Columnas de Opinión: No confundamos al enemigo: el verdadero debate no es la UF, es la inflación
Columnas de Opinión: No confundamos al enemigo: el verdadero debate no es la UF, es la inflación En las últimas semanas ha resurgido una discusión tan llamativa como riesgosa: la idea de eliminar la Unidad de Fomento (UF) como mecanismo de reajuste económico.
Con discursos que apelan a la angustia del costo de la vida o la falta de comprensión general sobre instrumentos financieros, algunos proponen suprimir la UF como si ello implicara una baja automática en los precios. No sólo es técnicamente erróneo; es además populista. La UF es, en rigor, una herramienta de indexación económica. Fue creada en 1967 precisamente para enfrentar uno de los grandes males de nuestra economía: la inflación crónica. A diferencia de una moneda, la UF no circula ni se gasta; se utiliza como unidad contable para contratos de largo plazo, ajustándose diariamente según la variación del IPC. En otras palabras, su objetivo es mantener el valor real de las obligaciones financieras en el tiempo, protegiendo a ambas partes del contrato, tanto al que paga como al que recibe.
Eliminar la UF como algunos han planteado, implicaría desindexar miles de contratos: créditos hipotecarios, seguros, arriendos, planes de salud, fondos previsionales y más. ¿ Consecuencia inmediata? Los bancos, aseguradoras y fondos de inversion asumirian un riesgo inflacionario mucho mayor, lo que derivaria en alzas en las tasas de interés, acortamiento de plazos, y una caída en el acceso al crédito, especialmente para los sectores medios. El verdadero problema no es la UF, sino la persistencia de una inflación superior a la meta del Banco Central. Culpar a la UF por los altos precios es como culpar al termómetro por la fiebre.
La solución real pasa por políticas macroeconómicas responsables, disciplina fiscal y fortalecimiento de la productividad. ¿Puede mejorarse la comunicación sobre la UF y su uso? Por supuesto. ¿ Puede limitarse su aplicación en ciertas áreas para favorecer mayor transparencia en los precios de consumo masivo? También. Pero eliminarla por completo sería, sin exagerar, un retroceso técnico y financiero con costos de transición altísimos y consecuencias impredecibles para el mercado de capitales. Chile no necesita menos UF; necesita menos inflación. Y para eso se requiere seriedad técnica, no fórmulas mágicas.. Marcelo Gutiérrez, Abogado, MBA en Gestión de Negocios y Académico Universidad del Alba OPINIÓN