Bailarín Rodrigo Guzmán: “Estoy cerrando un ciclo muy lindo”
Bailarín Rodrigo Guzmán: “Estoy cerrando un ciclo muy lindo” Rodrigo Guzmán n a c i ó e n P u n t a Arenas, en 1979.
E n 2004 fue ascendido a primer bailarín y en 2013, con "Zorba, el griego", la popular creación del coreógrafo neoyorquino Lorca Massine, Rodrigo Guzmán Yacsich (1979) alcanzó la máxima categoría que un artista puede ocupar en el Ballet de Santiago: el puesto de bailarín estrella.
Con ello se convirtió en el único intérprete nacido en Chile que conquista esta posición (esta distinción recayó, en 2007, en el trasandino Luis Ortigoza). Instalado en uno de los palcos del Teatro Municipal de Santiago, Guzmán confirma su retiro de los escenarios después de una reconocida trayectoria en la compañía. "Ya tengo la edad para parar en el Ballet de Santiago, y qué mejor que despedirme con `Zorba, el griego', un título tan significativo y con el que llegué a convertirme en estrella.
Estoy cerrando un ciclo muy lindo", dice el artista que volverá a ponerse en la piel de Zorba, a partir de este jueves y hasta el 20 de abril, en el Teatro Municipal de Santiago (más información de horarios y venta de entradas en www.municipal.cl). Con este título se inaugura oficialmente la temporada 2024 y debuta César Morales como director de este cuerpo de baile, tras la partida de Luis Ortigoza.
UN EJEMPLO Nacido en Punta Arenas y descendiente de croatas, a su ciudad no llegaban espectáculos de danza clásica. "Mi papá trabajaba en la Fuerza Aérea y la primera vez que vi al Ballet de Santiago fue en un video. Los vi en Betamax en `Espartaco', hasta que los pude conocer en vivo, mientras estudiaba en el Instituto Don Bosco.
También vi en gira al Ballet Nacional Chileno con `Carmina Burana'". Tiempo después, Guzmán ingresó a la Escuela de Ballet de Santiago. "En este histórico teatro, tras ver una función de `Giselle', dije `yo quiero estar aquí'", rememora.
Valorado por la crítica y por sus pares como un destacado bailarín de carácter, Rodrigo Guzmán matiza esa afirmación. "Me gustan esos papeles, pero también me sentí muy cómodo en los clásicos, y por eso los directores me pusieron en estos títulos.
Uno de los personajes más desafiantes, en ese sentido, fue Carabosse, de `La Bella Durmiente'. También destaco Romeo en `Romeo y Julieta', y Petruchio, de `La fierecilla domada'. Me gustan los giros, los pas de deux, pero también la interpretación. Fue muy importante trabajar con Ivan Nagy, con Marcia Haydée y ahora con César Morales. Mi gran partenaire fue Andreza Randisek. Marcia nos decía que al vernos bailar nos recordaba su trabajo con Richard Cragun", dice.
Después de más de dos décadas sobre las tablas, Guzmán analiza la poca presencia de bailarines chilenos en los puestos principales de este cuerpo de baile. "Como primeros bailarines están los argentinos Emmanuel Vásquez y Lucas Alarcón, y tenemos al mexicano Gustavo Echevarría. Todos tienen un grandísimo talento. Me encanta que el Ballet de Santiago sea tan multicultural, pero hay ahí una labor importante de seguir fomentando en Chile el interés por el ballet. Yo me siento muy afortunado por el camino que seguí. Volvería a seguir este camino mil veces.
Han sido los años más bonitos de mi vida", asegura. --¿ Por qué decidió despedirse con "Zorba, el griego"? "Es algo que conversé con Carmen Gloria Larenas, directora del Municipal de Santiago, y le agradezco esta bella oportunidad. Lo bailé tantos años y se convirtió en un hit. En su estilo, `Zorba... ' es como `Cascanueces', es decir, lleno total. En todas las funciones el público prácticamente se subía al escenario a bailar con nosotros. Lo llevamos a cinco ciudades de Brasil y ¡ uff!, fue una locura. Río de Janeiro se volvió loco. También en Colombia provocó furor. Es muy lindo conectarse con el público y ver que la gente se emociona. Eso es impagable.
Por eso se hace tan difícil dejar el escenario". --¿ Cuáles son sus próximos proyectos tras el retiro? "El año pasado recibí un mensaje de la Escuela de Ballet del Teatro Municipal para integrarme como profesor. Yo egresé de esa escuela y decidí aceptar este reto. Imparto cursos a los varones, más repertorio de pas de deux. Una maravilla, porque entré y se concretó esta alianza con la Ópera de París. Ahora tengo que traspasar a las nuevas generaciones todo lo que aprendí en mi carrera.
Dejar de trabajar, ¡nunca! Quiero explorar el teatro y la danza contemporánea". Bailarín Rodrigo Guzmán: "Estoy cerrando un ciclo muy lindo" A sus 44 años, el único bailarín estrella nacido en Chile anuncia su retiro del Ballet de Santiago. Lo hará con uno de sus más grandes éxitos, "Zorba, el griego". MAUREEN LENNON ZANINOVIC PATRICIO MELO LUNES 8 DE ABRIL DE 2024. - - - - -