Autor: Investigador universidad de Los Andes
Cada día más solos
De acuerdo con el último informe de desarrollo humano del PNUD (2024), los índices de confianza interpersonal y de asociatividad se encuentran en su mínimo histórico. Especialmente dramática es la caída de la confianza interpersonal, aspecto dondees posible observar una baja de 25 puntos porcen-tuales entre 2011 y 2023. Todoesto coincide con los datos entregados por la Encuesta Nacio-nal Bicentenario UC (2023), quedetectó el mismo fenómeno. En resumen, los chilenos estamos cada día más solos, más encerrados, y más desconfiado. Por supuesto que este es un problema que afecta infinitos frentes de la vida cotidiana, dado que todas nuestras decisiones e interacciones sociales se basan, enúltima instancia, en la confianza. Dicho de otra forma, la desconfianza, la sospecha, el temor y la incredulidad son sentimientos que deterioran nuestra salud mental y nuestras relaciones jurídicas, económicas y laborales, por nombrar unos pocos ejemplos. Para qué hablar de la desconfianzairtadiada hacia lasinstituciones políticas, que socava su legitimidad y, por consiguiente, el Estado de derecho. Pero de todas estas crisis, pocose habla decómola baja asociatividad, producida por la desconfianza generalizada, perjudicanuestras libertadesal tiempo que hace necesaria mayor pre-sencia estatal.
Tanto la colabo-ración público-privada, como el principio de subsidiariedad suponenuna sociedad civil vigorosa, activa, dispuesta a trabajar en pos del bien común y ávida Si de asumir desafíos públicos, embargo, esuun hecho que mien-tras menos nos asociamos másvan reduciendo nuestra esfera de libertad.
Así, no parece azaroso que la actual debilidad de nuestrossindicatos, iolesias, fundaciones, mutualidades y juntas de veci nos coincida con un Estado que concentra más funciones que nunca, y con una legislación que pretende regular hasta los aspectos más nimios de la vidasocial, e incluso privada. Es precisamente el retiro de la ciudadanía hacia sus asuntos particulares, su desafectación y desinterés por lo público lo que provoca que la autoridad política ex tienda sus dominios y su poderde manera vertiginosa. Nada de esto se trata de defender eslóganes vacíos como “las ideas de la libertad” ni de promover sistemas que desarraigan al individuo de sus vínculos de dependencia.
Antes bien, lo que buscamos es enfatizarlarelevancia della acción colectiva para acometer tareas de índole público, porque estamos convencidos de que sólo de esa forma es posible alcanzar "la mayor realización espiritual y material posible de todos y cada uno”, y de resguardar huestras libertades frente al poder estatal. Francisco Medina KProfesor Derecho. Andes Ca Constitucional.
Investigador de Ps, Universidad delosdeAlexis Tocqueville en su célebre obraTal como dijo La democracia en América, “lossentimientos y las ideas no se renuevan, el corazón no se engrandece, ni el espíritu humano se desarrolla, sino por la acción recíproca de unos hombres sobre otros (... En los pueblos democráticos, la ciencia de laasociación es la fundamental; el progreso de todas las demás depende del suyo”. nos llenamos de leyes, reglamentos, agencias estatales y de burócratas que paulatinamente.