Salud mental, en el centro de la noticia
Salud mental, en el centro de la noticia Durante décadas, la salud mental fue la gran ausente de las políticas públicas no sólo en nuestro país, sino que a nivel mundial. Estigmatizada y relegada, esta área crítica de la salud acumuló silenciosamente una deuda inmensa con miles de personas.
Ahora, la colocación de la primera piedra dci nuevo Centro Comunitario de Salud Mental (Cosam) en Los Angeles representa mucho más que un acto simbólico: es un paso concreto hacia una reparación histórica y una señal de que, al fin, el país comienza a tomarse en serio una de sus crisis más profundas y persistentes.
La inversión de más de 6 mil millones de pesos y la proyección de atención a más de 50 mii personas son cifras que dan cuenta de la magnitud del desafío, desafío, pero también de la voluntad de enfrentarlo.
Este centro no solo significará una mejora en el acceso a atención especializada, sino también una oportunidad para descomprimir la sobrecargada sobrecargada red de salud mental, especialmente en zonas donde los recursos han sido insuficientes por años. El Cosam de Paillihue, además, representa una visión integral del bienestar. Su diseño contempla áreas de esparcimiento y entornos dignos que apuntan no solo a tratar la enfermedad, sino a fomentar la salud y la comunidad. En un barrio históricamente postergado, esta obra pública tendrá también un valor urbano y social transformador, revitalizando espacios, conectando personas y devolviendo dignidad a los territorios.
Es justo reconocer el rol de los distintos actores públicos que hicieron posible este avance: el Ministerio de Salud, Bienes Nacionales, Nacionales, el Gobierno Regional y, especialmente, las organizaciones ciudadanas que han empujado esta demanda por años. Pero también es necesario recordar que esto no debe ser un gesto aislado, sino parte de una política sistemática, sostenida y comprometida a largo plazo.
La salud mental no puede seguir siendo el pariente pobre del sistema de salud, no puede depender de la buena voluntad de las autoridades autoridades de turno, ni de proyectos puntuales, sino que requiere presupuesto estable, redes territoriales sólidas, profesionales capacitados y, sobre todo, un cambio cultural que erradique el estigma y abrace la empatía. El nuevo Cosam de Los Angeles es un inicio esperanzador que esperamos que no sea el último sino el primero de muchos. Celebramos esta buena noticia, y estaremos atentos al desarrollo de sus obras que se espera que esté finalizadas el primer semestre del 2026..