Segundo mandato de Donald Trump
Segundo mandato de Donald Trump ElEditorialLos históricos aranceles impuestos 4: por Trump podríantener un efectodominó, golpeando los mercados globales de materias se PUBIASy en. consecuencia, lasexportaciones. on la reelección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, Chile enfrenta un escenario incierto en el ámbito económico y político.
La postura proteccionista del presidente norteamericano Donald Trump, ya evidenciada en su primer mandato, podría tener implicancias significativas para nuestro país, especialmente debido a su fuerte relación comercial con China y la dependencia de sectores clave como la minería y las exportaciones de productos primarios... La posibilidad de que Estados Unidos intensifique las tensiones comerciales con China plantea un riesgo evidente: una desaceleración económica del gigante asiático podría reducir su demanda de cobre, afectando directamente los ingresos de las regiones mineras del país. Durante el primer mandato de Trump, el comercio exterior ya experimentó una paralización significativa, exacerbada por la pandemia y la ola proteccionista estadouni-dense, Elproteccionis-monosolo amenazaal cobre. Sectores como el salmón, la fruta, el vino y la madera también podrían enfrentar dificulta-dessiEstados Unidosaplica sobre tasas arancelarias a productos pro-venientes de Chile. Esto resulta complejo, considerando que Chile depende de ambos países: por un lado, China como principal comprador de cobre; por otro, Estados Unidos, que representa el 46% de nuestra dependencia económica. El retorno de Donald Trump a la Casa Blanca plantea desafios significativos para Chile. Desde la posibilidad de una caída en los ingresos por exportaciones mineras hasta la necesidad de redefinir nuestra política exterior, el panorama exige una estrategia clara y proactiva.
Chile debe prepararse para diversificar sus mercados, fortalecer su relación con socios alternativos y mitigar los riesgos derivados de un escenario global cada vez más polarizado.. Una renovada agresividad en las políticas comerciales de Trump podría afectar indirectamente a Chile a través de sus socios estratégicos, como China. Editorial