Autor: THIAgo DíAS, CoUNTRY MANAgER EN CHILE DE MASTERCARD
Columnas de Opinión: Pagos sin contacto para una movilidad urbana simple y segura
Columnas de Opinión: Pagos sin contacto para una movilidad urbana simple y segura El transporte público en Chile está experimentando una notable transformación, impulsada por la innovación y la tecnología. La implementación de pagos sin contacto (con tecnología EMV) en ciudades como Valparaíso, Concepción y Chillán representa un avance significativo, ofreciendo una experiencia más ágil, segura y accesible para los usuarios.
Valparaíso, con su sistema de transporte eléctrico multimodal (trenes, buses eléctricos, trolebuses y ascensores) con tarifa integrada por el sistema de recaudo de EFE, ahora permite el acceso directo con tarjetas de débito, crédito o prepago. Esta innovación elimina la necesidad de recargas y el uso de efectivo, simplificando el viaje de todas las personas, residentes y turistas. La implementación exitosa en Chillán gracias al trabajo o públicoprivado ejemplifica el potencial transformador de los pagos sin contacto en el transporte público chileno. Tras una marcha blanca de tres meses que registró más de 140.000 viajes, el 1 de abril de 2025 lanzamos masivamente esta tecnología que permite pagos con tarjetas bancarias y de prepago. La seguridad constituye un pilar fundamental del sistema.
Empleamos tecnología EMV de estándar mundial que protege cada transacción mediante cifrado de extremo a extremo, tokenización de datos y autenticación multifactor, garantizando la confidencialidad e integridad de la información sin exponer los números de tarjeta de los usuarios. Estas medidas de seguridad robustas generan la confianza necesaria para impulsar la adopción masiva del sistema.
Ciudades como Valparaíso, Concepción y Chillán se convierten en modelos a seguir, demostrando los beneficios de la apertura de los pagos en el transporte público: interoperabilidad, apoyo a reducir la evasión, potencial reducción de costos operativos y una experiencia más simple y segura para los pasajeros. Esperamos que esto inspire a otras ciudades a adoptar soluciones similares, impulsando un sistema de transporte público más moderno e inclusivo. Pagar con tarjeta en el transporte público no es solo modernización, sino una transformación cultural que mejora la calidad de vida promueve la inclusión financiera y facilita la gestión del tiempo y el dinero. El viaje hacia un transporte público digitalizado se está transformado y estamos comprometidos a liderar este cambio en todo el país..