¿ O era por si pasaba?
E ¿ Qué pasó? ¿ En qué pensaban? ¿ Qué esperaban, etcétera, los que, se supone, en el Ministerio de Bienes Nacionales deben conocer perfectamente lo que permite o no nuestra Constitución en estas materias? En especial, la ministra Marcela Sandoval, sus asesores legislativos, así comolos responsables de la compraventa de la casa, incluida la ministra de Defensa, Maya Fernández, y sus asesores. ¿Qué pasó? ¿ En qué pensaban? ¿ Qué esperaban? Es inentendible que personas encargadas de resguardar el patrimonio del fisco, es decir, el dinero de todos los chilenos, no hayan declarado inviable la compraventa de la casa desde un primer momento. A pesar de ello, comenzaron el proceso.
Incluso, la propia ministra Sandoval informó sobre la toma de razón por parte de la Contraloría General de la República el 20 de diciembre de 2024, por un costo de 933 millones de pesos, el valor de la casa.
Raya para la suma: ¿ qué pasó? ¿ En qué pensaban? ¿ Qué esperaban? Ahora, todos reconocen el tremendo error, gracias a que, una vez más, la prensa destapó la olla, como tantas otras veces, y los obligó a recular.
Recordando una frase bíblica: “Era más fácil que pasara un camello por el ojo de una aguja” a que esta compraventa pasara “piola”. Pero no contaron con la astucia del Chapulín colorado ni con el hecho de que los chilenos tenemos, desde hace tiempo, al mejor guardián del patrimonio nacional: la prensa nacional. Enhorabuena. Y es muy larga la lista de las ollas que ha destapado. ¿O era porsi pasaba? Luis Enrique Soler Milla