Con ataques a candidatos y legisladores, escala la violencia política en América
Con ataques a candidatos y legisladores, escala la violencia política en América POLICÍAS INSPECCIONAN la escena del atentado contra el senador colombiano y candidato presidencial Miguel Uribe, uno de los mayores hechos de violencia política que ha visto la región en el último tiempo.
FRANCE PRESSE E l asesinato de una legisladora estatal y su marido en Estados Unidos hace una semana y el tiroteo días atrás contra un senador colombiano --cuyo estado de salud aún es crítico-son dos episodios que se suman a una serie de ataques contra figuras públicas, candidatos y políticos electos que han tenido lugar en el último tiempo en la región, y que dejan entrever una escalada en la violencia política en América, en medio de un auge de la polarización y los discursos extremistas, que según los expertos, han hecho disparar las amenazas. Con cifras récord de intentos de asesinato y ataques contra autoridades, Estados Unidos ha sido uno de los países más afectados en los últimos días.
La semana pasada fue asesinada a tiros Melissa Hortman, legisladora demócrata del estado de Minnesota, que fue atacada en su hogar por un hombre que horas antes había disparado contra otro senador estatal y su esposa, quienes resultaron heridos.
A estos hechos se suman el asesinato a mediados de mayo de dos empleados de la Embajada de Israel en Washington, y el incendio provocado en abril contra la residencia del gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, mientras él y su familia dormían dentro. "Una violencia tan horrible no será tolerada en Estados Unidos", dijo el Presidente Donald Trump tras los ataques a los legisladores.
Él mismo fue víctima de dos intentos de asesinato el año pasado en plena campaña electoral: uno ocurrió durante un discurso en Butler, Pensilvania, en el que recibió un disparo en la oreja, y dos semanas después en Florida, un hombre se acercó con un rifle semiautomático a su campo de golf.
Los expertos, no obstante, achacan a su figura parte del aumento en los actos violentos que han tenido lugar en Estados Unidos, al intensificar la polarización en el país con su encendida retórica contra quienes se oponen a sus medidas, y a quienes, por ejemplo, ha tildado de "enfermos", "traidores", "criminales" o "animales", y ha dicho que los "matones de izquierda radical" deben ser erradicados. "La retórica polarizadora contribuye a un ambiente en donde es más probable que se produzca violencia selectiva", explica a "El Mercurio" John Horgan, director del Grupo de Investigación sobre Extremismo Violento de la Universidad Estatal de Georgia. "Esto aplica al discurso de odio antes de tales ataques, pero tampoco debemos subestimar el poder de la retórica dañina que surge después de ellos. (... ) El extremismo se ha vuelto común en la política estadounidense.
La administración actual ha comenzado a normalizar y convertir en rutina el discurso de odio y los actos de violencia contra sus propios civiles", agrega el experto. "Ambiente de odio y estigmatización" La violencia no se limita a Estados Unidos. Hace dos semanas también se registró el intento de asesinato contra el senador y precandidato de la oposición a la Presidencia de Colombia, Miguel Uribe, quien hasta hoy se mantiene internado y en estado crítico.
El crimen desató una oleada de cuestionamientos de parte de la oposición al Presidente del país, Gustavo Petro, a quien acusan de haber creado un ambiente político tóxico previo al ataque, al calificar de "nazis" y "esclavistas" a los legisladores que se han opuesto a sus reformas en el Senado. "(El intento de asesinato) es consecuencia del ambiente de odio y estigmatización que ha promovido el gobierno de Gustavo Petro contra quienes pensamos distinto", lanzó María Fernanda Cabal, senadora y precandidata opositora a la Presidencia de Centro Democrático, contra el mandatario, q u i e n t r a s e l ataque se comp r o m e t i ó a "bajar el tono", según confirmaron desde el propio Ejecutivo.
Otro episodio que marcó un antes y un después en el historial de violencia política en la región fue el asesinato a tiros en 2023 del candidato presidencial Fernando Villavicencio, en plena campaña electoral en Ecuador, a manos de un grupo de sicarios.
Previo a su paso por la política había trabajado como periodista investigando a bandas criminales, sus vínculos con el poder y la corrupción política en el país, y de salir electo prometía implementar una fuerte campaña anti crimen. "En ciertos contextos, la violencia política se incrementa en paralelo con un deterioro generalizado de la seguridad.
En zonas con fuerte presencia del crimen organizado (... ) atacar a candidatos, líderes locales o funcionarios se convierte en una forma de influir en decisiones políticas o eliminar obstáculos a su dominio territorial", comenta a este diario Sandra Pellegrini, analista sénior para América Latina y el Caribe de la ONG Acled, (Armed Conflict Location and Event Data Project). Presidentes apuntados Un año antes, también en América Latina, se registró el intento de asesinato contra la expresidenta argentina Cristina Fernández (2007-2015), que ocurrió mientras la líder peronista saludaba a decenas de simpatizantes frente a su residencia en Buenos Aires.
El hecho, en el que un hombre le apuntó con una pistola en la cabeza, sucedió en momentos de alta tensión política en el país, ya que en ese entonces comenzaba el primero de los juicios que tiene la exmandataria por corrupción. En Argentina, el actual Presidente, Javier Milei, ha sido señalado por intensificar la polarización política.
Desde que llegó al poder ha mantenido una retórica divisiva contra opositores, académicos y sobre todo periodistas, a quienes ha calificado de "mentirosos" y "sicarios mediáticos", y contra q u i e n e s l a s agresiones aumentaron en un 53% durante su primer año de g o b i e r n o (2024), según datos de Fopea.
A su vez, durante el proceso e l e c t o r a l d e 2024 en México --en el que se elegían numerosos cargos, entre ellos, Presidente, senadores y diputados--, más de 30 aspirantes y funcionarios fueron asesinados, y ocurrieron unas 370 agresiones contra candidatos, según el think tank mexicano Laboratorio Electoral, convirtiendo estos comicios en uno de los más violentos registrados en el país.
El entonces Presidente, Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), fue señalado por el tribunal electoral de cometer "violencia política de género" contra la candidata opositora Xóchitl Gálvez, luego de que él dijera que ella había sido designada como aspirante por decisión de los "medios de comunicación" y "empresarios poderosos" enemigos de su gobierno. "La retórica agresiva dirigida a la oposición es importante.
Crea un entorno que puede fomentar actos de violencia política", asegura Michael Shifter, expresidente de Diálogo Interamericano, quien agrega que "la prof u n d a d e s c o n f i a n z a e n l o s líderes e instituciones políticas, junto con las dificultades económicas y los altos niveles de descontento social, también son factores relevantes para explicar la violencia política" en la región.
En un contexto marcado por la creciente polarización: Con ataques a candidatos y legisladores, escala la violencia política en América EVA LUNA GATICA Solo en los últimos días, un senador colombiano fue víctima de un intento de asesinato, y en Estados Unidos una congresista estatal y su esposo murieron tras ser baleados. ESTADO DE SALUD Según el último parte médico, el senador colombiano Uribe Turbay continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital en Bogotá, y está en estado crítico..