Autor: Gonzalo Serrano del Pozo Doctor en Historia Facultad de Artes Liberales Universidad Adolfo Ibáñez
COLUMNAS DE OPINIÓN: La rueda de la fortuna
COLUMNAS DE OPINIÓN: La rueda de la fortuna é é Gonzalo Serrano del Pozo Doctor en Historia Facultad de Artes Liberales Universidad Adolfo Ibáñez El ingeniero estadounidense George Washington Ferris creó esta obra con motivo de la exposición que se realizó en Chicago en 1893 para conmemorar los 400 años del viaje de Cristóbal Colón a América (con un año de retraso)". La rueda de la fortuna los adultos nos mareamos. Atrás quedaron los tiempos en que podíamos subimos sin problemas a cada uno de los juegos del Estero de Viña del Mar en el verano.
Desde las tacitas que daban vueltas sin parar hasta el temible Kamikaze, pasando por esa rueda de madera que giraba en el piso y que nos enseñaba, a fuerza de porrazos, cómo funciona la fuerza centrífuga. Sin embargo, losaños no pasan en vano y esto ha provocado que baste conrecordar estas atracciones para sentir esas desagradables e insoportables náuseas. Por esta razón, jamás me subiría a la rueda de la fortuna que se instaló en Viña del Mar. Las vueltas y la altura excesiva, en este caso 30 metros, son cosas que evito. Por eso mismo, valoro y compadezco a esas 35 personas que quedaron atrapadas hace algunos díasahí alaespera de ser rescatadas por los bomberos. Por suerte, el asunto no pasó a mayores y el gran atractivo sigue causando furor este verano. Fue este hecho el que me motivó a buscar más antecedentes de este aparato que permite a los mortales acercarse al cielo y mirar la ciudad o el mar desde las alturas. Lo primero que encontrées que fue creada por un estadounidense, homónimo del líder delaindependencia y primer presidente de ese país, George Washington Ferris.
Este ingeniero creó esta obra con motivo de la exposición que se realizó enChicago en 1893 para conmemorar los 400 años del viaje de Cristóbal Colón a América (con un año de retraso). Fue la primera feria internacional en la que los países tuvieron laoportunidad de serreu no de losrasgos del paso de losañoses la facilidad con que presentados en pabellones y en la que el anfitrión debía mostrar sus avances frente al mundo.
Lo más importante fueron los edificios creados en el Parque Jackson y entre los cuales sobresalía esta rueda de 75 metros (la más grande es la de Dubái con 250 m). Algunos le dieron el nombre de sucreador, rueda de Ferris, otros del lugar de nacimiento, rueda de Chicago, pero la mayoría optó por rueda de la fortuna.
Casi 30 años después de su creación, una nota de La Estrella de Valparaíso del 28 de enero de 1921 hacía mención a la famosa rueda Ferris, "delicia de niños y hasta los grandes", y la nombraba como una delas tantas entretenciones de las quese deberían preocuparlas autoridades municipales de traera la ciudad para mantener ocupada a la población durante el verano de manera sana y familiar: "Tenemos un pueblo que trabaja a matarse y gana buenos jornales a lasemana, para... ¿para irlo a dejar el domingo en los mesones de cantinas, en casas de juego y ensitios de vicios y corrupción! " Y agregaba más adelante: "¡ Pero busquemos pasatiempos honestos! ", Además de la rueda Ferris, aparecía una foto de las grandes montañas rusas construidas en Coney Island y las "ondas mágicas" que, ajuzgar por la foto, eran el prototipo de los autos chocadores: "¿ Qué tenemos en Chile? ¿ Qué tenemos en Valparaíso? ¡ Absolutamente nada! ", protestaba La Estrella. A más de un siglo de distancia, el invento de Ferris sigue causando furor en Dubái, Londres y ahora en Viña del Mar.
El sueño de volar, de llegar a lo más alto y ver al resto del mundo desde arriba es una experiencia tan vertiginosa como exultante, algo que ni los celulares más modernos pueden entregarnos. pS pS.