Economistas ven un riesgo menor de recesión y un crecimiento más firme del empleo
Economistas ven un riesgo menor de recesión y un crecimiento más firme del empleo PAUL KIERNAN y ANTHONY DEBARROS The Wall Street Journal Las consecuencias económicas de las políticas del Presidente Trump tal vez resulten menos terribles que lo que se temía.
Los economistas esperan un crecimiento más sólido y creación de empleo, un riesgo más bajo de recesión y una inflación más moderada que lo que preveían hace tres meses, según la encuesta trimestral entre analistas profesionales que realiza The Wall Street Journal. La razón: el estudio anterior del WSJ se llevó a cabo en el punto álgido de las amenazas del Presidente de imponer aranceles exorbitantes a los principales socios comerciales de EE.UU. Suspendió algunos de esos impuestos poco después. Está por verse si ese mejor estado de ánimo perdura. La semana pasada, Trump comunicó a una serie de socios comerciales entre ellos Brasil, Canadá, México y la Unión Europea que enfrentarían aranceles mucho más altos a partir del 1 de agosto. Aunque la perspectiva de los economistas mejoró ligeramente en relación al último estudio, todavía están relativamente pesimistas; probablemente debido a la persistencia de la incertidumbre comercial y al débil crecimiento hasta la fecha. En promedio, esperan que el producto interno bruto ajustado a la inflación crezca el 1% en el cuarto trimestre en relación al año anterior. Esto es un aumento frente al pronóstico de abril de un 0,8%, pero solo la mitad de lo que esperaban en enero. Estiman que el crecimiento va a repuntar hasta el 1,9% en 2026, poco cambio con respecto a estudios anteriores.
Fijan la probabilidad de recesión en los próximos 12 meses, en promedio, en un 33%, una disminución frente al 45% en abril, pero más alta que la de enero de un 22%. “A pesar de los numerosos vientos en contra, la economía estadounidense está resultando obstinadamente resistente”, comentó Chad Moutray, economista jefe de National Restaurant Association.
“Los consumidores siguen gastando, pero el estado de ánimo ha cambiado claramente de osado a cauteloso”. El estudio recopiló las respuestas de 69 economistas de diversas instituciones, que abarcan desde bancos de Wall Street hasta universidades y pequeñas firmas consultoras, del 3 al 8 de julio. No todos los analistas respondieron a todas las preguntas. Las mejores perspectivas se producen luego de tres meses de datos económicos alentadores en general.
El crecimiento del empleo alcanzó un promedio de 150 mil puestos en los últimos tres meses, mejor que lo que se proyectó en abril, y la tasa de desempleo bajó de 4,2% en mayo a 4,1% en junio, y se mantuvo dentro de su rango del último año. El alza de la inflación impulsada por los aranceles, que los economistas pronosticaban ampliamente, no se ha materializado. menudo tienen dificultades para captar los puntos de inflexión. “Por muy buenas que sean nuestras estadísticas, simplemente no fueron hechas para estos tipos de movimientos tan grandes de política que provocan una reacción instintiva”, manifestó Swonk.
“Dificulta incluso más la lectura de las hojas de té”. Las políticas de Trump las que además de los aranceles incluyen medidas severas contra la inmigración ilegal, aumento de las deportaciones y un megaproyecto de ley recién firmado que reduce los impuestos y parte del gasto puede que también se demoren en filtrarse en la economía real.
Algunos funcionarios de la Fed sospechan que las empresas no van a subir los precios hasta que se acaben los inventarios acumusubieron un 2,8% en mayo en relación al año anterior, el nivel más bajo en cuatro años, aunque aún más altos que lo que es consistente con el objetivo del 2% de la Reserva Federal. Sin duda, las políticas de Trump están afectando el comportamiento.
Las importaciones de bienes aumentaron un 26% en el primer trimestre en relación al año anterior puesto que los consumidores y las empresas se precipitaron para adelantarse a los a r a n c e l e s. D e s pués de que los impuestos entraron en vigor en abril, las importaciones se vinieron abajo.
Diane Swonk, economista jefe de KMPG US, advirtió que los indicadores económicos oficiales, los que combinan datos reales de las encuestas con estimaciones, a CONTENIDO LICENCIADO POR THE WALL STREET JOURNAL Las solicitudes semanales de subsidios de desempleo iniciales, un indicador casi en tiempo real de los despidos, no muestran ser causa de preocupación. La opinión empresarial y del consumidor, la que estaba en caída libre a principios de este año, al parecer se ha estabilizado. El S&P 500 alcanzó un máximo récord este mes. Quizás más importante, el alza de la inflación impulsada por los aranceles, que los economistas pronosticaban ampliamente, no se ha materializado. Los precios básicos al consumidor, los que excluyen los componentes volátiles de alimentos y energía, lados antes de que los aranceles entraran en vigor, según las minutas de su reunión de junio.
El economista promedio en la encuesta del WSJ espera que los planes arancelarios de Trump agreguen 0,7 puntos porcentuales a la inflación, medida por el índice de precios al consumidor, en el cuarto trimestre de 2025. Sin embargo, su pronóstico promedio de una inflación del 3% en diciembre es menor que el pronóstico de abril del 3,6%; aunque más alto que el de 2,7% en enero.
“Aunque aún parece probable que los aumentos de aranceles eleven la inflación en la segunda mitad del año, su impacto se compensará parcialmente con una menor inflación en los costos de energía y vivienda”, señaló Bill Adams, economista jefe de Comerica Bank. El nivel final de los aranceles, y por lo tanto el impacto económico, sigue siendo un factor impredecible.
Economistas de JPMorgan estiman que el arancel promedio de EE.UU. el 12 de mayo, después de que Trump diera marcha atrás a los gravámenes a China, era del 12,2%. Desde que se anunciaron los aranceles al acero, al aluminio y al cobre, Vietnam y otros países han elevado esa cifra al 14,6%, y otros aranceles propuestos por Trump agregarían otros 6,1 puntos porcentuales, estiman. Las perspectivas del mercado laboral también se han recuperado desde abril, aunque no al nivel de enero. Los economistas esperan que los empleadores agreguen un promedio de 74.070 personas a las nóminas por mes durante el próximo año, en comparación con los 54.619 en abril.
Pronostican que la tasa de desempleo va a subir al 4,5% en diciembre, en comparación con la proyección de abril del 4,7%. Eso puede que dé a la Fed un poco más de tiempo antes de reducir su objetivo de tasa de interés desde su actual rango entre 4,25% y 4,5%. En promedio, los economistas prevén que el punto medio de ese rango terminará el año en 3,94%, más alto que el 3,79% en abril, lo que implica entre uno y dos recortes de un cuarto de punto este año. Los economistas ven que el megaproyecto de ley de Trump agregará 0,2 puntos porcentuales al crecimiento económico en 2025 y 0,3 en 2026.
Pero también estiman que el aumento de las deportaciones y la disminución de la inmigración van a compensar plenamente eso, restando 0,2 y 0,3 puntos porcentuales al crecimiento anual del PIB en 2025 y 2026 respectivamente. “La inmigración ayudó a potenciar el crecimiento en forma significativa durante los últimos dos años”, afirmó Joel Naroff, quien dirige su propia firma consultora.
“Eso se va a desvanecer en el futuro”. Artículo traducido del inglés por “El Mercurio”. PRECIOS Algunos funcionarios de la Fed sospechan que las empresas no van a subir los precios hasta que se acaben los inventarios acumulados antes de que los aranceles entraran en vigor.. Analistas prevén un aumento del crecimiento y reducen las estimaciones de inflación a medida que los aranceles resultan más bajos y menos costosos que lo que se esperaba en abril. Según encuesta del WSJ: PRECIOS Algunos funcionarios de la Fed sospechan que las empresas no van a subir los precios hasta que se acaben los inventarios acumulados antes de que los aranceles entraran en vigor.