Autor: Gabriel Rodríguez Bustgos
COLUMNAS DE OPINIÓN: Con el presidente de Alemania
COLUMNAS DE OPINIÓN: Con el presidente de Alemania Fui uno de cuatro invitados a reunirme con el presidente presidente de Alemania Frank Steinmeier. La reunión se realizó realizó esle miércoles en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. La idea era dialogar sobre el pasado pasado y el posible futuro de Colonia Dignidad, hoy publicitada publicitada como Villa Baviera. Debí viajar temprano ese día y con mi esposa, Ana Maria, llegamos al recinto cuidando de cumplir estrictamente estrictamente con las instrucciones recibidas desde la embajada. embajada. Pensé que estaríamos solos con el presidente, pero fue en una gran sala y estuvimos rodeados de embajadores y personal diplomático de ambos paises. Después de las presentaciones protocolares el presidente presidente Stenmeier me ofreció la palabra pera hablar sobre sobre mi experiencia en relación al enclave alemán en la pre cordillera de Parral.
Conté mi paso forzado por el lugar en 1975 junto a una cincuentena de talquinos y después, mi dedicación a investigar y conocer a fondo la historia de un lugar donde pasaban cosas insólitas y que había estado en la agenda noticiosa cada cierto tiempo, por la fuga de colonos. Le manifesté al presidente presidente alemán que me interesaba contar el dolor de los distintos grupos de víctimas sometidos sometidos a diverso tipo de abusos, castigos y crímenes.
Es bueno recordar que el grupo original original llegó en 1961 después de comprar comprar el fundo El Lavadero que originalmente originalmente contaba con 3 mil hectáreas y que había sido parte de un intento de colonización italiana fracasado.
El guía, profeta y pastor del grupo de unas 300 Gabriel personas era Paul Scháfer, ex carnilleRodríguez ro del elercito nazi, predicador, hornoBustos sexual y pederasta que era investigado investigado en Alemania por acusaciones de abuso de menores. menores. El líder in9resó clandestinamente a nuestro país y nunca aparecio en ningún documento legal, aunque era el jefe indiscutido. Dirigía su secta rodeado de una veintena veintena de fanáticos dispuestos a cumplir todas sus órdenes. órdenes. Con el tiempo fueron conocidos como los Jerarcasa. Jerarcasa. Entre ellos había algunos ex combatientes nazis. La secta estableció un Estado propio al interior del país. Hablaban alemán, no enviaban a los niños a la escuela, los matrimonios vivían separados de sus hijos, hijos, quienes estaban a cargo de tías que los castigaban ante la menor muestra de rebeldia. Por supuesto el pedófilo gozaba de todo tipo de privilegios, manejaba un auto Mercedes Benz blindado y siempre estaba acompañado acompañado de dos niños que eran nombrados como sprinter. sprinter. Aunque Schafer predicaba que vivían en el paraíso y afuera del fundo era un infierno dirigido por el demonio, no faltaron los adolescentes que se rebelaron a sus abusos. El primero de ellos fue Wolfang Müller que se fugó a mediados de los años sesenta, denunció los abusos y el extraño sistema de vida al interior del enclave. enclave. Aunque la justicia chilena de la época lo encarceló. finalmente el muchacho pudo escapar a Argentina y desde ahí a su natal Alemania. Un joven parralino escribió escribió un libro sobre las irregularidades del enclave y fue baleado en la Plaza de Armas. La justicia nunca investigó las denuncias, los gobiernos gobiernos se taparon los oídos y nunca escucharon a las víctimas. Hasta 1997 cuando un grupo de muchachos y sus madres se atrevieron a denunciar al criminal que se ocultó y finalmente fue detenido en Buenos Aires el año 2005. Durante la dictadura sus servicios secretos usaron sus instalaciones para secuestrar, torturar y asesinar asesinar a posibles opositores. Los asesinados fueron enterrados en fosas en sus extensos bosques y en 1978 fueron exhumados, quemados y arrojados al rio Perquilauquen. Perquilauquen.
Terminé mi intervención reivindicando a todas las víctimas incluyendo a los propios colonos esclavizados esclavizados y expresando la urgencia de transformar ese lugar en un Sitio de Memoria para que su terrorífica historia no se repita nunca más. La Columna.