Autor: Francisca Undurraga Investigadora Piensa
Columnas de Opinión: Seguridad municipal
Columnas de Opinión: Seguridad municipal ColumnaEsto se debe a que los requisitos de ingreso y formación son sustancialmente diferentes. La carrera policial de Carabineros, modificada en 2020 bajo el amplio consenso de la necesidad de una mayor preparación, alcanza actualmente cuatro semestres deduración.
En contraste, los inspectores acceden a su cargo bajo exigencias significativamente menores, limitándose en la mayoría de los casos al cumplimiento de requisitos legales. iniciara discusión sobrela formación de los ¿ Es responsable funcionarios municipales situando el uso de armascomo primer punto? Basta con considerar que recién en 2024 se publicó la ley que autoriza el porte de armas a los aspirantes de Carabineros, siempre que se encuentren en su último año y hayan aprobado todos los cursos de tiro. Por último, centrar el debate en el porte de armas invisibiliza otras estrategias que impactan enlaseguridad sin escalar la fuerza, ajustándose mejor a las capacidades municipales. Tampoco debemos olvidar que aún se tramita el proyecto que modifica la Ley N* 18.695, que busca fortalecer las capacidades municipales enseguridad, y que, bienorientado, podríaser una oportunidad para definir responsablemente estos roles.
Volviendo alosresultados, es comprensible que la percepción deinseguridad lleve ala ciudadanía arespaldar soluciones inmediatas, Pero frente a estas presiones, también corresponde al mundo técnico y a las autoridades ofrecer un marco realista sobrela factibilidad, sostenibilidad y efectos de cada medida. nlaúltimasemana, diversos medios publicaron los resulE tados dela Encuestasobre Percepciones Ciudadanas respecto al uso de la fuerza policial realizada por UNAB, en la que el 649% de los participantes expresó estar de acuerdo con que los guardias e inspectores municipales porten armas de fuego. Sin embargo, en muchos reportes se omitió la segunda parte dela pregunta, que indicaba que debían estar “debidamente capacitados para ello”. Este matiz no es menor, pues introduce un elemento que alterasustancialmentelas respuestas.
Las personas encuestadasno tendrían por qué conocer los procesos que implica dicha capacitación, la inversión presupuestaria que requiere, los debates legislativos involucrados y, quizás lo más importante, el estado de la discusión sobre el rol delas policías en nuestro país. Si bien la encuesta es un instrumento válido para medir las preferencias ciudadanas, también es importante considerar que sus resultados podrían estar influenciados por la forma en quese presentanlas opciones.
En este caso, al incluirla capacitación comocondición de base, se da porsentado una serie defactoresque hacen quela opción de armar alos inspectores parezca más viable delo que realmente es. la factibilidad dela propuesta, reSi evaluamos el contexto y sulta poco realista considerar quelos inspectoresmunicipales porían alcanzar, en un futuro cercano, un nivel de entrenamiento enel uso de armas equivalente al de las fuerzas policiales..