La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe
La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe Pese a que el grupo HES fue catalogado como 4terrorista” por EFUU, la administración de Joe Biden está dispuesta a colaborar con ellos tras la caída de Assad. Pero los Estados arabes temen que se repita la Primavera Arabe de 2011, que desestabilizó a la región y reactivó movimientos isla mistas. Murta Quinteros En Siria está comenzando un nuevo peno do de incertidumbre tras la caída del lresi dente Bashar al Assad.
En los últimos días, se ha desatado una serie de movimientos es tratégicos por parte de Estados Unidos, Tur quía y las monarquías del Golfo, que bus can influenciar el futuro de Siria y de la re gión. Para las monaniuías del Golfo, la toma de control por parte del grupo rebelde [la yat Tahrir al Sbam (IITS) es preocupante, pese a que Estados Unidos está dispuesto a colaborar con el grupo.
HTS se formó después de que su líder, Abu Mohammed al Jolani, rompiera vínculos con AlQaeda en 2016, La ONU yarios paí ses, incluido Estados Unidos, lo consideran una organización terrorista, aunque en los últimos años ha intentado posicionarse como una organización más moderada. Al Jolani, descrito por analistas especializados en islam político como un “radical pragmá tico”, prometió marcar el comienzo de la re construcción la estabilidad después de la revolución.
Ya en el poder, el grupo 1 ITS designó este martes a Mohammed al Bashir, exjefe de la administración civil del grupo rebelde que dirigía IdI ib (y que ha sido acusado de vio laciones de los derechos humanos), como el nuevo Iwimer ministro, para que lidere un gobierno de transición hasta el 1 de marzo de 2025. El contmvertldo papel de EE.UU.
Estados Unidos se ha pronunciado contra el régimen de Assad en Siria desde que esta lló la guerra ci il en 2011 e intervino mili tarmente en 2014 para combatir, más tarde junto con las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), a las fuerzas del Estado Islámico en el país.
El expresidente Barack Ohama enfrento numerosas críticas por no haber lIc vado a cabo una intervención más activa tras el ataque con armas químicas de 2013, atri buido ampliamente al régimen de Assad, en Ghouta oriental, en las afueras de Damasco, Damasco, Obama había calificado el uso de armas químicas en Siria de “línea roja”, recuerda The Economlst. Y aunque Estados Unidos ha catalogado por años al grupo IITS como terrorista, este martes el presidente estadounidense Joe Bi den anunció que colaborará con ellos en la reconstrucción de Siria.
En concreto, el mandatario afirmó que reconocerá y apo yará a un nuevo gobierno sirio que renun cie al terrorismo. destruu los arsenales de armas químicas y proteja los derechos de las minorías y las mujeres, detalló el medio Middle East Eye.
En principio, Biden había catalogado el de rrocamiento del regimen (le Assad como “un acto fundamental de justicia”, pero agregó que fue un “momento de riesgo e in certidumbre”. Siguiendo su anuncio (le este martes, el secretario (le Estado, Antony Blm ken, (lijo en un comunicado que Estados Unidos trabajará con grupos en Siria y so cios regionales para garantizar que la tran sidón se desarrolle sin problemas.
Estados Unidos tiene actualmente unos 900 soldados estacionados en Siria, lo que preocupa a los Estados aliados del Golfo Manifestantes sobre un vehículo militar celebran después de que los rebeldes tomaron Daniasco.. - - - - - La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe La inquietud de las monarquías del Golfo con el rol de EE.UU. en Siria y el fantasma de una nueva Primavera Arabe Pese a que el grupo HES fue catalogado como 4terrorista” por EFUU, la administración de Joe Biden está dispuesta a colaborar con ellos tras la caída de Assad. Pero los Estados arabes temen que se repita la Primavera Arabe de 2011, que desestabilizó a la región y reactivó movimientos isla mistas. Murta Quinteros En Siria está comenzando un nuevo peno do de incertidumbre tras la caída del lresi dente Bashar al Assad.
En los últimos días, se ha desatado una serie de movimientos es tratégicos por parte de Estados Unidos, Tur quía y las monarquías del Golfo, que bus can influenciar el futuro de Siria y de la re gión. Para las monaniuías del Golfo, la toma de control por parte del grupo rebelde [la yat Tahrir al Sbam (IITS) es preocupante, pese a que Estados Unidos está dispuesto a colaborar con el grupo.
HTS se formó después de que su líder, Abu Mohammed al Jolani, rompiera vínculos con AlQaeda en 2016, La ONU yarios paí ses, incluido Estados Unidos, lo consideran una organización terrorista, aunque en los últimos años ha intentado posicionarse como una organización más moderada. Al Jolani, descrito por analistas especializados en islam político como un “radical pragmá tico”, prometió marcar el comienzo de la re construcción la estabilidad después de la revolución.
Ya en el poder, el grupo 1 ITS designó este martes a Mohammed al Bashir, exjefe de la administración civil del grupo rebelde que dirigía IdI ib (y que ha sido acusado de vio laciones de los derechos humanos), como el nuevo Iwimer ministro, para que lidere un gobierno de transición hasta el 1 de marzo de 2025. El contmvertldo papel de EE.UU.
Estados Unidos se ha pronunciado contra el régimen de Assad en Siria desde que esta lló la guerra ci il en 2011 e intervino mili tarmente en 2014 para combatir, más tarde junto con las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), a las fuerzas del Estado Islámico en el país.
El expresidente Barack Ohama enfrento numerosas críticas por no haber lIc vado a cabo una intervención más activa tras el ataque con armas químicas de 2013, atri buido ampliamente al régimen de Assad, en Ghouta oriental, en las afueras de Damasco, Damasco, Obama había calificado el uso de armas químicas en Siria de “línea roja”, recuerda The Economlst. Y aunque Estados Unidos ha catalogado por años al grupo IITS como terrorista, este martes el presidente estadounidense Joe Bi den anunció que colaborará con ellos en la reconstrucción de Siria.
En concreto, el mandatario afirmó que reconocerá y apo yará a un nuevo gobierno sirio que renun cie al terrorismo. destruu los arsenales de armas químicas y proteja los derechos de las minorías y las mujeres, detalló el medio Middle East Eye.
En principio, Biden había catalogado el de rrocamiento del regimen (le Assad como “un acto fundamental de justicia”, pero agregó que fue un “momento de riesgo e in certidumbre”. Siguiendo su anuncio (le este martes, el secretario (le Estado, Antony Blm ken, (lijo en un comunicado que Estados Unidos trabajará con grupos en Siria y so cios regionales para garantizar que la tran sidón se desarrolle sin problemas.
Estados Unidos tiene actualmente unos 900 soldados estacionados en Siria, lo que preocupa a los Estados aliados del Golfo Manifestantes sobre un vehículo militar celebran después de que los rebeldes tomaron Daniasco. que dependen de Washington para contrarrestar contrarrestar la influencia de Irán y Hezbolá.
Y la promesa calificada de apoyo a una Siria post-Assad llega mientras la administración administración Biden sigue buscando atacar ales combatientes combatientes del Estado Islámico para evitar que el grupo resurja como una amenaza internacional y mantiene el apoyo a Israel mientras sus fuerzas llevan a cabo sus propias propias operaciones dentro de Siria.
No obstante, a pocas semanas de que astima astima el presidente electo Donald Trump, éste ha dicho que Estados Unidos no debería intervenir, publicando en Truth Social: “Estados “Estados Unidos no debería tener nada que ver con esto.
Esta no es nuestra lucha, Dejen que se desarrolle. ¡No se involucren!”. Paralelos con la Primavera Árabe De los seis países que vierun los movimientos movimientos de protesta más sostenidos en 2011, cuando la furia contra las élites gobernantes gobernantes estalló en todo el mundo árabe, el presidente presidente sirio Al-Assad fue el quinto líder en ser derrocado, más de una década después de los cuatro anteriores. Se trata de una ruptura definitiva con el legado desde los años 50 de autócratas árabes anclados en lo militar que han dominado y devastado durante durante mucho tiempo las sociedades árabes. Pero la caída abrupta de Assad no marcó el fin de la agitación en Siria, sino más bien el comienzo de una nueva fase en la lucha por el poder y la influencia.
Y el hecho de que su caída fuera celebrada por movimientos movimientos populares de sirios dentro y fuera del país, trajo recuerdos de las revueltas de la Primavera Árabe en 2011, en que se activaron activaron demandas por reformas democráticas y por el derrocamiento de regímenes autocráticos autocráticos en la región. Dichas demandas marcaron un punto crítico crítico en la región y son algo que los Estados del Golfo, que han reprimido movimientos islamistas como los Hermanos Musulmanes, buscan evitar que se repitan a toda costa.
“Las monarquías conservadoras del Golfo no tienen ningún interés en ver una república árabe vecina que respete los derechos humanos humanos y las libertades individuales”, decía una columna de opinión del politólogo turco turco Ronald Meinardus en el periódico griego griego To Vima.
Por esta razón, la disposición estadounidense estadounidense de cooperar con la transición siria, segün segün analistas, provocó desconfianza en países países como Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, que ven a HTS como una amenaza a la estabilidad y seguridad de sus propios regímenes. Para estos dos países, el grupo yihadista es capaz de reavivar movimientos islamistas que desestabilicen la región, como ocurrió durante la Primavera Árabe de 2011.
El grupo representa una amenaza ideológica ideológica para los gobiernos del Golfo y la cooperación cooperación de Estados Unidos pone en riesgo la estabilidad regional al fortalecer a un grupo que considera peligmso para sus propios propios regímenes y para la región, explicaron al Atlantie Couneil los investigadores de los Programas para Medio Oriente Medio del think tank, Qutaiba Idibi y Richard LeBaron. LeBaron. A eso se suma el rol de Tuitiuía. Si bien Ankara Ankara no apoa oficialmente a HTS, e incluso incluso lo cataloga de organización terrorista, ha respaldado a varias milicias de norte de Siria que tomaron parte en la operación. Esto complica el equilibrio de poder en Siria, porque porque Turquía y Qatar son vistos por los países países del Golfo como rivales que respaldan a grupos islamistas que amenazan sus intereses. intereses.
Distinto lo ve Estados Unidos, que considera que la caída de Assad ayuda a contranestar el terrorismo, reducir la in fiuencia fiuencia iraní y promover la estabilidad en Medio Medio Oriente Medio, según explicó Qutaiba ldlbi.
El día antes de que Assad huyera del país, los ministros de Asuntos Exteriores de Qa tar, Arabia Saudita, Jordania, Egipto, Irak, Irán, Turquía y Rusia celebraron la cumbre anual del Consejo de Cooperación del Golfo Golfo (CCG). en la que emitieron una declaración declaración conjunta en la que instaron a que el gobierno gobierno sirio y la oposición negociaran para encontrar una “solución política a la crisis siria También pidieron la preservación de la integridad territorial (le Siria, declararon respeto por su soberanía y rechazaron la interferencia interferencia regional en sus asuntos internos.
En una declaración posterior a la cumbre del CCG de 2011, la organización regional había instado a Assad a “detener de inmediato la maquinaría de asesinato, poner fin al derramamiento derramamiento de sangre y liberar a los detenidos”. detenidos”. “En 20U, un gran nümero de países rápidamente rápidamente llegaron a la conclusión de que les iría mejor si Assad cayera y querían librarse de él... pero los sauditas, los emiratíes y otros en la región ven ahora esto como una situación desafiante y desestabilizadora para ellos si Assad cae en este punto”, dijo Trita Parsi, vicepresidente ejecutivo del Quincy Institute con sede en Washington, a la cadena cadena CNN, en la víspera de la caída del líder líder sirio, el domingo pasado.
Una posibilidad de lo que pueda ocurrir ahora es que “los gobernantes que ya están paranoicos con los islamistas del tipo de la Hermandad Musulmana, de repente tendrán que lidiar con algo que es como la Hermandad Hermandad Musulmana con estemides, y también mucho más peligroso e impredecible”, proyectó proyectó a Middle East Eye Aron Lund, un experto experto en Siria de Century International y analista de Medio Oriente en la Agencia Sueca de Investigación de Defensa (FOI). La gente pasa junto a un vehículo militar blindado en una calle de Sednaya, Siria, el 11 de diciembre de 2024.. -