¡S.E., el Presidente Boricen medio de tiempos inciertos!
¡S.E., el Presidente Boricen medio de tiempos inciertos! nmonijalba@gmail.com Después de ver el partido entre Chile y Canadá, me siento cansado. Me parte haber corrido toda la cancha. La tensión soló termino con el pitazo final. Creo que urge realizar cambios en los llamados a nuestra selección nacional que realiza el D.T., Ricardo Gareca. Amigos y amigas, no sé mucho de fútbol. Pero me doy cuenta que hace falta un medio campo más determinante en el juego de “hacer pases con ventajas” a los delanteros. También, pienso que actualmente en nuestro fútbol prosional de la Primera “A”, hay punteros chilenos que están jugando a un nivel muy destacado, como es el caso de Edson Puch. No olvidemos que fue seleccionado nacional, cuando cuando Chile ganó la Copa América, junto a la generación dorada. Me van a perdonar, pero al comparar los rendimientos, la técnica, la inteligencia, sin descuidar la velocidad, los goles y sus asistencias, considero muy humildemente que, Edson Puch, debió estar en esta selección. En el ranking que realizan los expertos expertos del fútbol en los diferentes medios de comunicación, en cada semana, siempre lo colocan entre sus figuras preridas, porque está jugando muy bien. Así, existen otros jugadores que merecen una oportunidad. Bueno, después de esta catarsis, voy con un pase largo al área de mi diario vivir, con la pena debajo del brazo. Les digo que vi en parte el debate Presidencial entre Donald Donald Trump y Joe Biden. Cuento corto. Ninguno de los dos inspira un mejor camino para el pueblo norteamericano.
Según mi manera de ver las cosas, el mundo se tambalea entre La Rusia de Putin y los EE.UU. los resultados de los próximos escrutinios escrutinios electorales estadounidenses, nos darán el nombre de quien regirá la nación. La cuestión entre capitalismo y comunmo se terminó con el derrumbe político del comunismo soviético. Pero los cimientos de la humanidad por mayor justicia es una obra fin. El derrumbe de una estatua socialista del siglo pasado no termina con la ambición de mayor concentración de riqueza capalista, ésta no ene límites. No es cosa de buenas intenciones. Es la lucha por permanecer en defensa de su realismo realismo económico. El capitalismo triunfante, hoy llamado neoliberalismo, nunca va a ir contra su propia naturaleza. No vivimos en la época de la edad de piedra. Estamos en el siglo XXI. No estamos frente a un escaparate muy atractivo. La explotación humana continua, la pobreza se expande y la libertad está sujeta al mercado. El mundo unipolar controlado y regulado por la globalización, nos tiene bajo su dominio. Los graves problemas de seguridad que tenemos en Chile, junto a la inmigración, no es un problema que afecta solamente a los chilenos. Es un grave problema mundial. Por supuesto, cada país es responsable de aplicar las leyes que estime conveniente y propias de sus ideologías políticas mayoritarias. Asimismo, ocurre con la delincuencia, hoy tremendamente más violenta. El narcotráfico narcotráfico es más fuerte, organizado y maneja ciertos ámbitos de la vida de un país, donde el dinero, corrompe todo. Convierten los desiertos en zonas de bosques deslumbrantes. Trafican drogas más mortales y más armas mortales. Proliferan los asesinatos por encargo y los secuestros son el pan de cada día.
Increíble, pero son aspirantes a directores de empresas y son fuentes de emprendimientos, etc, etc.. En medio de estas tormentas sociales y en medio de estos tiempos inciertos, le toca enfrentar estos desafíos a S.E., Presidente Gabriel Boric. Tiene que podar con inviernos duros, consecuencias del cambio climático, Para el colmo, después, vienen los terribles incendios -intencionales o de intensos calores-. Una destrucción destrucción sobre otra, configura un escenario muy difícil de sortear. Conducir al país bajo tales circunstancias, no es una tarea menor. Una labor política que parece un infierno. Al escudriñar la verdadera vocación política del Presidente Boric, sin dudas, sus valores son de “luchador social”. Su anhelo político se cumplió. Ahora está con los pies en el suelo, como dice la frase popular, “otra cosa es con guitarra”. Por fortuna, es un hombre joven y su perspectiva del mundo, la enf renta desde esa mirada. Es lo que puedo apreciar, cuando se pone del lado de Ucrania y distante de Vladimir Putin. En esencia, en este fragor internacional, no se puede esperar que apoye a EE.UU., en la lucha fratricida contra Palestina. No es amigo de fraguar alianzas en secreto secreto que perjudiquen al pueblo. Miren y juzguen ustedes, porque la dictadura de Maduro en Venezuela, lo insulta a S.E., Presidente Boric, como lo estiman conveniente. conveniente. Pero el Presidente Boric, tiene la virtud de saber andar entre agresiones y descalificaciones de sus soberbios adversarios políticos. Responde y saca la palabra, palabra, justo cuando los grandes obstáculos se cruzan con su dignidad y su verlad. Pienso, que el pasado histórico está muy presente en él. Sin embargo, le asiste el sano convencimiento, que su Gobierno depende del “poder” y que éste, por ahora, lejuega en contra. los hechos están a la vista. Miren como son las cosas. A contar del mes de Julio, está decretado un alza en la cuenta de la luz.
La que se postergo, desde la pandemia. ¿Quién gana y quién pierde, con la puesta en práctica de esta medida abuva y desproporcionada? Antes de terminar, la clase polftica en forma transversal, debiera exigir los Balances Balances y Auditar, a las empresas que operan en el sector; son monopolios de los servicios eléctricos en nuestro país. Veamos y analicemos. Sí no hay pérdidas, entonces, por ley simple económica, solamente, se debería aplicar el alza del IPC correspondiente a este último trimestre. En el supuesto, de exisr pérdidas en los Balances netos que registren estas empresas, entonces, cabe una compensación compensación por parte del Estado.
Pero, traspasar más ganancias y un delta de rentabilidad, rentabilidad, a este sector que opera los servicios eléctricos, a costa del bolsillo de todos los chilenos, simplemente, es una locura sin parangón que no tiene nombre... NELSON C. MONDACA IJALBA.