Autor: Rodrigo Rodriguez Pérez y Manuel Cifuentes Salinas
Repobladores de Osorno: los "señores feudales" de grandes predios agrícolas
Repobladores de Osorno: los "señores feudales" de grandes predios agrícolas Sierra, ejerció como alcalde de la recién fundada ciudad de La Unión.
Y además de político, era dueño del fundo Folilco y parte de las estancias Molco y San Javier, en la zona de los llanos na vez consolidada la repoblación de Osoru ron siendo dueños de sus extensos terrenos gracias a los titulos de Comisarios que repartieron los comisarios de naciones Francisco Aburto y su hijo Francisco Aburto Ramirez, tanto en el periodo colonial, como en los primeros años de la República bajo el gobierno de Bernardo O'Higgins, Varias familias huilliches se mantienen como dueñas originales hasta hoy y otras han recuperado parte de sus tierras graciasa los antiguos títulos de comisarios, que fueron considerados como válidos para la restitución por la nueva ley indigena.
Otro ejemplo de familia indigena que ha mantenido su tierra original son los Huisca de Rahue Alto, que conservan parte de su predio desde la cale Real hacia el rio Rahue, pese a los intentos de grandes agricultores vecinos que trata ron de quedarse con el terreno a mediados del siglo XX.
ÓVALOS EN PLANO La compra de tierras por parte de las familias repobladoras o colonos queda de manifiesto en el plano elaborado por Miguel de Atero en 1804, donde se observan al menos cuatro óvalos diseminados en la jurisdicción de Osorno, que representan grandes extensiones que compraron a los indios. El sector más amplio se localiza entre los ríos Maipué y Blanco, entre el suroeste del rio Negro y la cordillera de la costa, con forma de un gran cuadrado.
Otros sectores de importancia rodean al Potrero del Rey, hasta el rio Bueno con el Pilmaiquén. "El plano topográfico muestra una activa ocupación del territorio por parte de los colonos, lo que implica una fuerte disminución de las tierras en poder de los naturales. Demuestra asimismo que la actividad económica prepondeHEREDEROS En general, las familias repobladoras tuvieron una gran cantidad de hijos e hijas, quienes heredaron el patrimonio. La mayoría se emparentó entre si por sucesivos casamientos, como una forma de asegurar la propiedad de la tierra. Este fenómeno también ocurría en otras partes de Chile, pero en el caso de Osomo, al final, la mayor parte de los descendientes de repobladores terminó siendo familiares. La prole numerosa fue un gran problema para los terratenientes, ya que mientras más grande el número de hijos, más herederos. Con ello las propiedades se fueron atomizando y varias fortunas se diluyeron en el tiempo. Algunos mantuvieron sus herencias, otros las multiplicaron y hubo casos que las perdieron. Muchos descendientes, al momento de recibir su parte, terminaban vendiendo. Aunque también hubo herederas que no tuvieron hijos, a causa precisamente de la endogamia. Entre los ejemplos de herederos está David Rosas, descendiente de Miguel Rosas, quien a su vez beredo de su padre Valentin Rosas el fundo Rahue, en la ruta U-22 camino a la Misión de Rahue. Esteban Rosas Santibáñez recibió de su padre, Miguel Rosas, parte de la estancia Colgue. A Hermógenes Rosas Manríquez, su madre, Helena Manríquez De Lara, le dejó la estancia Collico, en Quilacahuin. Hipólito Benavides Pérez, hijo del repoblador Diego Benavides, heredó el fundo Remehuey la chacra La Ovejería, propiedades en las cuales también participaban sus bermanos. Todavia hay descendientes de los Benavides en Remehue y Barro Blanco.
La mayoría de estas familias están presentes hasta nuestros dias en Osorno, aunque pocos conservan los predios de sus antepasados y sólo un puñado se dedica al agro. 08 no, proceso iniciado en 1792, diversas familias que se asentaron en la ciudad comenzaron a crecer económicamente, principalmente en el rubro ganadero. Y para ello comenzaron a adquirir grandes extensiones de tierras indigenas, propiedades que negociaron y pagaron directo a los huilliches de la jurisdicción. Tenían frente aellos una zona con enorme potencial, ideal para dar el salto de pequeños campesinos a potentados agricultores.
Se trataba de predios que estaban fuera de los limites pactados en el Tratado de las Canoas, ya que los indígenas le cedieron al rey de España las tierras ubicadas al norte del rio de Las Damas y el resto debía seguir en sus manos. Y asi ocurrióal menos en la primera etapa, ya que el traspaso de indigenas a repobladores se hizo, en muchos casos, por medio de la venta legal, con títulos de dominio. Un ejemplo de ello ocurrió con el cacique Railef, de Purranquil, quien vendió las tierras donde se encuentra actualmente la villa de Purranque y sus alrededores. Tambiên está el caso del sector Puloyo, donde más de 3 mil hectáreas fueron vendidas por tres caciques a Tomás O'Higgins. Las tierras eran negociadas con los caciques.
Aunque hubiese más propietarios indigenas en la parcialidad, el cacique finalmente decidia si el terreno se vendia o no y luego se encargaba de repartir el dinero de la transacción a todos los cabezas de familia que les correspondia. En la otra vereda estaban aquellas familias indigenas, sobre todo de la costa de Osorno, que jamás vendieron y siguiemas, en Francke. En dirección a Maipué, en el lugar llamado Dollinco, Camilo Santibáñez adquirió tierras para la explotación agricola. Entre el camino Real y el fuerte de Maipue, en el sector de Crucero, el repoblador Antonio Rosas se transformó en propietario de un gran predio. Aparte de ello, al norte de Osorno, siguiendo el Camino Real, fue dueño de las haciendas Colhue y Santa Rosa. Todos sus bienes en total sumaban más de 3.500 hectáreas. Isidro Santibáñez, tambien repoblador, fue dueño de la estancia Chacayal, hacia el norte por el camino a Trumao, terreno que luego fue repartido entre sus hijos. Y en la hacienda El Toro, que estaba después del fuerte de Maipué y donde se libro la última batalla de la independencia en la zona, Molses Rosas se transformó en gran propietario.
Un verdadero ejemplo de "señor feudal" fue el agricultor Pedro Martinez Rodríguez, el patriarca de la familia Martinez de Osomo y uno de los principales propietarios del departamento, con más de 30 mil hectareas a su haber en distintos sectores. Pero no sólo los vecinos adquirieron enormes extensones para uso agricola, sino tambien las autoridades coloniales. Manuel Olaguer Feliú, que fue el primer superintendente de la repoblación de Osorno, compro en 1808 la hacienda bera sur del rio Bueno y al oeste de Trumao. Se extendia desde el actual Trumao hasta la unión del rio Pilmaiquên con el Bueno. Ese mismo año se la vendió a su cuñado Vicente de la Guarda y Valentin, oriundo de Valdivia. Finalmente, el extenso terreno pasó a manos de la familia Martinez de Osomo.
DUEÑOS EN LOS LLANOS Los repobladores llegaron incluso más allá de los limites de la jurisdicción de Osorno y se convirtieron en importantes ganaderos en la zona de los llanos, área de la jurisdicción de Valdivia comprendida desde el rio Bueno hasta Los Lagos y el rio Calle Calle (hoy Región de Los Rios). Uno de los clanes más famosos en esa área fue la familia Carrasco, cuyos miembros se destacaron como prominentes agricultores en La Unión, Rio Bueno y Osorno. Francisco Javier Carrasco, repoblador directo de Osorno, quien mantenía residencias en las ciudades de Valdivia y Osor no, le compró al cacique Naipan la hacienda Hueyusca, en la actual costa de Purranque. Aparte de eso, fue dueño de 1.000 cuadras de terreno en la zona de los llanos.
Su hijo Manuel Carrasco y Sierra, junto con su padre, fue dueño de la hacienda Hueyusca y las estancias San Isidro y Rapaco, en DagIlipulli (donde estaba la antigua misión, en la actual co. muna de La Unión), Su otro hijo, Juan Francisco Carrasco y rante fue la ganadería, en desmedro de la agricultura.
Las actividades mineras de los lavaderos de oro, aunque conocidas y localizadas, no se habian retomado (. .. ). La obra cartográfica de Atero demuestra la consolidación de la soberania monárquica sobre el territorio osomnino, entre los rios Bueno y Maullin, en el breve lapso de doce años transcurridos desde que Tomás de Figueroa recibiera las ruinas de la ciudad perdida de Osorno en 1792", señalan Ramiro Lagos Altamirano y Amalia Vahi Serrano, autores del artículo histórico llamado "Cartografia colonial de Osornoc los mapas de Miguel Maria de Atero, 1804". Uno de los óvalos que aparece hacia el sur, entre los rios Nihuy y Boroa, corresponde al fundo "Estero Largo", que fue comprado por Pedro Martinez Arriagada a indigenas; en el predio contiguo estaba el repoblador Juan Francisco Barrientos, que adquirió el fundo "Oromo"; al sur de Oromo se asentó Santiago Montalva, que también fue dueño de un extenso fundo; más hacia el oeste, Tomás Burgos (también repoblador) adquirió tierras en Quisquelelfun. Su hijo Nicolás Burgos Barrientos fue dueño, además de Quisquelelfun, de los predios Colimahuida, Pumachilhue, el Potrero del Cura y Los Alerces, que estaba al poniente de Osorno, hacia la orilla del mar.
Y tambien tenía una chacra junto al rio de las Damas, pasado el puente DaQuilacoya, que estaba en la ri-. Muchas familias progresaron rápido gracias a la ganadería, por lo cual compraron enormes extensiones de tierra a los caciques indígenas. La gran cantidad de descendientes que tuvieron fue atomizando las fortunas y propiedades a lo largo del tiempo. EN EL PLANO DE 1804 SE OBSERVAN LOS ÓVALOS QUE REPRESENTAN LA COMPRA DE TIERRAS A INDÍGENAS.