Una mirada amplia al megaincendio
Una mirada amplia al megaincendio 0 Editorial Una mirada amplia al megaincendio Junto con la persecución de responsables, las autoridades deben emprender la tarea de reformar las instituciones que fallaron. in restar peso a las responsabilidades que descubran los distintos organismos investigadores, es necesario observar que el megaincendio que afectó a Viña del Mar, Quilpué, Villa Alemana y partes de Limache los días 2 y 3 de febrero de este año, ocurrió bajo las condiciones de una "tormenta perfecta". Al acuerdo con rasgos criminales que suscribieron el exbombero Francisco Ignacio Mondaca Mella y el exfuncionario de Conaf Franco Antonio Pinto, para provocar varios focos deincendio, porque de esa manera se aseguraba la propagación del fuego en un día especialmente seco y ventoso, se sumaron los problemas de coordinación que hubo entre los organismos encargados, precisamente, de atender, enfrentar y combatir una emergencia de dichas proporciones, además de varios incumplimientos en el despliegue de herramientas tecnológicas y recursos que hubieran ayudado en las primeras horas críticas de dicha catástrofe.
Laimportancia de darle esEl error es pensar ta mirada más amplia a la que esta catástrofe oa an E q ¡ sl mas fatales y miles de damfueun hecho do, nificados, reside en que cuandolarealidad ayudaavisibilizarlomal climática indica que preparado que estaba el Eseste tipo de grandes tadochileno para enfrentar A un hecho de estas magnituE genclas serán des, pese alas seguidas admás frecuentes en vertencias que hicieron ornuestra Región. ganismos especializados sobrelas características que adoptarían los incendios forestales en Chile, debido a las influencias del cambio climático y la falta de controlsobre la expansión urbana en las zonas de mayor riesgo.
El problema es justamente ese: las autoridades parecen olvidar que la necesidad de reorganizar las instituciones a cargo de prevenir, anticipar y enfrentar los incendios forestales, así como la urgencia de fortalecer la resiliencia urbana ante este tipo de catástrofes, debe iral ritmo que impone el cambio climático.
El error es pensar que, porsus proporciones, el megaincendio del 2 de febrero es un hecho aislado que no se repetirá con frecuencia porque se escapa de las estadísticas oficiales, cuando la realidad indica justamente lo contrario: cada año, estas catástrofes serán más frecuentes..