Autor: FELIPE RUIZ BRUZZONE MAURICIO PARDO MEZA Fundación Nodo XXI
COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿Por qué algunos atacan el FES?
COLUMNAS DE OPINIÓN: ¿ Por qué algunos atacan el FES? "... detrás de una preocupación legítima por el financiamiento de las instituciones, muchos críticos esconden en realidad una defensa irrestricta de un modelo desregulado y con alto costo económico para las familias... ". irrestricta de un modelo desregulado y con alto costo económico para las familias... ". FELIPE RUIZ BRUZZONE MAURICIO PARDO MEZA Fundación Nodo XXI La discusión en torno a la superación del Crédito con Aval del Estado (CAE) ha puesto de manifiesto, una vez más, la tensión enun grupo de universidades incrementara significativamente sus ingresos mediante el cobro de aranceles y matrículas, muchas veces por montos desproporcionados en relación con los costos reales de la enseñanza y los servicios ofrecidos al estudiantado.
En efecto, entre 2010 y 2025 los aranceles de pregrado crecieron en promedio en un de pregrado crecieron en promedio en un tre los intereses particulares que buscan mantener un sistema de financiamiento desregulado en la educación superior y los intereses sociales que aspiran a eliminar el endeudamiento como vía de acceso Aella, Y es que algunos de los eríticos del proyecto del nuevo instrumento de Financiamiento Público para la Educación Superior (FES), más allá de expresar diferencias técnicas sobre el diseño dela polftica, dejan entrever una férrea defensa de un modelo de negocio que, por casi dos décadas, ha favorecido la rentabilidad de ciertas instituciones a costa de los recursos públicos y del endeudamiento de las familias. Para comprender esta postura, es necesario considerar el desarrollo del sector en los últimos veinte años. En este tiempo Chile ha experimentado una expansión sin precedentes en la matrícula universitaria, especialmente en instituciones privadas creadas después de 1981.
Este crecimiento, impulsado en gran parte por el CAE, permitió que do en gran parte por el CAE, permitió que do en gran parte por el CAE, permitió que 56% por sobre la inflación y un 49% por sobre el reaJuste del sector público en el mismo período, mientras la matrícula también crecía sostenidamente. El CAE ha sido una pieza fundamental en ese proceso, a tal punto que existen instituciones cuyo desarrollo y consolidación simplemente no seexplica sin este instrumento.
Universidades como la San Sebastián o la Andrés Bello (segunda y cuarta institución con mayor porcentaje de estudiantes con CAE, respectivamente) han incrementado su matrícula en un 346% y un 160% entre 2007 y 2024, expansión que a la UNAB le permitió incluso comprar una universidad en el extranjero por 124,5 millones de dólares.
El interés en la preservación del CAE, junto a su condición de refugio académico dereconocidos y vociferantes cuadros de los gobiernos de Sebastián Piñera y la derecha en general, están a la base de su pertinaz oposición al FES. En 2018, la nueva normativa para la eduEn 2018, la nueva normativa para la educación superior estableció un esquema de regulación de aranceles para las instituciones que voluntariamente se adscribieran a la política de gratuidad. Esta medida permitió estimar los costos "necesarios y razonables" para impartir una carrera y evitar asílas superutilidades que algunas instituciones vennían obteniendo.
Esta misma lógica de regulación es la que el FES busca extender a qui nes voluntariamente se adhieran al nuevo sistema, con el objetivo de construir un instrumento responsable en el uso delos recuros públicos y, al mismo tiempo, poner final endeudamiento familiar derivado del acceso ala educación superior. Una lógica similar subyace a la oposición a la eliminación del copago.
Detrás de una ¡ pación legítima por el financiamiento de las instituciones --que sin duda debe ser considerada en la revisión y el perfeccionamiento del FES--, muchos críticos esconden enrealidad una defensa irrestricta de un modelo desregulado y con alto costo económico para las familias, Es este modelo el que ha permitido, por ejemplo, que propietarios de instituciones educativas en Chile adquieran universidades con fines de lucroenel extranjero. Es hora de que el debate sobre el FES deje de girar en torno a la rentabilidad de unos pocos y se enfoque en el bienestar y el futuro detodas y todos los jóvenes chilenos. Elinterés de miles de estudiantes endeudados y el imperativo de construir un sistema educativo más justo y sostenible deben prevalecer. vo más justo y sostenible deben prevalecer..