Cítricos crecen hacia el centro sur
Cítricos crecen hacia el centro sur Plantación de mandarinos en Lolol, en la región de O'Higgins.
Cítricos crecen hacia el centro sur L a sequía y la variabilidad climática han llevado a un creciente desplazamiento de las zonas producción de cítricos desde la Región de Coquimbo hacia el centro sur, donde encuentran zonas con más recursos hídricos, con bajo riesgo de heladas. Dónde se están concentrando dependerá de si se trata de limones, mandarinas o naranjas.
De acuerdo con Juan Ortúzar, presidente del Comité de Cítricos en la Jornada de la Citricultura 2024, "hay empresas que han arrancado cítricos, han sacado las mandarinas de la Cuarta Región por la poca agua y las han reemplazado por paltos". De todas formas, la región sigue siendo teniendo zonas con buenas condiciones para los mandarinos. "En la Cuarta Región, la mandarina sigue siendo un buen cultivo incluso en Limarí, porque la palta y la uva tienen otros problemas y si bien falta agua, hay dotación, lo que pasa es que se ha restringido la dotación y por eso se arrancan algunos huertos donde hay menos agua y van a lugares donde hay más agua como Elqui o se arrancan más de otros cultivos y se restringe la inversión en general", esgrime Juan Ortúzar.
Con respecto a las nuevas zonas, el asesor Andrés Puebla explica que los mandarinos se han concentrado en la Región de O'Higgins y la parte sur de la Región Metropolitana "donde se tiene agua, pero un clima más limítrofe debido a las heladas". Según el Catastro Frutícola de 2024 de CIREN, la Región de O'Higgins cuenta con 2.999 hectáreas, creciendo en un 22,2% durante los últimos 3 años. Y allí destacan las comunas de Pichidegua, Las Cabras y Palmilla, que no sufren de heladas y cuentan, en general, con buen acceso al agua. En cuanto a variedades, la más plantada es la Murcott, ya que, según Puebla, se adapta bien a la zona y tiene buen calibre, es de fácil pelado y sin semillas.
LIMÓN EN LA METROPOLITANA En cuanto a los limones, la mayoría de las hectáreas se concentran en la Región Metropolitana (R.M. ) con 4.009 ha de superficie según el Catastro Frutícola de 2023 de CIREN, seguido por Valparaíso con 2.543. Para Andrés Puebla, las nuevas zonas idóneas para limones en la Región Metropolitana están en Isla de Maipo, El Monte, Curacaví y Melipilla. En tanto, en la Región de O'Higgins también existen puntos interesantes como Peumo y San Vicente de Tagua-Tagua. "De ahí al sur las heladas comienzan a ser más extremas", sostiene Puebla.
Y agrega que en la Región de Valparaíso también son idóneas zonas como Santo Domingo, La Calera y Quillota, las que cuentan con un buen acceso al agua del Maipo y el Aconcagua y tienen un clima "que no es tan frío, lo que se traduce en tolerar heladas". La región de O'Higgins, en tanto, sufre de heladas más agresivas, lo que podría subsanarse con el uso de variedades más resistentes al frío, como Genova y Messina, aunque son de menor producción. "Hay una cultura de querer plantar variedades más productivas, aunque sean menos resistentes al frío, ahí está la disyuntiva que ha llevado a que algunos se están cambiando o volviendo a las variedades más resistente", agrega Puebla. ALTERNATIVAS PARA NARANJAS Al igual que las mandarinas, la falta de disponibilidad de agua hizo que las naranjas se desplazaran a la Región Metropolitana y a la de O'Higgins durante los últimos tres años. Hoy representan 2.857 y 2.401 hectáreas respectivamente, abandonando progresivamente a la Región de Coquimbo que en los últimos 10 años pasó de 1.054 hectáreas a 586 en 2024, según el Catastro Frutícola 2024 de CIREN.
Juan Ortúzar proyecta que "la quinta y la RM y la sexta tienen más agua y, por tanto, mejores oportunidades para crecer ante nuevas oportunidades de mercado". Melipilla y El Monte son las zonas óptimas en la RM, según los expertos. Mientras que en O'Higgins, Las Cabras, Pichilemu y San Vicente de Tagua-Tagua, toman fuerza. Según s Puebla, "la condición climática hace que las naranjas se den bien ahí. El naranjo necesita una amplitud térmica que le permita tener una buena toma de color y un buen calibre.
Además de que se pueden dar buenas temperaturas para que esa fruta pueda tener una buena calidad interna y una buena relación de acidez con azúcar". Agrega que los suelos de dichas zonas son francos y arcillosos, en los que en general se dan muy bien los cítricos. Sobre la búsqueda de variedades, el asesor estima conveniente usar como variedad temprana la Fukumoto y a la Lane Late como naranja de media estación, y, para cosechas tardías, las Valencias. CONSIDERACIONES PARA SELECCIONAR ZONAS La selección de una zona para la producción de cítricos se verá condicionada por el tipo de especie, variedad y condición de la superficie. Aun así, Gonzalo Vargas, experto y asesor de cítricos, sostiene que existen consideraciones transversales que se deben tener en cuenta. Una de ellas es la disponibilidad de agua, ya que "si es subterránea, se tiene que considerar cuántos litros por minuto puede disponer. En caso de ser agua de canal, hay que ver cómo funciona si son cola o cabeza de canal", sostiene Vargas.
Los cítricos consumen mucha agua a diferencia, por ejemplo, de los paltos, que se adaptan mejor a la sequía. "Uno puede sacar hasta 25 toneladas por hectárea, pero con los cítricos puedes llegar a producir hasta 80 por hectárea y eso es mucha agua", dice Vargas.
Otro factor importante, previo a instalar el cultivo, es realizar un buen análisis de suelo y agua, considerando porosidad y capacidad de drenaje. "Hay que hacer un análisis de fertilidad completa que considere magnesio, calcio, sodio, nitrógeno (N), fósforo (P) y potasio (K), etc. y analizar si el agua viene con sodio alto, ya que eso puede afectar el suelo", dice Vargas.
También es importante la salinidad del agua, porque, por ejemplo, el sodio va apretando el suelo, lo que hace que pierda los macro poros, haciendo que el agua pierda movilidad, mientras que los árboles con la sal van envejeciendo al igual que un ser humano, lo que hace que el proyecto pierda potencial en el tiempo, según Vargas.
El análisis de clima también surge como una parte fundamental a la hora de considerar nuevas superficies para la producción de cítricos. "Puedes tomar un análisis de la macrozona, pero tiene que ser muy fino hacia el predio. A veces la macrozona tiene tanta acumulación térmica con presencia de heladas, pero en tu predio posiblemente el clima cambia. Ahí entramos al microclima", explica Vargas. Teniendo esta información el agricultor puede decidir qué proyecto de cítricos desarrollar y determinar, por ejemplo, el tipo de variedad (temprana, media o tardía) y el porta injerto a utilizar. Limones, naranjos y mandarinos se alejan de la Región de Coquimbo y ganan fuerza en Región Metropolitana y hasta la de O'Higgins. Aquí les dejamos, además, las consideraciones clave antes de elegir una nueva zona. VICENTE TORRES LEA EL ARTÍCULO COMPLETO en www.elmercurio.com/campo.