Desde el conflicto al beneficio mutuo: modelo colaborativo transforma la gestión de la cuenca del Biobío
Desde el conflicto al beneficio mutuo: modelo colaborativo transforma la gestión de la cuenca del Biobío Lahistoria Lahistoria del río Biobío cambió de capítulo, y donde antes resonaban las protestas hoy se escriben acuerdos acuerdos colaborativos por el bien de la cuenca. La transformación no fue casual, y surgió a partir de tensiones que obligaron a repensar repensar cómo administrar el recurso más valioso de la región.
“En aquella época, efectivamente efectivamente surgieron diferencias importantes en torno a la construcción construcción de la central hidroeléctrica hidroeléctrica Alto Biobío”, recuerda Juan Vallejos, gerente de la Asociación de Canalistas del Canal Biobío Negrete y presidente de la Junta de Vigilancia del río Biobío (JVBB). La infraestructura de riego no estaba preparada para las variaciones de caudal que introducía la operación de la central, central, generando complicaciones que afectaban directamente a los agricultores de la zona. El punto de inflexión llegó en 2022, tras un año especialmente especialmente seco que amenazó tanto la producción agrícola como la generación eléctrica. Ese año se materializó un acuerdo inédito: parte del agua correspondiente a los regantes se dispuso como “ahorro”, acumulándola en períodos específicos para que la hidroeléctrica contara con el caudal necesario. A cambio, se establecieron restricciones a la generación, con cuotas mínimas de almacenamiento que aseguraran aseguraran caudal suficiente para regar toda la temporada.
María Alejandra Alvarez, gerente de Gestión de Recursos Hídricos de Colbún, subraya la filosofía que sustenta esta nueva relación: “Aunque utilizamos el mismo recurso, el objetivo siempre siempre ha sido generar el mayor beneficio para todos.
Gracias a una gestión autónoma y coordinada, coordinada, hemos logrado distribuir el agua de forma más eficiente”. TECNOLOGÍA Y CONSENSO Se requieren herramientas sofisticadas para la complejidad complejidad de gestionar una cuenca que abastece a más de un millón de personas, que riega cerca de 150 mil hectáreas, que genera la mayor cantidad de energía del país y que, además, recibe los efluentes de celulosa más grandes del mundo. La startup startup Capta Hydro desarrolló un centro de control que recopila datos en línea desde estaciones de la Dirección General de Aguas (DGA), centrales hidroeléctricas, bocatomas agrícolas, extracciones extracciones sanitarias y descargas industriales. industriales. “Esta información se integra en la plataforma AMARU, permitiendo permitiendo una toma de decisiones informada y oportuna”, explica Emilio de la Jara, CEO de la compañía. compañía. El sistema facilita tanto la distribución eficiente del recurso recurso en épocas de sequía como la respuesta rápida ante crecidas que puedan provocar inundaciones. inundaciones. Para la Junta de Vigilancia del río Biobío, esta tecnología representa un salto cualitativo. El acceso a información precisa y en tiempo real fortalece su rol articulador, permitiendo velar por una distribución más justa, eficiente y transparente de este recurso vital, que sostiene la economía economía regional. APRENDIZAJES La cooperación actual contrasta contrasta dramáticamente con las tensiones históricas.
La construcción construcción de la central Raleo en los años 90 enfrentó la férrea oposición de las comunidades pehuenches, que salieron en defensa de su territorio ancesEl ancesEl mismo río que fue escenario escenario de esos conflictos ahora articula una gestión compartida compartida donde participan empresas generadoras, sanitarias, asociaciones asociaciones de canalistas, industriales industriales y comunidades de regantes. A través de mesas técnicas y protocolos operativos, la Junta de Vigilancia del río Biobío logra coordinar intereses de sectores históricamente enfrentados. En noviembre de202 se firmó el quinto convenio anual entre la JVBB y Enel Generación para el manejo del embalse Raleo. Este acuerdo establece que la empresa empresa debe liberar ciertos caudales o reservar volumen para potenciar potenciar el riego y agua potable en momentos críticos, sacrificando parte de su generación cuando sea necesario. A cambio, los regantes reconocen el derecho de la hidroeléctrica a operar dentro de márgenes acordados. MIRADA AL FUTURO El modelo colaborativo del Biobío trasciende las fronteras regionales.
En abril de 2025, la Dirección General de Aguas constituyó la Mesa Estratégica de Recursos Hídricos de la cuenca, reuniendo cuenca, reuniendo scctorpúblico, privado, scctorpúblico, privado, academia y sociedad civil para elaborar planes estratégicos estratégicos del agua. “Para avanzar en seguridad hídrica es necesario sentarse a conversar, llegar a acuerdos y ejercer una gestión integrada de los recursos hídricos”, enfatizó enfatizó Rodrigo Sanhueza, director nacional de Aguas. Esta visión reconoce que solo la cooperación cooperación enfrentará desafíos como la escasez hídrica y el cambio climático. El río que durante décadas dividió a agricultores, empresas hidroeléctricas y comunidades, hoy une a sus usuarios bajo acuerdos técnicos que han permitido asegurar el riego, la capacidad de generación energética y el agua potable. Prensa La Iribuna prensa@Iatribuna. cl EL MOI)ELO, ARTICLJLAI)() por la Junta de Vigilancia dci río Biobío, busca una distribución más eficiente, justa y sustentable del recurso. tral..