Editorial: Un relato de inmigrantes
Editorial: Un relato de inmigrantes 0Editorialna buena noticia para Valparaíso es, sin lugar alguna a dudas, la recuperación del antiguo Colegio Alemán del Cerro Concepción, cuna de tantos nombres que han enaltecido no sólo a la ciudad, sino también al país desde su puesta en marcha en 1857 en la Plaza Victoria y desde 1870 en su tradicional emplazamiento porteño, en un derrotero sólo interrumpido fisicamente después del terremoto del 3 de marzo de 1985 y su traslado paulatino a la nueva sede del El Salto, donde funciona sin paréntesis alguno desde 1988.
Detrás de esta historia está Eduardo Dib Maluk, hijo de inmigrantes sirios, quien empezó desde abajo y construyó un imperio desde su conocida fábrica de alfombras, hoy extendida al rubro inmobiliario y diversos otros, como su participación en el Outlet de Reñaca Alto, el SportingClub de Viña del Mar, suimplicancia en la Fundación Piensa, entre variosinteresescomerciales y también de corte filantrópico.
Suidea nace de una mezcla del orgullo que siempre ha sentido porsus propios orí-Pestino: ¡ Valparaíso! Pioneroseuropeos en la costa oestedes udamérica, delbritániSusanne FriesGaiendestacando suLa alcaldesa electa Camila Nieto ya se ha 4 a reunido con él, tal como hizo esta semana la embajadoragenes y el título del libro de Alemania en Chile, úco David]. Woods, a quien resiliencia y paciencia. el propio Dib tuvo invitado hace algunos años en la ciudad y luego se preocupó de repartir el volumen por la zona.
Así, el empresario -apoyado en su familia, los arquitectos Joaquín Velasco y Harken Jensen, y el restauradoritaliano Walter Beepensó en el concepto del Museo del Inmigrante, con un recorrido por todas las estaciones y nacionalidades, asociado a un lugar de encuentro y gastronomía para honrar la memoria de Valparaíso y que piensa inaugurar a fines del presente año.
La alcaldesa electa Camila Nieto ya se ha reunido con él, tal como hizo esta semana la embajadora de Alemania en Chile, Susanne Fries-Gaier, destacando no sólo la noble apuesta de Dib, sino también su resiliencia y paciencia al versu proyecto amenazado por una administración a lacual nunca le interesaron proyectos como éste. Enhorabuena. Valparaíso empieza a renacer.. La mayúscula inversión de Eduardo Diben el exColegio Alemán, cuya cifra no viene al caso detallar, es un oda de amor por Valparaíso. Editorial