Autor: Marcelo Trivelli Fundación Semilla
Columnas de Opinión: Crisis de natalidad o crisis del modelo de desarrollo
Columnas de Opinión: Crisis de natalidad o crisis del modelo de desarrollo Oo Columna E p: primera vezen cuatro regiones del país, el número de inuertes supera al de nacimientos.
Esta situación ha encendido las alarmas en sectores políticos, académicos y sociales, que ven enla baja tasa de natalidad una amenaza concreta al “sistema”. Pero ante esta preocupación sostengo que no estamos ante una crisis de natalidad, sino que frente a una crisis del modelo de desarrollo. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la tasa de fecundidad en Chile cayó a1,3 hijos por mujer en 2023, muy por debajo del nivel de reemplazo poblacional de 2,1 hijos. Estosesumaal envejecimiento progresivo de la población: se estima que hacia 2050 estegrupo superará el 30%. Estatransición demográfica plantea preguntas de fondosobre el mode lo de desarrollo. Una sociedad en la que las parejas optan por uno o dos hijosorenuncian a la maternidad y paternidad es legítima independiente de sus motivaciones. Hoy no es cosa de “echar niñosal mundo”, hay cada vez más conciencia de la responsabilidad quesignifica esta decisión para padres, madres, hijas e hijos.
Todos quienes centran la atenciónencómo aumentarla tasa de natalidad esgrimen argumentos para perpetuar un modelo de desarrollo que prioriza el crecimiento económico por sobre el bienestar de las personas y no reconoce el contexto global en que el planeta está llegando a sus límites biofísicos.
Repensar e impulsar uncambio de paradigma de desarrollo es también hacernos cargo de la necesidad de garantizar una vidadigna parala población y para las nuevas generaciones y reconocer que, a nivel global, estamos cerca del punto de noretornosi no reducimos excesivamente las emisiones. La baja tasa de natalidad, así como otros tantos factores locales y globalessonsignos inequivocos de queel modelo de desarrollo vigente es insostenible. Insistir en impulsar la natalidad como solución para mantener el sistema sin cambios es una visión cortoplacista.
Como dice el refrán: “pan para hoy, hambre para mañana”. Unnuevo modelo de desarrollo compatible contasas de natalidad por debajo del reemplazo es posible y debe comenzar por reconocer que la suma de losintereses individuales no maximiza el interés colectivo y es por ello que la política pública deberájugar un papel en el proceso de transición como expresión del bien común. Primero enfocar y promover la innovación como motor de generación de valor en los agentes económicos en reemplazo degenerarrenta a expensas de un mercado consobreoferta de trabajadores no calificados. Segundo, quela calidad de la educación no sea solo un discurso electoral sino un verdadero compromiso para estar a la altura del desarrollo de conocimiento e innovación a nivel mundial. Tercero, hacerse cargo delas necesidades integrales de la población adulta mayor. Y cuarto, desarrollar y/o implementar tecnología para adaptarsea una sociedad cuya demografía es post piramidal. Lo que está en crisisno es la tasa de natalidad, sino que el modelo de desarrollo. Un nuevo modelo es urgente no solo pararedefinirelsistema, sino para que valga la pena sostenerlo..