La USS tiene un yate: sus alumnos van a clases en altamar
La USS tiene un yate: sus alumnos van a clases en altamar El Centinela 1 emprende viajes de varios días; a bordo, los estudiantes aprenden a navegar La USS tiene un yate: sus alumnos La idea es que al titularse puedan acreditarse ante la Armada como capitanes costeros, explica encargado del curso.
Oscar VALENZUELA Oscar VALENZUELA Francia, en el astillero Beneteau; mide 57 pies de largo (aproximadamente 17,2 metros), cuenta con velas y un motor diésel con autonomía de 70 horas, 15 literas para igual número de ocupantes, cocina y cuatro baños.
La nave es también la primera aula flotante implementada por la Universidad San Sebastián, que adquirió el barco para distintos propósitos: entre ellos, hacer clases en altamar a los alumnos de la carrera de Ingeniería en Gestión de Expediciones y Ecoturismo (IGEE), en la asignatura de navegación a vela y motor. "Antes teníamos que arrendar yates, por eso decidimos tener el nuestro", explica Francisco Sánchez, director del proyecto Yate Escuela Centinela I. Lotiraron al agua en Algarrobo y su primer recorrido fue de cerca de 700 millas náuticas hasta Puerto Montt, que será su puerto base. Desde ahí ya han realizado dos viajes con alumnos por el Golfo de Ancud, el espacio del océano Pacífico entre Chiloé y el continente, visitando distintos lugares con gran potencial turístico. Primero fueron seis estudiantes de Puerto Montt, que estuvieron 13 días en instrucción académica. Por estos días se encuentran viajando 12 alumnos de la sede Santiago, que este fin de semana retornan de su periplo de casi dos semanas.
Luego se embarca otro grupo de universitarios. ¿De qué les sirve aprender a navegar? "Una vez que terminan esta asignatura pueden ir a la Armada, que les hace una examinación para certificarlos como capitanes costeros", destaca Francisco Sánchez. Este documento les puede servir para su carrera profesional si quieren dedicarse al turismo marítimo. "Después se pueden transformar en capitanes de alta mar, solamente sumando millas náuticas de navegación. Buscamos que salgan al mercado laboral ya con mayor experiencia y con sus certificaciones al día", agrega.
Un día a bordo A bordo de la embarcación los alumnos se dividen las tareas, rotándose para hacer aseo, cocinar, realizar maniobras de navegación en cubierta, aprender mantenimiento del motor o E yate Centinela I fue fabricado en van a clases en altamar van a clases en altamar van a clases en altamar CEDIDA CEDIDA La alumna Josefina Chacón se encuentra por estos días viajando en el yate. La nave mide 172 metros de largo. ' largo. ' largo. ' largo. ' largo. ' largo. ' largo. ' largo. ' manejo de velas. "La jornada parte aproximadamente a las 8 de la mañana.
El grupo encargado de interior ese día prepara el desayuno para toda la tripulación y también se encarga del orden y la limpieza al interior de la embarcación", cuenta Josefina Chacón Valenzuela, alumna de cuarto año de IGEE de la USS con especialidad en ambientes acuáticos, quien se encuentra a bordo de la nave: ya ha visitado lugares como Hualaihue, Cholgo, Huinay o Caleta Porcelana. "Aproximadamente a las 9 de la mañana el capitán comienza la revisión previa, revisando el motor y las sentinas (NR: parte baja de la sala de máquinas que recolecta líquidos de tuberías y bombas), para asegurarse de que todo esté en orden. Por otro lado, la tripulación de cubierta ordena lado, la tripulación de cubierta ordena CEDIDA los aparejos, para empezar la navegación", relata. Durante la jornada se realizan diversas maniobras, dependiendo del rumbo que hayan tomado. "Terminamos entre 7 y 8 de la tarde, para luego cenar y esperar las instrucciones para el día siguiente. En ese momento se analiza la meteorología y la ruta a navegar, para que sea la más conveniente", comenta la alumna. El viaje le ha sido muy útil, destaca. "Hemos aprendido muchísimo sobre navegación, ha sido una experiencia gratificante y llena de conocimientos", asegura la joven.
Otros usos Además de los fines académicos, la idea es que el yate sea utilizado también para viajes científicos y expediciones -el proyecto es llegar a Campos de Hielo además de realizar operativos médicos; por ejemplo, llevando alumnos de carreras del área salud para que atiendan en lugares apartados. "También vamos a estar alineados con la Armada para prestar apoyo en caso de cualquier catástrofe que ocurra", afirma Francisco Sánchez. "Por eso lo denominamos con ese nombre, porque el centinela está siempre atento", concluye..