La historia de la fiebre del Plesiosaurio: la increíble búsqueda de un dinosaurio vivo en la Patagonia
La historia de la fiebre del Plesiosaurio: la increíble búsqueda de un dinosaurio vivo en la Patagonia Una expedición en 1922 intentó hallar este animal en la laguna Epuyén, del sur del país. Cómo fueron los preparativos y la comitiva que incluía cazadores y periodistas. La historia de Clemente Onelli, el italiano que impulsó la búsqueda. y la comparación con la leyenda de Nahuelito. animal enorme y mistorioso aparece en una guna patagónica. El revuelo es enorme. Clemente Oneli, el mayor especialista de tiempo, organiza una expedición que slo en búsqueda La. excursión tiene, como no podía er de cto modo, un cariz más surrealista que cenico. "Algo fota en la laguna. Tisno forma indefinida. Eso pareció norteamericano que viva ena Patagonia aso bien cuando legó a Argentina. Tampoco a qué se dedicaba. Entre las mentiras yas y o queeltiempo deformasstetipo de historias, de a manera "an que acomoda ls hechos para que cuajen enla leyenda, casitooalrcdedor de su vida es imprecio. Pue un poco antes del camio de siglo, O un año después, "Noimporia demasiado.
Sellamaba Martin Shefeld, O, acaso, ase ba Martin Shefeld, O, acaso, ase ba Martin Shefeld, O, acaso, ase ba Martin Shefeld, O, acaso, ase Ffuerasnnombre inventado paró Lvabasiempro an lpecholaesela de seri que había traído desde Texas. Ess elemento, ese "accesorio lo provado autoridad: "accesorio lo provado autoridad: puntería prodigiosa, Dican que. manca erraba un blanco.
Asi Jus estrerando botellas, platos, pal persas y baras por todo el ur del persas y baras por todo el ur del persas y baras por todo el ur del Los pletoaaurios usaban dos paros de altas can idénticas para impularso através del gua. país. Se dedicaba a buscar ro. Recolectaba, con paciencia, pepitas en los cursos de agua que + corria día a día, aroyos que des carganenslRio Chubut En algún momento había ceaboradocomo baqueanoen asexpediciones del PoritoMoreno Luegosacasácon una borges; tuvieron doce js.
Ensustitimos añcese dedicóala ganadería ganadería Eto exótico personaje le xibióunacanaa Clemente Oneli en1922 Habló ds un animal muy na laguna de Epuyén na laguna de Epuyén na laguna de Epuyén parir, hace unos 005 milonos de años. peto concabezadeciane, Cuerpo e cocodrilo tamaño de elíant, Altas, cuello largo. Un golem del reino animal, Primero, do en la carta, vio huellas enormes en la úorila.
Las pisadas eran tan fuertes tan poderceas, que dónde la criaturaapoyabael pie, ya noc: ciaol pasto Eso indicaba que era. que era. alista, como un médico que logra unir sintomas aparentememto inconexos, al lor la descripción tuvo la certeza de que se anituvo la certeza de que se animaleta un ploscesurio. No podía trataros de oa cosa. Era un des. cubrimiento sensacional y nadie podía adolantáraci.
Difurdió a Cara de Sheffield acaso con una. oblsimtención: consegui apoyo. económico y aseguras de que ole ganaran de mano con ese animal extraordinario El entusiasmo yla posibili dad de quedar enla hisarialo hi leon olvidar cierto rcato y do notas alos grandes carios dela época, Periodistas de La Nación y de Caras y Caretas acompaña" ron la expotición que so armó de inmediato, Miembros de la alta sociedad porteña contribuyeron financia a aventura.
También se nterseron dende Estados Unidos Dicenqque el Pre dente noteamencano Edward Harding raclamó, al menos, un Harding raclamó, al menos, un Harding raclamó, al menos, un und oler talvezelmás pres ¡ giosodastiempo, seembarcara de inmediato para la Argentina, Hasta el Museo de Ciencias Nataras de Manatan anunció el envío de especialistas. No exa para mencs, Bala poidad de capturas a un animal prehistórico.
La posibilidad de capturar un dinosaurio viv, viv, cas y los comercios lo utilizaban. 'onsus publicidades, oltamaccuaba páginas onteras on os moias más importantes y hasta lo ¡ escribieron untango en gu honor *Yo oy un potro animal buscado pe losingratesy sin conciencia.
Porque soy raro y también soy curioso según dice la gene por al Dejomén sol aquí gozando / dm la soledad de ase lago / ¿ Qué lo que haréis con sacarmo, sí vano / llevarme vivo de estelugar" Hay que sumar otro ingrodiente, una mueva misiva.
Un tiempo antes, un canadiense también ls había escrito a One li sobre un avistamiento, No en Epuyón pero también pora zona patagónica. hombre lo de cia que en al lago Nahuel Huapi había divisado un extraño ani. malds unos siete metros de argo concualolargo.
Elúniconcomweiento es que o había visto hacta más de una década perosación so "teria a contado, A Onelilacarta lo svió para agregarlo interés intriga la expedición que estaba por lanzar, poco le importó ncontaro una explicación alos "añoeda alencio. "Antes de seguir, detangámonoeen Clemente Onali Saefld noeen Clemente Onali Saefld noeen Clemente Onali Saefld noeen Clemente Onali Saefld noeen Clemente Onali Saefld. La historia de la fiebre del Plesiosaurio: la increíble búsqueda de un dinosaurio vivo en la Patagonia Jaro de esta historia. Onelk legó de Italia pero no como otros inmigrantes a intentar de trabajar de cualquier cosa. El era alguien con una gran formación, abla. "almenos siete idiomas y tenía una curiosidad inagotablo. Pue cioniic, oélogo, botánico rquesiogo, paleontslogo, gesgrafo y varias cosas más. Un renacanista delas ciencias. Trabajó con «el Perto Moreno, lo acompañó en algunos de sus viajes al gu y se fue volviendo muy famoso, Dirigió úl oclógico durante venta años. Lo moderizó y o popularizó.
Era presa fácil de los caricaturistas, Hacia declaraciones astentóreas, hablaba de temas que interesa: ban ala gente paro que no eran demasiado conocidos y su a pacto generaba intriga y hasta causaba algo de gracia Siempre con gombero lao, unce grandes bigotes y topa llamativa. Durante las primeras décadas del Siglo XX, el mundo, la natu raleza, todavía podía sorprender Las curiosos, los inquietos, por ía encontrar tieras desconocdas, espacios nunca visas, fonémenos que aún no habían do "explicados. Todo ra posible. Y la ciencia, muchas veces, convergía conla superstición, la imagiación ylafe. Talvez por all por ese aspl+ ta de novedad por eses harizontas infinito, fue que Clemente 'Oneli, que debia se el naturals» a más prestigioso y con mayores conocimientos de su tiempo en.
Sudamérica, organizó asta excursión surrealista por la Patagoia en busca de un plesiossuio ¿ Cuáleraol problema? So estima. uelosplesiceuarios están extinguidos sde hace unos 60 milloneedeaños needeaños needeaños needeaños on cazadores tros cientifico, "aqueanos, hombres que e en ú¡ cargabancolas provisioas y, por ¡ supuesto losperidistas Laintegraban también investigadores norteamericanos que se habian interesado en a cuestión y apor" taban pare del financiamiento. Estaban muy bien partechados. Llevaban lazos hechos con cogota de guanaco y oros con. cables de acero. La idea exa, pa: taco, atrapar al monstruo ala mantra de las comboya o de las gauchos conlasholadoras. Tar ión tenian arpones, ries, cajas de municiones y explosivos. No queda demasiado lao ía idea ra capturarlo vivo o muerto, sí tenían algún tipo de preferencia Las dos cazadores eran, pose: mente, los dos hombres con me yor punteria de Argentina. Onelk explicó quedibian estar prepar estar prepar estar prepar dos para cualquier eventualidad. 'Quenunca habían stado encon biéntenlanseglas"Sadebon usar las armas slo en caso extremo y siompro la de mayor calibra y de proyactils especiales. Se evitar por tos los medio lio ala cabeza, pues ésta os la pieza más importante delanimal. Debo acérela dos, tres o más tcs em. «el pescuezo", ascribió Onali en las intrucciones para los expo» ¿ licionarice (y para tranquiliza a les conservacionitas) que debian. sor cumplidas estrictamente durante la dise. Los cazadores hacian guardia todalanacho, De día lo queda: baun centinela Se suponia que el monstruo era de hábits noo. turnos.
Por eso exa tan hizo, Nacio lo había vist por ls maFanas Pero cuando cscurecta to ss ponian alertas Hubo cazadorescque estuvieron con u arma. úencajada en el hombro y un ojo y un ojo y un ojo y un ojo cerrado y el tro apuntando du llegaron los forasteros, recibió anta horas «el pago que había convenido de 2500 pesos, una especia dore» compensa por haber brindado la información. "explicaba poróndo golíaaparo Unadolasestratogiasquete: cer. Antes de todo esto, apenas nían, acaso enla que más conta: on di on di on di Cuando elinvisno ss aproxima: ba, regresaron. Sn el plestoesaio, por supuesto, Que la espoci so hubiera extinguida hacía millones de años, seguramente ayudó, Como que elago se formó muchísimo después (nace 60.000 afceaproximadamenta)oqueera do muy poca profundidad.
Cuando Onellie preguntaran cómo alguien tan preparado como él ¡ e habia dejado engañar do osa manera, dio a entender que él siempre lo supo pero que de esa manera hakía conseguido que o prestara atención ala Patagonia. "Talvez a Onelilo deslumbró la posiblidad de encontrar algo la posiblidad de encontrar algo La leyenda continúa ¡ Con el tiempo esta historia del lesiosauriose confundió con la de Nahuel, el monstruo del Lago Nahuel Huapi.
Pero son iAerentes Cada nusvoavitamiento, cada mueva sospecha, cada movimiento apenas perceptible en el mediodellago, genera una la de interés y parace confirmar cada. 'unado as teria y creencias sootenidas desde has añ Cada tanto parece que aparecs. Alguien aca una foto borrosa ofima un video gramuloso, a lo Zapruder. Entonces Nahueito médico MonstruodalLagoNessdeja, cada cincoodiezaños, pasa deserunaleyenda, una presencia dudosa, auna cereza Encuestas recientes mostraron que casila mitadde loshabiamtes de Baro. che creen en su existencia.
Desde hace varias décadas úl Nahuelito, e l gran protagoista (ausente) de las aguas del ¡ surdo Argentina, Por Matías Bauso infobas infobas Com eltiempo esta itorie del plesinsuro se ontundió co ade Nahulito, l monstruo del Lago Mabel Huapi..