Autor: Jorge Torres Fuentes
Chile, campeón en Inteligencia Artificial
Chile, campeón en Inteligencia Artificial OpiniónAcadémico Escuela de Administración y Negocios Universidad de ConcepciónChile se ha posicionado como líder en el uso de laInteligencia Artificial (IA), según el Índice Latino-americano en Inteligencia Artificial (ILIA), el cual asigna puntua-ciones a diversos factores que estiman los niveles de alfabetización digital y desarrollo en los países de la región. En este análisis, el liderazgo chilenose sostiene en dos pilares fundamen-tales: talento y producción científicae infraestructura tecnológica. Nuestro país destaca en la región por la producción de publicacionescientíficas sobre IA y el desarrollo deprogramas formativos.
Un ejemplo de ello es el programa de Doctorado enInteligencia Artificial de la Universidadde Concepción, inaugurado el presente año junto a otras universidades de la región del Biobío, con lo cualChile amplía el liderazgo en IA en eldesarrollo de habilidades digitales y la educación continua. Pero no basta con formar profesionales especializados, es fundamental que toda la ciudadanía, desde estudiantes hasta trabajadores de distintos sectores, se capacite en competencias digitales básicas y avanzadas. Además, cada vez más docentesestán incorporando IA en sus tareasdiarias, mejorando su productividad y acelerando procesos en cuanto a la creación de pautas, presentaciones, páginas interactivas e instrumentosde evaluación. Esta tendencia haciala modernización educativa optimiza tiempos y recursos, generando un impacto positivo en la enseñanza.
Chile está bien conectado digitalmente y continúa expandiendo su infraestructura con grandes proyectos, como el Cable Humboldt, que unirá Valparaíso con Auckland (Nueva Ze-landa) a través de 14.800 km de fibraóptica, proyectando su entrada en operación para 2026. Por otro lado, el Data Center de Google en Cerrillos es un ejemplo de las inversiones tecnológicas en el país. Sin embargo, su paralización por la falta de aprobación de la resoluciónde calificación ambiental (RCA) reflejaalgunos desafíos burocráticos que afectan este tipo de iniciativas. Las políticas públicas han avan-zado en fomentar la adopción de IAy en formar a la ciudadanía para su uso cotidiano, aunque un obstáculosignificativo es la resistencia culturalal cambio. Como sociedad, buscamos estabilidad laboral, productos de calidad y bienestar. No obstante, nos estamos acercando a modelos europeos más conservadores, que se caracterizan por sobrerregulación y poca inversión en innovación.
Por ejemplo, en 2023, Chile destinó apenas un 0,34%del PIB a Investigación y Desarrollo (I+D), una cifra no tan lejana a la de España (1,43%). Ambos países enfrentan dificultades para atraer grandesinversiones tecnológicas debido a barreras burocráticas, a pesar de que sus ciudadanos son consumidores ávidos de tecnología, conectados en redes sociales y con un incremento en las compras por internet y suscripciones digitales. Chile necesita un cambio cultural que favorezca la libertad para desarro-llar I+D. Esto facilitaría la llegada deempresas tecnológicas que inviertan en el país, desarrollen programas, mejoren la infraestructura y generen empleos estables. Sin estas transformaciones, corremos el riesgo de frenar nuestro avance y perder oportunidades en un mundo que evoluciona rápidamente hacia la digitalización.. Opinión