son algo que Walker aplica en todos los ámbitos. En su cuenta de Instagram suma más de 435 mil seguidores, pero la mayoría de las publicaciones son exclusivamente sobre sus trabajos y proyectos: Tengo un amor-odio con Instagram. Como todo el mundo, a veces me quedo pegada viendo cosas, pero me da rabia porque nunca gano nada, fuera de algunos consejos de crianza o de coach de actuación. actuación. Lo veo estrictamente para mostrar mi trabajo e interactuar con mis seguidores. Pero no soy muy buena para hacerlo, me cuesta recordarlo. A veces pienso que debería poner más atención. &Porque se consideran parte del trabajo de la actriz? Sí, en realidad, hoy las plataformas también revisan cuántos seguidores tienes antes de contratarte. Que me parece un error, pero es así. Lo hacen porque las series tienen que ser vistas y ser financiadas, financiadas, y es más fácil con una persona que ya es conocida en redes sociales sociales por sí sola. Pero es una lógica que en términos artísticos no hace mucho sentido.
Mientras se ha mantenido por 10 años en las teleseries, Francisca Walker ha mantenido su carrera activa en el cine, el año pasado participando en “El Conde”, de Pablo Larraín, y “Detrás de la lluvia”, de Valeria Sarmiento, y el próximo estreno de “La Ola”, de Sebastián Lelio, además del teatro, recientemente interpretando a Carmela en “La Pérgola de las flores”, en el GAM.
Y ya prepara algunos de sus próximos proyectos: No puedo adelantar tanto, pero estoy preparando una obra y conciertos de Cultura Capital. ciYlos próximos 10 años? Espero seguir trabajando y tener tiempo para la familia que ha pasado a ser una prioridad. Pero ojalá no parar, quiero trabajar todos los formatos, seguir como lo he podido hacer hasta ahora que puedo hacer musicales, teatro, cine, teleseries. Quiero hacer todo. Hay tantos tantos formatos, opciones y me gustan tantas cosas que no me veo a futuro conformándome con lo que ya he hecho. Héctor Noguera, dice Walker, es el tipo de figura que tiene una carrera como la que le gustaría tener a futuro: Ojalá llegar así a su edad, relajado, creando y fluyendo. La internacionalización, que suele ser una meta común entre las actrices nacionales hoy, dice que es algo que le interesa solo hasta cierto punto.
Walker vivió en Estados Unidos por un año y medio, hasta que volvió a Chile para grabar “Papá a la deriva”, en 2015: Me fui para estudiar en ese tiempo, pero si fui a castings y no me veía tan latina para lo que ellos buscaban, pero parece que eso ha cambiado. Obviamente, es algo que me gustaría que ocurriera, pero por el momento no me quita el sueño. tiNo es su meta? Creo que no es algo por lo que uno tenga que luchar. El trabajo trae más trabajo. Estoy en un momento muy tranquilo, confiando en los procesos. Y ahora que sé que llevo 10 años en teleseries, siento que llego a un momento en que las cosas se construyen con tiempo. La madurez trae nuevas oportunidades..