Autor: JEAN PALOU EGOAGUIRRE
La comandante en jefe de la desinformación de Vladimir Putin
La comandante en jefe de la desinformación de Vladimir Putin { PERFIL Margarita Simonyán }n RT: Noticias y conspiracionesSegún Mykola Makhortykh, académico de la Universidad de Bern que ha estudiado las campañas de desinformación de Rusia, “RT es principalmente un instrumento de operaciones de información del Kremlin”, pero para ello ha tenido que llegar a un equilibrio que confunda y amplíe sus audiencias, y el rol de Simonyán sería clave en este enfoque. La especialista Sarah Oates destaca que todo ha sido planificado desde arriba. “El gobierno ruso invirtió mucho dinero en RT y creó algo que parecía un medio de noticias.
Esto es particularmente útil para el gobierno ruso porque, aunque RT difunde muchas noticias, junto a estas hay artículos o columnas de opinión que diseminan narrativas clave de la propaganda rusa: que Rusia es una gran nación resurgente, que protege a los rusos sin importar dónde vivan, que la democracia está fallando, y que Occidente está en contra de Rusia”, afirma. UR. NILMERK. NEñol, francés e inglés), ha consolidado una audiencia semanal de unas 70 millones de personas y su canal en YouTube tiene sobre 4.500 millones de visualizaciones. Pese a sus responsabilidades ejecutivas, se reservó un lugar como comentarista televisiva e influencer en las redes sociales, especialmente en temas sensibles como la guerra de Ucrania.
Cuando comenzó la invasión, Simonyán dijo no entender “por qué no hay champán en el estudio, he estado esperando este momento durante ocho años”, calificó a los ucranianos de “desagradecidos” y “traidores” y acusó a sus colegas que no apoyaron la iniciativa bélica de “no ser realmente rusos”. “¡Nadie está luchando contra los ucranianos! ¡Estamos liberando Ucrania! ”, ha afirmado. Y su tono solo ha escalado. “O ganamos, o las cosas terminarán muy mal para toda la humanidad”, advirtió el año pasado, y sugirió que Rusia debería “enviar tropas” más dentro de Europa.
Al aceptar la Orden del Honor, le dijo al Presidente ruso: “Gracias por matar a los caníbales”. “Simonyán ha sido una de las principales caras de la propaganda del régimen de Putin y argumentaría que es una de las figuras rusas más conocidas en EstadosUnidos.
Así como RT ha imitado el formato de la BBC o CNN de muchas maneras, Simonyán podría verse como una especie de analista que aparecería en un programa político como los de Fox”, dice Sarah Oates, autora de “Seeing Red: Russian Propaganda and American News”. “Se presenta como periodista, pero está muy claro que no lo es y que tiene una agenda política. Sin embargo, esto también es cierto para personas como Tucker Carlson o Sean Hannity, en quienes el público (estadounidense) entiende que tienen inclinaciones políticas. Simonyán encaja en ese modelo más nuevo de personas que se hacen pasar por periodistas, pero en realidad son propagandistas”, agrega.
Para Scott Radnitz, autor de “Revealing Schemes: The Politics of Conspiracy in Russia and the Post-Soviet Region”, Simonyán es una de las más vehementes defensoras del Kremlin fuera de Rusia: “Con comentarios coloridos y humorísticos, critica a Occidente y apoya incondicionalmente la postura de Rusia en temas internacionales, incluida la guerra en Ucrania. Se la podría considerar una troll en su contribución al discurso público.
Es combativa, provocadora, descarada y extremadamente leal a Putin”, la describe. en New Hampshire, becada por el Departamento de Estado de EE.UU. en un programa de “futuros líderes”. Partió en el periodismo televisivo a los 19 años, cuando fue designada a la cobertura de la rebelión separatista de Chechenia donde recibió la medalla al “coraje profesional”. Se hizo conocida por ser la primera periodista en llegar a la escuela de Beslán, en 2004, cuando un grupo islamista masacró a 334 personas, y a los 22 años fue designada corresponsal fija en el Kremlin, donde entró en contacto cotidiano con Putin. Sus lazos con el poder se consolidaron cuando a sus 25 años fue nombrada como la primera editora en jefe de la cadena de noticias internacional Russia Today, que desde 2013 pasó a llamarse RT.
“RT tal vez alguna vez se presentó como una emisora internacional seria que ofrecía una pers-pectiva alternativa a los medios convencionales como CNN y la BBC, pero se convirtió en uno de los principales canales de propaganda del régimen de Putin.
RT siempre ha evitado la idea de objetividad, y aunque antes se enfocaba en proyectar una imagen positiva de Rusia, ahora RT es un difusor de teorías de conspiración sensacionalistas y desinformación sobre la guerra de Putin contra Ucrania”, dice Rhys Crilley, investigador de la Universidad de Glasgow y autor de “Russia, Disinformation and the Liberal Order”. Crilley destaca que “como joven editora en jefe de RT, (Simonyán) desempeñó un papel esencial en la construcción de RT como una marca mediática global (). Ella aborda el periodismo con la creencia de que no existe tal cosa como la objetividad, y piensa que cualquier afirmaciónde imparcialidad y neutralidad por parte de medios internacionales como la BBC es una tontería, porque cree que todos los medios internacionales apoyan los intereses del país que los financia. Para Simonyán, RT existe para proporcionar una perspectiva rusa sobre las noticias en el contexto de una guerra de información entre Occidente y Rusia”. El imperio mediático del KremlinSimonyán se ganó la confianza de Putin. Desde 2013, la periodista lleva también las riendas de la agencia estatal Rossiya Segodnya, que reúne la agencia de prensa RIA Novosti, la radio La Voz de Rusia y varios sitios web, como Sputnik.
Bajo su liderazgo, y con un presupuesto generoso, RT tiene un servicio de noticias en cuatro idiomas (árabe, espa-La directora de la cadena RT ha sido la artífice de la estrategia del Kremlin para “ganarle la guerra informativa a Occidente”. Cuando Margarita Simonyán, la directora de la cadena RT (antes conocida como Russia Today), fue apuntada por Washington como la “figura central en los esfuerzos de influencia maliciosa del gobierno ruso” e incluida recientemente en una lista de sancionados junto a otros funcionarios de esa red de noticias vinculada al Kremlin, ella dijo: “¡ Buen trabajo, equipo! ”, y también respondió a las autoridades estadounidenses que la responsabilizaban por interferir en la tercera elección consecutiva de ese país. “Si nos echan por completo, ¿cómo van a celebrar las próximas elecciones? No tienen otra estrategia que el alarmismo sobre la todopoderosa RT”, ironizó.
A sus 44 años, Simonyán es descrita como la “Goebbels rusa”, la “propagandista en jefe” de Vladimir Putin o incluso “la periodista más peligrosa del planeta”. Ella misma declara que busca “ganarle la guerra informativa a Occidente” y compara su rol en los medios de comunicación rusos con el del Ministerio de Defensa. “Es una infoguerra en la cual utilizamos todas las armas posibles para restablecer la verdad, que es frecuentemente distorsionada por la prensa occidental”, señala. “Trabajar con la opinión pública es un arma”, dice. Becada por el Departamento de Estado de EE.UU. De origen armenio, Simonyán nació en la ciudad sureña rusa de Krasnodar cercana a la península anexada de Crimea y se graduó en la Universidad Estatal de Kuban. En 1995 pasó un año en un programa de intercambio. { PERFIL | N comenzó en el periodismo televisivo con 19 años, cuando cubrió la guerra en Chechenia.