Donald Trump: ¿Hay que tomarse en serio sus promesas y amenazas?
Donald Trump: ¿ Hay que tomarse en serio sus promesas y amenazas? [AnáLisIs] Donald Trump: ¿ Hay que tomarse en serio sus promesas y amenazas? Asume mañana y ha propuesto: expulsar miles de inmigrantes, aplicar nuevos aranceles a importaciones de China, Canadá, México, anexionar Groenlandia, "liberar" el Canal de Panamá o barrer con las turbinas eólicas marinas y la ideología "woke". Agencias/Redacción ando Donald Trump C habla de no descartar el poder militar estadounidense para tomar el Canal de Panamá o considera la idea de anexionar Canadá, el futuro mandatario estadounidense está usando una de sus más conocidas técnicas para negociar, pero ¿ cómo entender sus amenazas y promesas cuando llegueal poder dentro de 24 horas? El republicano, que ya gobernó el país entre 2017 y 2021, volverá mañanaala Casa Blanca con un centeCasa Blanca con un centenar de promesas que asegura que cumplirá en su primer día en el cargo, como deportaciones masivas de migrantes, el indulto para los encausados por el asalto al Capitolio o la derogación de políticas medioambientales.
En las últimas semanas como presidente electo ha sacudido además el tablero internacional con amenazas arancelarias contra sus dos vecinos, México y Canadá, eincluso con la broma, cada vez más insistente, de incorporar el territorio canadiense como el estado número 51 de Estados Unidos.
Trump también desató la indignación en Panamá alamenazar con recuperar el control estadounidense del canal, traspasado a los panameños en 1999, y ha desempolvado su vieja idea de comprar Groenlandia, un territorio danés de alto valor estratégico.
Durante el primer mandato del magnate neoyorquino, no siempre estuvo clarosi su retórica, muchas veces incendiaria, escondía intenciones reales o si, por el contrario, era una maniobra de distraccióno una forma de presión para forzar algún tipo de negociación. Trump no es solo un hombre de negocios del mundo inmobiliario, sino también una celebridad de la televisión muy acostumbrada a conseguir atención pública mediante la provocación. Su estrategia para negociar y ascender, que la aprendió del abogado neoyorquino Roy Cohn, consisteen atacar siempre, nunca disculparse y jamás admitir una derrota. Para algunos, sus últi "mos comentarios son solo ocurrencias.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo, a pocos días de dejar el cargo, que "no vale la pena invertir tiempo" en hablar de la anexión de Groenlandia o del Canal de Panamá porque son cosas que no van a ocurrir.
En cambio, el congresista republicano Carlos Giménez advirtió en una entrevista con Fox Business que a Trump hay que tomarlo "en serio, aunque puedasonar un poco extraño" lo que dice. "Su estilo lo ha demostrado, es una técnica que plantea situaciones que pueden parecer inverosímiles con el propósito de poner el tema sobre la mesa", dijeron a Efe fuentes del Partido Republicano. TROLEO ATRUDEAU Lo cierto es que sus palabras ya generaron algunas consecuencias incluso antes de llegar a la Casa Blanca.
El troleo al que sometió al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, rebajándoloal nivel degobernador, debilitó aún más al político canadiense en un momentoen el quese enfrentaba al declive de su popularidad y auna revuelta interna.
Herido de muerte, anunció su dimisión en diciembre.. Donald Trump: ¿ Hay que tomarse en serio sus promesas y amenazas? El republicano amenazó además con hacer sufrir "un infierno" a Hamás sino liberaba a los rehenes antes desu investidura y la participación desu equipo fue clave para desbloquear el acuerdo para la tregua en Gaza que comienza hoy.
Pero por otro lado, durante su primer mandato muchas de las medidas que anunció a bombo y platillo no lograron materializarse, ya sea porque naufragaron en los tribunales o por problemas en su implementación debidoa una administración a veces caótica.
Porejemplo, ahora asegura que, al poner un pie en el Despacho Oval, pondrá fin a la ciudadanía por nacimiento -un principio consagrado en la Enmienda 14 de la Constituciónpara evitar quelos hijos de los migrantes indocumentados adquieran la nacionalidad estadounidense. Sin embargo, eso requeriría una modificación dela Constitución aprobada por dos tercios de ambas cámaras del Congreso y ratificada por tres cuartas partes de los 50 estados, algo prácticamente imposible. LOS ARANCELES DE TRUMP Trump ha calificado los aranceles como "las palabras más bellas" en inglés.
Ahora planea convertirlos ensu amenaza económica predilecta, pero ¿ cómo piensa aplicarlos? El equipo de Trump contempla tres posibles estrategias: retomar el enfoque tradicional que utilizó en su primer mandato, acelerar el proceso mediante una declaración de emergencia nacional o limitar los aranceles a sectores específicos para reducir su impacto en los consumidores. Como ya hizo durante su primer mandato, Trump prometió aranceles sobre los tres mayores socios comerciales de Estados Unidos, Canadá, México y China, una vez quetome posesión como presidente.
Anunció un gravamen del 60 %a las importaciones chinas, un 25% a las procedentes de Canadá y México hasta que refuercen sus medidas contra el narcotráfico y la inmigración irregular y entre un 10% y un 20% a productos del resto del mundo, incluida la Unión Europea.
No obstante, Trump anunció esta semana su primera fórmula: la creación de un Servicio de Impuestos Externos para recaudar aranceles y otros ingresos de naciones extranjeras "Empezaremos a cobrar a los que se lucran a costa nuestra con el comercio, y empezarán a pagar", dijo en Truth Social y comparó su creación con el Servicio Interno de Impuestos del Departamento del Tesoro. La creación de una nueva agencia requiere una ley del Congreso, y los republicanos tienen la mayoría en ambas cámaras, la Cámara de Representantes y el Senado. CAMBIO CLIMÁTICO Otro gran campo de batalla para Trump se abre en el medioambiente. Hace semanas, de hecho, encargó a un congresista de Nueva Jersey y crítico vocal de la energía eólica marina que redactara una orden ejecutiva que pudiera emitir para detener ese tipo de iniciativas. La energía eólica marina es una parte importante de la transición a una red eléctrica alimentada completamente por fuentes que no emiten dióxido de carbono. El sector enerico es responsable de casi un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero que calientan el planeta. En la campaña electoral, Trump prometió acabar con la industria eólica marina tan pronto como regresara a la Casa Blanca.
Quiere impulsar la producción de combustibles fósiles como el petróleo, el gas natural y el carbó; que causan el cambio cl mático, para que, según él, Estados Unidos tenga la energía y la electricidad más baratas de cualquier nación del mundo.
La semana pasada, Biden anunció una orden ejecutiva para prohibir las perforaciones de petróleo y gas en las costas de Estados Unidos, que el presidos Unidos, que el presidos Unidos, que el presidente electo prometió revocar "inmediatamente". El representante republicano Jeff Van Drew relató que habló con Trump por teléfono hace aproximadamente un mes y lo instó a actuar según su promesa de campaña. "Dije Señor Presidente, necesitamos avanzar en esto. * Él dijo, 'Sí, definitivamente lo hacemos. Estoy de acuerdo.
Estoy en contra de ellos"", dijo Van Drew. "Entonces me dijo, "Redacta una orden ejecutiva, entrégala a mi gente, Van Drew declaró a The Associated Press que rápidamente envió por correo electrónico un borrador de la orden a Doug Burgum, la elección de Trump para ser secretario del interior.
Van Drew dijo que el borrador busca detener el desarrollo de la energía eólica marina desdeRhode Island hasta Virginia durante seis meses para que el próximo secretario del interior pueda revisar cómo se emitieron los arriendos y permisos.
Van Drew dijo que cree que las aprobaciones no tuvieron en cuenta completamente el impacto en la industria pesquera, el turismo, las ballenas o las cuentas de los estadounidenses, y es problemático depender de compañías extranjeras de energía renovable que construyen los parques eólicos. Trump dice que las turbinas eólicas son horribles y caras. Repite afirmaciones infundadas sobre la amenaza de la energía eólica marina para las ballenas. El gobierno estadounidense actual trabajó para impulsar la incipiente industria eólica marina a fin de abordar el cambio climático como una amenaza existencial. Al igual que grandes tecnológicas como Meta están revisando sus programas de verificación y sus políticas de conducta, el "efecto Trump" se nota en las finanzas verdes.
Un solo ejemplo: los seis mayores bancos de EE.UU. -JP Morgan, Citigroup, Bank of America, Morgan Stanley, Wells Fargo y Goldman Sachs abandonaron la Alianza Bancaria Cero Emisiones (NZBA), un grupo internacional de entidades financieras comprometidas con la neutralidad carbónica impulsado por la ONU.
GUERRA CULTURAL Finalmente, otro frente pasó a ser más que una amenaza cuando la élite de multimillonarios de Estados Unidos, encabezada por los líderes de Silicon por los líderes de Silicon Valley, recibió con los brazos abiertos el segundo mandato de Trump, con un ostentoso apoyo económico y respaldo asus ideas anti woke' (progresistas) sobre la inclusión de las minorías, la censura o los monopolios.
Se espera que el idilio político entre Silicon Valley y el presidente electo quede patente en el acto de investidura de mañana, donde los ejecutivos de Tesla, Amazon y Meta, hombres más ricos del mundo y patrocinadores del evento, se sentarán cerca de Trump, sus miembros de Gobierno, legisladores y expresidentes.
Noes inusual que grandes empresas y magnates contribuyan a un acto de investidura, pero el récord de 170 millones recaudados hasta el cierre de esta edición para la toma de posesión de Trump contrasta con los 62 millones de Biden hace cuatro años, según datos de la Comisión Federal Electoral.
La primera prueba de que el acercamiento a Trump está dando frutos la representa Elon Musk, que gastó unos 270 millones en propulsar su candidatura y ahora se ha convertido en su mano derecha, tras ser designado como codirector de la nueva EFE/EQUIPO DE TRANSICIÓN TRUMPVANCE agencia de eficiencia gubernamental (DOGE), con la que supuestamente pretende *adelgazar" la administración.
Desde su posición, Musk, propietario deX, ha usado su influencia para alimentarla llamada "guerra cultural" de los conservadores de EE.UU. contra las ideas "woke' de diversidad, igualdad e inclusión (DEI), y contra una corrección política que tilda de censura. Esa cruzada de Musk, que comparte con Trump, se está reflejando en un viraje a la derecha entre las grandes tecnológicas.
Por ejemplo, Meta desmanteló sus políticas DEL y eliminadola verificación independiente de contenidos para aplicar un sistema de notas comunitarias similar al de X; su jefe, Mark Zuckerberg, en un video, consideTó las elecciones en EE.UU. "un punto de inflexión cultural hacia la priorización de la libertad de expresión". Amazon también adoptó la línea ideológica de Trump, eliminando medidas inclusivas para empleados LGTBQI y de minorías raciales, y sumándose a otras que han hecho lo propio fuera de este sector, como Walmart, McDonald's, Boeing o Ford. O. - - -