Propósitos democráticos para 2025
Propósitos democráticos para 2025 Claudio Elórtegui Gómez Doctor en Comunicación Director Escuela de Periodismo ja Universidad Católica de Valparaíso ja Universidad Católica de Valparaíso 66 a acuerdos relevantes". La necesidad de reformas que la ciudadanía ha manifestado en las últimas décadas, que han quedado explicitadas y graficadas en diversos estudios de opinión, se han mantenido ante la incapacidad de las dirigencias políticas por llegar Propósitos democráticos para 2025 cesión de discursos y se desplegará un continuo de estrateglas quese incrementarán con el transcurso de los meses, de cara al domingo 16 de noviembre. Con probabilidad, este 2025 irán apareciendo candidaturas emergentes y otras que, posicionadas desde hace un tiempo, intentarán mantenerseen la atención pública. Será un periodo de intensidad comunicacional política.
Másallá de los nombres y de las colectividades que apoyarán o quitarán esos respaldos, al ritmo de un sistema electoral que incentivala fragmentación, preocupa la falta de un conjunto de propósitos que nos identifiquen como aquella sociedad chilena que traspasará el cuarto de un nuevo siglo.
La necesidad de reformas que la ciudadanía ha manifestado en las últimas décadas, que han quedado explicitadasy graficadasen diversos estudios de opinión, transversales en sus orientaciones políticas einstitucionales, se han mantenido ante la incapacidad delas dirigencias políticas por llegara acuerdos relevantes. Los diagnósticos hace ya un buen rato, están más que claros.
De hecho, se aprecian en los proyectos de gobierno de las diversas candidaturas presidenciales que han competido en los balotajes, independiente de los colores políticos en disputa; se vienen difundiendo en una serie de informes técnicos elevados por comisiones convocadas por el Ejecutivo de turno o impulsadas de manera per'manente por el Legislativo; sin contar el constante y voluminoso aporte de la academia nacional con sus publicaciones empíricas.
Aun así, el derrotero y el horizonte están perdidos, desdibujados por un inmediatismo que tiene agotada a la sociedad chilena. ¿Cuáleslavisión del Chile que soñamos, que anhelamos? ¿ Cuál es el relato que concita un espacio de encuentro? ¿ La narrativa que nos cohesiona? Las dos experiencias constitucionales no dieron el anC omo todo año electoral presidencial, escucharemos una suC omo todo año electoral presidencial, escucharemos una suC omo todo año electoral presidencial, escucharemos una suC omo todo año electoral presidencial, escucharemos una sucho para interpretar esas expectativas, no teniendo los apoyos ciudadanos mayoritarios y perdiendo la legitimidad que ganaron cuando surgió un camino institucional para salir de la crisis.
Apoco andar de esos procesos fallidos, las fuerzas políticas han incrementado un espacio de tensión dado por la mantención o la recuperación de los puestos de poder, lo que les sigue divorciando de la esquiva y necesaria credibilidad en la población. La agenda de discusiones públicas intensificó su cortoplacismo, cayendo en una vulgaridad que liquida cualquier liderazgo bien intencionado.
El traslado de la performance política, además, se ubica en la compulsión de las redes sociales, donde el "live" transmitido por políticos que devienen en personajes, suplanta los procesos y los acuerdos, a cambio de transmisiones online que no incorporan contextos, sino impostadas emociones, bailes y coreografías musicales.
En la democracia del Chile de hoy, los discursos, de un lado y otro, se hacen vacíos y el voto obligatorio busca el mal menor dentro de una moderación que se irá desgastando e, inevitablemente, polarizando.
Como los partidos políticos, los nuevos y los históricos, no concitan la intermediación pública, intentan velar en la sobrevivencia de una fragilidad queno es económica, porque todavía acceden arecursos públicos, sino que es simbólica e identitaria. Aunque a estas alturas suene algo ingenuo, la actividad ejercida por los profesionales de la política debe dar el gran gesto este 2025 para detener un revanchismo que tiene estancado al país.
La ciudadanía tiene que apreciar que, aunque las políticas públicas no son perfectas, se lograron articular en base a consensos políticos de genuino desprendimiento y generosidad, puestos los focos en elimpacto de un bien común anclado en un camino que se comprende y valora.
Eso dará sentido a las personas al momento de votar este 2025 y podráir revirtiendo, paulatinamente junto a otras acciones y medidas correctivas como formativas, la larga inexistencia de un rumbo estratégico y el surgimiento de un propósito democrático más definido.. o. o. o.