SERGIO CAMPOS
SERGIO CAMPOS ¿ Cuál es la peor vergüenza que ha pasado alguna vez? La vergüenza es una emoción negativa y la tuve cuando en un acto público presenté a una persona con el nombre de su hermana. Lo peor fue que nadie me dijo nada. ¿Cuál es el rechazo que ha vivido alguna vez? Rechazo, no. Engaño, sí. Con una compañera de estudios de otra escuela. Le dije que me sentía agripado y no podía ir a una fiesta. Me dijo: "No importa.
Yo me iré a mi casa". Decidí ir a la fiesta y la encontré con... ¿A quiénes cree que ha defraudado? A personas e instituciones de regiones que me han invitado, pero no me ha dado el tiempo y la energía.
De todo lo dicho sobre usted, ¿qué le ha causado más gracia? En la presentación de un libro de María Olivia Mönckeberg, en San Antonio, por el caso Karadima, uno de los presentes me dijo: "Usted debería ser candidato presidencial". Con respeto. Lo encontré divertido. ¿Recuerda algún trauma de infancia? Cuando tenía 7 años, en la playa, se me atrapó un pié en una roca, fueron minutos eternos. Alguien me ayudó a destrabarme y me pasé una película entera de mi vida. El miedo a ahogarme me persigue hasta hoy.
No sé nadar, además. ¿Cuál es su queja favorita? "El abuso": El abuso de ciertos padres, al abuso de algunos profesores, de ciertos curas, el abuso de conductores que cuando señalizas para cambiar de pista se apuran para impedir el cambio de carril.
El abuso de precios de medicamentos y productos esenciales. ¿Qué no soporta de otras personas? La soberbia, arrogancia, avaricia, envidia y flojera. ¿Cuál fue su última mentira? Recuerdo una mentira blanca: "Me siento bien". Aunque esté derrumbado, para no incomodar. En realidad, las mentiras blancas no hacen daño. ¿Tiene algún tic o manía? Mirar la hora. No me gusta llegar tarde a dar clases, ni al compromiso frente al micrófono o cámaras. Tampoco a reuniones o al médico. ¿Qué se ha robado alguna vez? Una "Negrita" en un quisco de la plaza de Rengo el día del terremoto de 1960. Tenía 11 años, después se lo confesé al cura en la confirmación. ¿Cuál es su mayor vicio? El cigarrillo hasta los 25 años, cuando nació Lorena, mi hija mayor. Con su primer llanto, lo dejé para siempre. De niño ¿ sufrió o hizo bullying? Tenía un compañero que siempre me golpeaba en los recreos. Un día cuando salimos de la escuela, él andaba en bicicleta y trató de pegarme. Le di con un bolsón de suela y cayó con bicicleta y todo. Fuimos a parar a Carabineros, donde nos hicieron darnos la mano. Nunca más me molestó. Tenía 7 años. ¿En qué momento de su vida sintió más miedo? El día en que se quebró la democracia en Chile con el golpe civil-militar. Caí en un vacío, tenía 24 años. ¿Qué cambiaría de su físico? Bajar unos pocos kilos, pero a edad cuesta más. ¿Qué deuda le queda por pagar? En plata, ninguna.
En tiempo, a mis hijos, nietos y a mi compañera Verónica Toro Pefaur, de toda la vida que me ha acompañado en las buenas y en las malas. ¿Cuál es la compra más innecesaria que ha realizado? Buff... Muchas. ¿Será el síndrome del goce desmedido? Si se hiciera una película sobre su vida, ¿qué actor le gustaría que lo interpretara? Pedro Pascal, de los internacionales. Daniel Alcaíno, de los nacionales. SERGIO CAMPOS Profesor normalista y periodista de Curicó, Rengo y Cooperativa CUESTIONARIO ESENCIAL. - - -