Niños que lloran sin consuelo, agreden a compañeros y destruyen materiales ponen en alerta a jardines infantiles
Niños que lloran sin consuelo, agreden a compañeros y destruyen materiales ponen en alerta a jardines infantiles L a escena se repite cada vez con más frecuencia en jardines infantiles y colegios con educación inicial: niños que lloran sin consuelo, lanzan juguetes, agreden a sus compañeros o destruyen materiales. Lo que antes solía ser una excepción, hoy se estaría volviendo parte del paisaje habitual en establecimientos que forman párvulos.
Así lo constatan educadores, quienes observan con preocupación un aumento de conductas desreguladas en los niños más pequeños, sobre todo tras la pandemia. "Durante los últimos años, he podido observar un aumento en situaciones de desregulación emocional y conductual en los niños, observándose altos episodios de llanto inconsolable, rabietas intensas al momento de separarse del adulto, dificultades para compartir en moment o s d e p a t i o o d e j u e g o, impulsividad y agresión física hacia pares y adultos. También algo que no observábamos, como la destrucción de material o juguetes", comenta la educadora de párvulos Romina Aravena.
Mónica Matus, directora del jardín infantil y sala cuna Juanita, de Puente Alto, coincide. "Después de la pandemia, vemos una mayor desregulación, falta de autonomía, desmotivación, menos creatividad y socialización". Y añade que las conductas desreguladas más habituales son "agresividad hacia otros niños, ya sea verbal o física; conductas disruptivas en el aula y en otros entornos, e impulsividad o falta de control". Según cifras de la Superintendencia de la Educación, en los primeros tres trimestres de 2024 (enero a septiembre) hubo 124 denuncias de convivencia por situaciones de conflicto entre párvulos, que involucran golpes, mordeduras, empujones, rasguños, tirones de pelo, entre otros. El profesor de Música Manuel Puebla señala que no solo se observa en educación inicial, sino también en los primeros años de básica: "Lo he visto con niños de 6 o 7 años. Cuando algo les pasa, ya sea en casa o con sus compañeros, la reacción es intensa.
He tenido casos en que terminan dejando la sala patas para arriba e incluso rompiendo instrumentos musicales". Denisse Ferrada, directora académica del Colegio Santa Marta de Ñuñoa, dice que también han observado un aumento en la "inquietud motora", además de una "baja tolerancia a la frustración". Pantallas y violencia Los educadores coinciden en que se trata de un escenario multifactorial, donde confluyen variables sociales, familiares y tecnológicas.
Un nuevo factor que está influyendo y del que son testigos es el uso excesivo de celulares en niños desde temprana edad. "Está afectando profundamente el desarrollo emocional y social de los niños", asegura Aravena. "Llegan al jardín viendo TikTok o videojuegos, y se genera un gran estrés en ellos cuando el cuidador decide quitárselos", describe. Y suma que la vida agotada y bajo estrés que llevan los adultos también influye: "Creo que esto también está ligado al ritmo de vida que estamos teniendo los adultos. Por lo general, debemos correr a dejar a nuestros hijos a los diferentes centros educativos para luego trasladarnos a nuestros trabajos". Matus complementa al advertir que "el uso de pantallas afecta grandemente.
A eso se suma la violencia en el entorno familiar, especialmente en contextos de vulnerabilidad". La estrategia que han desarrollado para abordar el problema es generar alianzas con las familias para concientizarlos sobre el impacto del uso de pantallas en los niños, y en casos de violencia intrafamiliar, crean experiencias para que los pequeños puedan expresar sus emociones.
Una acción que están promoviendo desde la Junji; en tanto, "es que los equipos educativos y las familias observen y analicen con atención las situaciones que provocan ciertas expresiones emocionales de parte de las niñas y niños, comprendiendo que detrás de cada conducta hay una emoción que necesita ser acogida", señala la vicepresidenta, Daniela Triviño.
Aravena añade que un cambio importante que se requiere es aumentar el número de educadoras por sala, donde suele haber una o máximo dos que atienden a cerca de 30 niños. "Actualmente, nos han estado quitando educadoras y técnicos por sala, siendo que hoy en día se observa que los niños y las niñas necesitan una mayor atención y cobijo por parte nuestra", dice. Distintos educadores de párvulos ven un aumento de estas conductas: M. F. POLANCO Y C. AILLAPAN n El uso excesivo de pantallas a temprana edad, la violencia intrafamiliar y la falta de herramientas emocionales estarían entre las causas. Según datos de la Superintendencia de Educación, en los primeros tres trimestres de 2024 hubo 126 denuncias por situaciones de conflicto entre párvulos.
FREEPIK Apoyo emocional con juguetes Ante el aumento de la agitación, impulsividad y baja tolerancia a la frustración en niños de niveles iniciales, varios colegios han comenzado a incorporar juguetes sensoriales en sus listas de útiles escolares como herramienta de apoyo emocional y de concentración.
Establecimientos como el Colegio Santa Marta (Ñuñoa), el Colegio Domingo Matte Mesías (Puente Alto) y el Colegio Manquecura Valle Lo Campino (Quilicura) han incorporado materiales como láminas de silicona con burbujas para presionar, trompos giratorios, pelotas blandas y figuras elásticas. Estos juguetes permiten a los niños liberar tensión, calmarse y mantenerse enfocados durante la jornada, dicen las educadoras.
Su uso está pensado para todos los niños, y no se usan como premio, sino que cada párvulo puede usarlos cuando los necesite para volver a la calma. `` Muchos niños llegan con celulares en las manos viendo videos de TikTok o jugando videojuegos, y se genera un gran estrés en ellos cuando el cuidador decide quitárselos".. ........................................................................... ROMINA ARAVENA EDUCADORA DE PÁRVULOS.