Autor: POR BENJAMIN KATZ, SHARON TERLEP y ANDREW TANGEL
Accidente de Boeing en India es el primer incidente fatal que involucra a un 787
Accidente de Boeing en India es el primer incidente fatal que involucra a un 787 PFA CONTENIDO LICENCIADO POR THE WALL STREET JOURNAL El accidente de un vuelo de Air India con destino a Londres es el primer incidente fatal que involucra a un Boeing 787, lo que representa un nuevo golpe para el fabricante estadounidense justo cuando comenzaba a resurgir tras una serie de crisis de seguridad y producción. Esta icónica empresa norteamericana, ya debilitada, ha enfrentado sucesivos problemas en los últimos años, con pérdidas por miles de millones de dólares debido a la paralización de aeronaves y retrasos en la fabricación. El siniestro del jueves amenaza con frenar su frágil recuperación. El avión Boeing 787-8, que transportaba a 242 personas, se estrelló menos de un minuto después de despegar desde un aeropuerto cercano a Ahmedabad, en el oeste de India. Aún no está claro qué provocó el accidente. Los siniestros aéreos suelen deberse a una combinación de factores, que pueden incluir errores de la tripulación, fallos de diseño o fabricación, o causas externas. Boeing informó el jueves que estaba en contacto con Air India respecto al vuelo 171 y que estaba disponible para asistir a la aerolínea. Las acciones de Boeing cayeron cerca de un 5%. El accidente ocurre en un momento crítico para Boeing. La compañía recién se estaba recuperando del impacto de un grave incidente a inicios del año pasado, cuando un panel del fuselaje de un 737 MAX entregado hacía poco se desprendió en pleno vuelo. Ese evento provocó la salida del entonces director ejecutivo de Boeing y reavivó el escrutinio sobre su cultura de seguridad y sus procesos de producción.
Desde entonces, el fabricante ha sufrido importantes pérdidas financieras y demoras, mientras intenta resolver fallas de manufactura y satisfacer las exigencias de la Administración Federal de Aviación (FAA). El avión siniestrado no era una entrega reciente. Había entrado en servicio en 2014 y acumulaba cerca de 8.000 despegues y aterrizajes, según datos de la firma de análisis aeronáutico Cirium. Estaba entre las primeras decenas de unidades producidas del modelo 787. Hasta antes del accidente del jueves, el 787 contaba con uno de los historiales más limpios en seguridad de la aviación comercial, sin registrar accidentes fatales desde su lanzamiento en 2011. Conocido como Dreamliner, el 787 es el avión de fuselaje ancho más vendido de Boeing. Hasta ahora, la compañía ha entregado cerca de 1.200 unidades a sus clientes. El nombre fue escogido mediante un concurso público que recibió alrededor de medio millón de votos.
El modelo ha sido popular entre las aerolíneas gracias a su estructura mayoritariamente conformada por materiales compuestos de carbono, lo que reduce el consumo de combustible, además de mejoras en la cabina como compartimientos superiores más amplios y ventanas más grandes. Sin embargo, el 787 ha enfrentado numerosos problemas de producción. Al principio hubo dificultades en la cadena de suministro y luego incendios en las baterías que llevaron a que los reguladores suspendieran toda la flota en 2013 por algunos meses. Más recientemente, Boeing tuvo que pausar las entregas del avión durante casi dos años debido a problemas de control de calidad. Varios denunciantes internos también han alertado sobre la producción del 787, señalando que los trabajadores eran desincentivados a reportar fallas o sugerir cambios para prevenir incidentes.
En medio de esas denuncias el año pasado, Boeing defendió la seguridad del modelo durante una presentación de dos horas ante la prensa, en la que ingenieros describieron las pruebas exhaustivas realizadas a lo largo de los años para asegurar su integridad estructural. El accidente de Air India representa una nueva prueba para el director ejecutivo de Boeing, Kelly Ortberg, quien asumió en agosto. Sus dos predecesores, Dave Calhoun y Dennis Muilenburg, dejaron el cargo tras enfrentar críticas por su gestión durante crisis anteriores. Ortberg ha declarado que la empresa no puede permitirse más errores. El mes pasado aseguró que la calidad de la manufactura estaba mejorando y que los clientes comenzaban a recuperar la confianza. “Estamos en las primeras entradas del partido”, dijo en una conferencia con inversionistas.
“Pero tenemos un plan y estamos avanzando conforme a ese plan”. Ortberg también indicó que Boeing acababa de recibir luz verde de la FAA para aumentar la producción del 787 a siete unidades por mes, desde las cinco actuales. La agencia había impuesto límites tras el incidente del fuselaje de un vuelo de Alaska Airlines en 2023. Ahora serán las autoridades estadounidenses quienes colaboren con India para determinar las causas del accidente. La investigación probablemente incluirá la configuración de los sistemas de control de vuelo, las comunicaciones entre los pilotos y con la torre de control, además de los registros de mantenimiento. Una pieza clave de la indagación serán las llamadas cajas negras, que registran una gran cantidad de datos del vuelo, incluyendo las acciones de los pilotos y sonidos en la cabina.
Jeff Guzzetti, exinvestigador de accidentes de la FAA y de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de EE.UU., calificó el accidente como especialmente desconcertante, dada la “historia de seguridad impecable del Dreamliner”. “Es un avión excelente, muy apreciado por los pilotos, y con muchas características de seguridad”, comentó Guzzetti. Traducido del inglés por “El Mercurio”. El avión Boeing 787-8 de Air India se estrelló en una zona residencial cerca del aeropuerto de Ahmedabad, India, el jueves. MÁS VENDIDO Conocido como Dreamliner, el 787 es el avión de fuselaje ancho más vendido de Boeing.. La tragedia amenaza con poner en duda la frágil recuperación del fabricante. Acciones de la compañía cayeron cerca de un 5%: