Autor: Alison Rodríguez A. cronicaOestrellaconce.dl
Histórico relator repasó el día de gloria de Lota Schwager en 2006
rofesor de educaPp ción básica, ex futbolista y narrador con más de 50 años detrayectoria, Óscar Aguín aún recuerda emocionado el momento en que Lota Schwager timbró su último ascenso a Primera A, haceya 18 años.
La misma emoción que transmitió ensu relato de aquel partido entre “La Lamparita de Lota y Coronel” como él le apoda, frente a Rangers de Talca, duelo jugado en diciembre del 2006 y en el que el equipo carbonífero logró ascender a Primera División después de un desempate a penales. “En la caseta de transmisiones, que siempre éramos cuatro, prácticamente no pudimos contener porque la gente que ingresócon todo. Estaba el alcalde, la diputada. Como pudimos relatamos el partido, era una aglomeración tremenda y todos con lamisma emoción, con losojos vidriosos esperando que Lota pudiera ascender”, comenta Aguín sobreaquel encuentro en el Federico Schwager. La expectación se apolugar. Lota deraba del Schwager, que había perdido 1-2 en Talca, tenía solo esaoportunidad para cuma medida plir su objetivo y que corría el marcador, veía que podía conseguirlo. Finalmente ganó 2-1 y huboqueira penales, los cuaÓscar Aguín relató con les una emoción quele llevó a incluso las lágrimas.
“Me emociona un poco recordarlo, porque la gente corría sin saber hacia dónde ir, todos se abrazaban, todos lloraban y más de alguna lágrima también se escapó de mis ojos porque son cosas que suceden una sola vez. Así que ahí Lota, ante un público fantástico, se fue feliz a casa luego de ese triunfo que consiguieron de forma milagrosa mediantelos penales”, recuerda entre risas y conmoción la voz protagonista delinolvidable momento.
SU PROPIA HISTORIA Nacido en Traiguén, Óscar Roberto Aguín, 85 años, casado y con cuatro hijos, recuerda cómo comenzó sus pasos en el deporte y qué fuelo que lo inspiró, desde que tenía 11 años, a convertirse en gran comentarista y relator de fútbol. “Todo comenzó a raíz delo que significó para mí escuchar por primera vez un partido, Fue en una radio de Los Ángeles, a unrelator: Guillermo Palito Candia.
Nunca me olvidé desu nombre, me llamó la68Todos se abrazaban, todos lloraban y más de alguna lágrima se escapó de mis ojos”. fícil hacerse un lugar entre los locutores más reconocidos, pues dice que el mundo de la caseta deportiva era muy hermético. “No me pasaban el micrófono, yo me sentía mal porque veía que me dejaban de lado, pero poco a poco me fui acostumbrando y conociendo más delo significaba relatar. El círculo de los relatores en Concepción era muy cerrado, costaba mucho poder llegar ahí pero con el tiempo lo fui consiguiendo”, dijo. Posteriormente, trabajó en emisoras como El Carbón, radio Matías y Dinámica, por nombrar algunas. También, ha sido proreconocide tagonista mientos por parte de las municipalidades de Lota y Coronel, siendo “Hijo Ilustre” de la última comuna.
Distinguido por su contribución a la educación y el deporte de la zona, hoy Óscar Aguín vivejunto asu esposa Carmen Arriagada en Coronel, recordando grandes momentos inolvidables vividos frente al micrófono, sabiendo que surelato del ascenso de Lota, perdurará en la historiadel fútbol del carbón. EL PLANTEL DE LOTA SCHWAGER QUE ASCENDIÓ HACE 18 AÑOS, atención lo que hacía, empecéa imaginarme los partidos y todo eso a través de su relato, de tal manera que me entusiasmó tanto que me hice un micrófono de madera, lo confeccioné yo mismo y le puse “SNA Radio Sociedad Nacional de Agricultura, y con ese micrófono yoentrevistaba alos profesores y mis compañeros del liceo”, cuenta. Asítambién comenzó a jugar a “transmitir” los partidos de básquetbol y fútbol, familiarizándose con el micrófono. Sin embargo, no fue hasta cuandoya trabajaba como profesor de educación básica, que se enteró de un concurso para relatores deportivos quese estaría realizando en radio Simón Bolívar en Concepción. Recuerda que, incitado por sus compañeros de trabajo, decidió participar del proceso.
“Me temblaban un pocolas piernas, erala primera vez que yo iba a estaren una emisora, cuando llegué debe haber habido unos quince que postulaban, pero todos relataban dela misma manera, llevaban todo escrito, en cambio yo no llevaba nada, iba así con las manos en los bolsillos, y yo le inventé un partido, ahí se miraron los directivos y dijeron: este es el hombre”, recuerda. Pasó el tiempo y AguínÓscar Aguín.
A sus 85 años, Óscar Aguín rememoró los momentos de felicidad tras el épico último ascenso de La Lamparita a Primera A, así como sus inicios en el relato. comenta que le fue muy dicomenta que le fue muy di-