Autor: Carlos Peña
Columnas de Opinión: La insatisfacción democrática
Columnas de Opinión: La insatisfacción democrática E problema central del debate público ficadoses incompatible con la igualdad, y se deestasemanalo constituyeel tema del disponen a escuchar los argumentos del otro acuerdo sobre pensiones en el senado. y dentro deciertos límitesse dejan persuadir. ¿Valdrála pena aplaudirlo (piensa Ensuma, los acuerdos en sí mismos reúnen quierdao parte de ella)a pesar dequedí los valores ly as virtudes que son propias de ólumelas basedel sactu al sistema? ¿ Noserá la vida de rática. unerrorhaberlo aprobado (piensala derecha Esevidente que el contenido de unacuero parte de ella) si con él se entrega parte del do puede ser erróneo (al igual quela merasuesfuerzo persoal n esataldo ? ¿ Será el comienmao agregación delas preferencias) pero inzo del fin (piensa parte de la derecha)? ¿ Será cluso en ese caso tiene un valor intrínseco el principio del futuro (confía parte de la izporque en él se realizan esos bienes que son quierda)? propios dela democracia.
Los aportes seguirían siendo en el largo Y es que en la vida democrática no basta plazode quien ejecutó el esfuerzo (y ahí ganó decidir bien, es necesario que el proceso de la derecha); pero al generarse un préstamo se decidirlo sea de unacierta forma y estaincluintroduce algo de solidaridad (y eso satisfizo yela deliberación entendida como la búsqueala izquierda). Pero ambas tienen también da de un acuerdo racional. Si así no fuera, si motivos parala frustración.
Seguirán las AFPs lo único importante fuera decidir bien (con (se queja la izquierda), se siembra la semilla prescindencia del proceso que conduce a la del reparto(s e queja la derecha). decisión) entonces un dictador benevolente Ensuma, a pesar delas apariencias nadie ysabio (sies que algo asíexistiera) sería la suestá del todo ninguno premaforma de satisfecho. Pero nadie aceptaría eso. Esla insatisfacción relativa que provee la Nosetrata solo de alcanzar buenos resuldemocracia. tados, se trata de alcanzarlos en la forma coLo quese alcanzóes lo que algún autor (J. recta.
Poreso puestos a escoger entre tener Rawls) llama un consenso traslapado, un buenos resultados de la mano de una dictaacual eque r cadad paorte pud o concurripro r duraincluso benévola, o resultados imperfecrazones finales o de fondo distintas.
Enélnatos, o incluso malos, de la mano del a demodie queda del todosatisfecho; pero pretender cracia no cabe duda de que esto último es lo unasatisfacción total para una sola delas parpreferible. tesno es algo que provea la democracia. La Esto esigual que enl a vida personal. Nademocracia provee bienes parciales y triundie enseñaría a sus hijos que el éxito importa fos (también derrotas) inevitablemente tranen símismo.
Leenseñarímáas bien queeléxisitorios. tos valioso solo en la medida ques e alcance Y el principal de todos esos bienes sonlos della forma correcta, homenajeando, a l peracuerdos que, al revés de lo que se cree, tieseguirlo, los valoresen quese cree.
De esamanen un valor en símismos. nera incluso si no se alcanzae l éxito habrá vaPor supuesto, si Pedro y Juan acuerdan lidola pena. matar a Diego, nadie diría que es mejor que Eso mismo vale, mutatis mutandis, para alcancen un acuerdo a que no lo hagan.
Y es la democracia ¿ Ingenuidad? ¿ Falta de valenque, efectivamente, la mayor parte de las vetía para impulsalras propias ideas? ¿ simple ces los acuerdos tienen un valor puramente racionalización de la cobardía que impide deinstrumental: su valor proviene del fin quea fenderlas propias ideas hasta el final? ¿ Retrotravés suyo se procura alcanzar. ceso en la batalla cultural? Al revés: defensa Pero en una democracia los acuerdos tieestrictade la democracia no como manerad e nen un valor intrínseco: valen en sí mismos, alcanzar la verdad, sino como forma de conen ellos serealiza algo que valela pena. ducción dela vida colectiva.
Al 'un acuerdoy, especial mente Poreso noes do afirqmuea lar s aen el díálogo que conduce a él, los partícipes lud de la democracia se mide no por la satissereconocen recíprocamente igual capacifacciónde sus fuerzas políticas, sino porlaindad de discernimiento, renuncian a la coac satisfacción que experimentan luego de alción, aceptan que imponer verdades o sig canzar un acuerdo..