La línea de largada
La línea de largada tes, con Chile Vamos consolidándose como la principal fuerza del sector tras ganar en cinco regiones, entre ellas Los Lagos, donde competía con el Partido Republicano. Estos resultados deberían orientar las negociaciones con miras a las próximas elecciones parlamentarias, primando el pragmatismo por sobre los proyectos individuales. Un buen resultado en dichas elecciones resulta crucial para un eventual gobierno del sector. Con este mapa en mano, queda claro que no hay carreras ganadas, y esa es precisamente la mejor condición para competir en lo que resta.
La ausencia de certezas absolutas en el panorama político obliga a definir estrategias y evitar cualLos resultados de la segunda vuelta de gobernadores regionales han consolidado un reordenamiento de las fuerzas políticas del país, un fenómeno que ya había mostrado señales claras hace un mes. La derecha experimenta un ascenso, logrando triunfos en seis regiones, y la izquierda retrocede. Sin embargo, el oficialismo logra mantener sus bastiones en Santiago y Valparaíso, aunque con dinámicas particulares.
Rodrigo Mundaca, quien postuló bajo el paraguas del Frente Amplio, criticó al gobierno de Gabriel Boric, calificando la reconstrucción tras los incendios como un "fracaso". Esta postura, similar a la de Macarena Ripamonti, consolida una tendencia de liderazgos locales que dificulta vincular estos triunfos, directamente, a una coalición.
Por otra parte, Claudio Orrego, quien compitió en un cupo independiente, reafirmó este carácter en su discurso como ganador, dando un nuevo impulso a una carrera presidencial que había quedado dañada tras los resultados de la primera vuelta.
En el sur, la derecha celebra triunfos relevanFrancisco Orrego, con más de 2 millones de votos en la Región Metropolitana, demostró una capacidad de movilización de votantes que debe analizarse detenidamente, con el cuidado de no sobreinterpretarla ni subestimarla. En síntesis, estas elecciones evidencian que los votos no pueden atribuirse, sin más, a la derecha o a la izquierda y que los vasos comunicantes no están claramente definidos.
Este panorama, lejos de consolidar ganadores absolutos, subraya que la carrera aún es larga y requerirá liderazgos capaces de ajustarse a las demandas de un electorado cada vez más diverso, pero sensible no solo a los contenidos, sino también a los tonos y formas de los candidatos. n quier exceso de confianza que pueda resultar contraproducente. Hoy, los votantes definen su voto por muy diversas razones. Habrá que articular estilos y discursos y encontrar formas efectivas de conectar con un electorado cada vez menos predecible. Por último, es necesario mirar también el caudal de votos en esta elección. Desde esta perspectiva, algunos de los candidatos que no resultaron ganadores en sus respectivas regiones mostraron la capacidad de obtener un considerable número de votos. Los resultados de esta elección no solo reflejan triunfos o derrotas, sino que también muestran la construcción de capital político.
Por ejemplo, O P I N I Ó N La línea de largada Estas elecciones evidencian que los votos no pueden atribuirse, sin más, a la derecha o a la izquierda y que los vasos comunicantes no están claramente definidos. Este panorama, lejos de consolidar ganadores absolutos, subraya que la carrera aún es larga. MARÍA JOSÉ NAUDON. - - -