Autor: NOEMIE BISSERBE Y NIDHI SUBBARAMAN The Wall Street Journal
Europa está reclutando a académicos desilusionados de EE.UU.
Europa está reclutando a académicos desilusionados de EE.UU. investigación de Noruega estableció en abril un fondo de US$ 10 millones para científicos estadounidenses.
“Hay una guerra por el talento a nivel mundial, y se está intensificando”, aseguró Eppo Bruins, ministro de Educación, Cultura y Ciencias de Países Bajos, quien ha propuesto gastar alrededor de US$ 30 millones para atraer a docenas de científicos de países, entre estos EE.UU., a las universidades neerlandesas. La mayoría de los programas son demasiado pequeños o de corto plazo para cambiar fundamentalmente la competitividad académica de Europa, observó James Wilsdon, profesor de política investigativa en University College de Londres. “A lo que la ciencia responde bien es a la estabilidad, la capacidad de predicción y la planificación a largo plazo”, agregó. Los investigadores ganan mucho menos en Europa que en EE.UU.
Para trasladarse a Francia, por ejemplo, por lo general tienen que estar dispuestos a ganar la mitad o incluso un terc i o d e l o q u e g a n a r í a n e n EE.UU. Pero el costo de la vida en gran parte de Europa es más bajo y los gobiernos pagan más por la salud y la educación.
Rachel Beatty Riedl, cientista política de la Universidad Cornell quien estudia la democracia y el autoritarismo, ha aceptado un puesto por un año en Sciences Po en Francia para investigar lo que describe como un retroceso de la democracia a nivel mundial. Planea trasladarse a Francia con su familia en el último trimestre de este año. La académica señaló que realizar investigaciones se había vuelto más complicado desde que Trump asumió nuevamente la presidencia y ordenó al gobierno federal que eliminara el apoyo para la investigación sobre algunos temas. “Eso impregna cada decisión que toman los académicos sobre qué están dispuestos a decir públicamente y qué tipos de investigación quieren publicar”, comentó. Tres cuartas partes de los 1.600 científicos que respondieron a una encuesta que publicó la revista Nature en marzo manifestaron que estaban pensando dejar EE.UU. y que Europa estaba entre sus principales opciones para trasladarse. Perl-Rosenthal, el profesor de historia, afirmó que el gobierno de Trump ha creado un clima de temor en el mundo académico estadounidense. “Francamente, todos los líderes universitarios en EE.UU. están en general temerosos”, aseguró. Este profesor lleva en París dos años realizando una investigación sobre corsarios; barcos a los que los gobiernos permitían que atacaran y se apoderaran de naves enemigas en altamar.
Su subvención de National Endowment for the Humanities fue cancelada meses antes de la fecha en que se esperaba su regreso de la licencia a la Universidad del Sur de California, a la que se incorporó hace 15 años. “Imaginar cómo vivir en un país extranjero es difícil, requiere toda una serie de esfuerzos”, dijo Perl-Rosenthal.
“Las personas van a necesitar mucha ayuda para resolver esto y va a tomar tiempo”. Artículo traducido del inglés por “El Mercurio”. seguir siendo libres, realicen su investigación aquí; ayúdennos a mejorar, a invertir en nuestro futuro”, manifestó Macron. Europa, lugar de origen de Louis Pasteur y Albert Einstein, durante siglos fue un líder en el mundo en descubrimientos que explicaban el mundo natural. Estados Unidos asumió el liderazgo después de la II Guerra Mundial, cuando emigrantes europeos llegaron a trabajar junto con los estadounidenses en laboratorios universitarios con abundantes fondos federales. Estados Unidos aún supera en gastos a cualquier otro país en investigación y desarrollo.
Pero desde que volvió al poder, el gobierno de Trump ha reducido o congelado las subvenciones de miles de millones de dólares de investigación a las universidades, citando investigac i o n e s e n p r o g r a m a s d e diversidad y antisemitismo.
El gobierno de Trump está reduciendo el despilfarro, el fraude y el abuso en el financiamiento federal de la i n v e s t i g a c i ó n, señaló el vocero K u s h D e s a i.
Y agregó que el gobierno cumpliría l a p r o m e s a d e Trump de “consolidar el dominio de EE.UU. en tecnologías de vanguardia, como la inteligencia artificial, las criptomonedas y la exploración espacial, mientras aborda nuestra epidemia de enfermedades crónicas”. Mientras tanto, las universidades en toda Europa están ofreciendo subvenciones y la promesa de libertad académica a investigadores estadounidenses.
La Universidad de AixMarseille en el sur de Francia afirmó que recibió alrededor de 300 postulaciones en un lapso de tres semanas para su programa Safe Place for Science, entre las que había solicitudes de investigadores de Harvard, Yale, Princeton, Columbia y Stanford. La Vrije Universiteit Brussel de Bélgica tiene el propósito de apoyar a una docena de académicos posdoctorado, especialmente de EE.UU., con becas de US$ 3 millones, aproximadamente, cada una. El consejo de CONTENIDO LICENCIADO POR THE WALL STREET JOURNAL PARÍS.
El Presidente francés, Emmanuel Macron, tiene un mensaje para los académicos estadounidenses como Nathan Perl-Rosenthal: ¡ Olvídense de EE.UU., vengan a Francia! Perl-Rosenthal, profesor de historia en la Universidad del Sur de California, conoció a Macron en una conferencia en París en mayo, semanas después de que el gobierno estadounidense cancelara una subvención que financiaba su investigación sobre historia marítima. Perl-Rosenthal quedó impresionado con el compromiso de Macron de defender el espíritu crítico y la libertad académica. “Me guiñó un ojo cuando dije que trabajaba en el surgimiento de la política de masas”, contó Perl-Rosenthal. Y está considerando un puesto permanente en París.
Macron y sus pares europeos están buscando que el reacondicionamiento del mundo académico estadounidense que ha llev a d o a c a b o e l P r e s i d e n t e Trump se convierta en ganancia para ellos.
En mayo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que establecería un fondo de unos US$ 575 millones para “lograr que Europa sea un imán para los investigadores”. En junio, el Reino Unido anunció que gastaría alrededor de US$ 75 millones durante cinco años para cubrir costos de traslado e investigación para los científicos extranjeros que se muden al Reino Unido. Macron, en la conferencia de París, prometió otros US$ 115 millones para ayudar a que científicos extranjeros se trasladen a Francia. “Si les encanta la libertad, vengan y ayúdennos a El Presidente francés, Emmanuel Macron, hablando en París el mes pasado, prometió 115 millones de dólares para ayudar a los investigadores extranjeros a trasladarse a Francia.
ÉXODO Tres cuartas partes de los 1.600 científicos que respondieron a una encuesta que publicó la revista Nature en marzo manifestaron que estaban pensando dejar EE.UU.. El Reino Unido y Francia, entre otros países, han establecido fondos para ayudar a investigadores estadounidenses a trasladarse al continente. Trump ha reducido o congelado subvenciones por miles de millones de dólares: