La amenaza de la dictadura venezolana
La amenaza de la dictadura venezolana OPINIÓN La amenaza de la dictadura venezolana El reciente testimonio del Fiscal Nacional, confirmando que el asesinato del teniente Ronald Ojeda fue encargado por el ministro Diosdado Cabello y financiado por el régimen venezolano, revela una realidad: Chile no es inmuneal alcance del crimen organizado impulsado por dictaduras extranjeras.
Este hecho no solo afecta nuestra soberanía, sino que expone la fragilidad de nuestras fronteras, especialmente en Tarapacá, donde los asesinos de Ojeda habrían entrado y salido del país sin mayor dificultad, Este caso es un claro ejemplo de cómo la negligencia gubernamental frente a la crisis migratoria ha transformado a Chile en un territorio vulnerable, Las políticas gratorias, llenas de discursos grandilocuentes pero carentes de acción concreta, han puesto en riesgo a nuestra ciudadanía. Las recientes expulsiones de esta semana, apenas 37 personas cuando caben más de 120 reflejan la falta de voluntad y capacidad operativa del actual gobierno. Este vuelo es solo una muestra simbólica que intenta ocultar la ineptitud y la desconexión entre el discurso oficial yla realidad. En Tarapacá, hemos sido. testigos directos de cómo el gobierno prioriza una agenda de que incentivos los ingresos clandestinos, dejando de lado la seguridad de los ciudadanos chilenos.
Esto no es una cuestión de falta derecursos; es una cuestión de vosos; es una cuestión de vo dé Este caso es un claro ejemplo de cómo la negligencia gubernamental frente a la crisis migratoria ha transformado a Chile". Luz Ebensperger, senadora porTarapacá luntad política y eficiencia en la gestión. La verdadera solución requiere mucho más que promesas y retórica.
Necesitamos un control efectivo de nuestras fronteras, procedimientos expeditos para devolver a quienes ingresan ilegalmente -y noregalarles visa después de un registro biométrico-, y una estrategia clara para combatir el crimen organizado que opera bajo la protección dela clandestinidad. No es aceptable que el gobierno siga justificando su falta de acción mientras los ciudadanos viven con miedo y el crimen transnacional avanza sin control. Chile no puede ser cómplice, por omisión, de los delitos que cruzan nuestras fronteras. Es hora de exigir medidas concretas, responsables y orientadas a proteger a quienes han confiado en Nuestras instituciones. Nose trata solo de recursos, sino de liderazgo y compromiso real con la seguridad y el bienestar de nuestro país. de nuestro país..