Las conchitas son más escasas en las playas de Chile y las marejadas son una causa
Las conchitas son más escasas en las playas de Chile y las marejadas son una causa I r a la playa y encontrar conchitas es una actividad cada vez más difícil. Los especialistas lo atribuyen a varios factores, que van desde la contaminación, la extracción y la erosión de los bordes costeros por marejadas y otros fenómenos naturales. Juan Höfer, oceanógrafo y académico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, explica que si bien no hay un dato exacto sobre la disminución de conchas, "están en declive.
Han disminuido los números, la cantidad de ecosistemas que encontramos en las playas, que nos sirven de indicadores de la salud de nuestros ecosistemas de la costa". Höfer detalla que durante sus investigaciones en terreno, específicamente en la playa Las Torpederas de Valparaíso, en los últimos tres años "nos ha costado mucho encontrar organismos", y lo atribuye a distintos factores: "Puede ser por mucha presencia humana, puede ser por marejadas muy fuertes que remueven todo y arrancan parte de los organismos, puede ser por olas de calor marinas.
Cada playa es un mundo (... ), en las playas más afectadas la contaminación puede ser otro factor". Nelson Lagos, director del Centro de Investigación e Innovación para el Cambio Climático (CiiCC) e investigador del Instituto Milenio en Socio-Ecología Costera (Secos), reitera que para precisar cuánto ha disminuido la presencia de conchitas en las playas, "necesitaríamos saber cuántas conchitas había antes, hace diez años". Sin embargo, plantea que hay evidencia de que "la alta extracción pesquera de mariscos como locos, lapas y otros caracoles reduce su abundancia" y lo atribuye a que "después de su consumo y venta, las conchitas suelen terminar como basura en rellenos sanitarios, en lugar de regresar al ambiente marino". Lagos explica que es muy relevante preservar estas especies, ya que su extracción tiene "importantes implicancias". Por ejemplo: "Están compuestas en más de un 95% por carbonato de calcio y desempeñan un papel esencial en este ciclo.
Cuando organismos como caracoles o choritos mueren, sus conchas comienzan a erosionarse, fragmentarse y disolverse en el agua, aportando el carbonato que ayuda a amortiguar las bajas de pH en el océano". En ese sentido, precisa que el carbonato de calcio "es un biomaterial fundamental para mantener la salud del océano". Por eso, además, destaca la importancia de no llevarse las conchitas de mar que se encuentren en las playas, ya que son vitales para los ecosistemas por sus propiedades para regular la salinidad marina y actuar como hogares de diversos animales. "Es crucial evitar que las conchas sean desechadas en el medio terrestre y, en cambio, permitir que sean recicladas al océano, donde cumplen funciones ecológicas críticas", dice Lagos.
Coincide Carolina Martínez, académica del Instituto de Geografía UC, quien explica que "con los ecosistemas tan degradados y alterados por las actividades humanas es muy importante inculcar una valoración sobre estos, especialmente porque hay ciertos organismos, que a su vez son alimento de aves migratorias y forman parte de la cadena trófica del océano costero". Aprender a cuidar La especialista reconoce que los niños suelen jugar con estas especies, así como con estrellas de mar y caracoles. En estos casos, recomienda "no hacerlo porque son especies importantes en la zona intermareal.
Es fundamental respetar ese cohabitar, ya que alterar más el ecosistema, que ya está degradado por las propias actividades económicas que muchas veces son disfuncionales a la dinámica de la costa, es agravar las condiciones". Martínez concluye que "esta educación ambiental, que hace mucha falta fortalecerla en un país que tiene una costa extensa en todo su territorio, es importante que sea valorada por niños y jóvenes, con el objetivo de que puedan entender que el espacio costero tiene una función que es necesario proteger y conservar.
Esto es clave para que esta zona pueda seguir prestando sus servicios ecológicos, pero por sobre todo es importante tener un ecosistema costero sano como un espacio de mitigación ante los eventos extremos del cambio climático". Actividad humana, contaminación y extracción también han impactado su presencia en el borde costero: Las conchitas son más escasas en las playas de Chile y las marejadas son una causa MANUEL HERNÁNDEZ Los especialistas explican que son "esenciales" para la salud de los ecosistemas y llaman a dejarlas en la arena y no llevárselas, para que cumplan su función.
Los expertos detallan que la erosión del borde costero, provocada por las marejadas, como las que se registraron a fines de año en diversas playas nacionales, también afecta a la preservación de estos ecosistemas y la presencia de conchas de mar. ATON.