“Efecto dominó” por fallida compra de casa de Allende: por qué han dejado sus cargos dos ministras y cinco asesores
“Efecto dominó” por fallida compra de casa de Allende: por qué han dejado sus cargos dos ministras y cinco asesores E.
CANDIAComenzaba enero cuando la entonces ministra de Bienes Nacionales Marcela Sandoval decía que se iba “muy tranquila”. Pocos minutos antes, el Presidente Gabriel Boric le había solicitado la renuncia, en el marco de la fallida compra de una casa en Providencia, que perteneció al expresidente Salvador Allende. En el proceso se había pasado por alto que dos de las propietarias la todavía ministra Maya Fernández y la senadora PS Isabel Allende no podían celebrar contratos con el Estado.
La jefa de gabinete de Sandoval, Denisse Hernández, debió dejar el cargo pues era un cargo de confianza de la secretaria de Estado y participó de las reuniones en las que se analizó la compraventa, según declaraciones reunidas en la indagatoria que dirige la fiscalía.
Cerca de una semana después, se produjo otra dimisión, la de la jefa de la División Jurídica del Ministerio de Bienes Nacionales, Macarena Diez, Prácticamente todos los funcionarios involucrados en el proceso han declarado ante la fiscalía. Unos dicen que alertaron de los problemas en la adquisición que se pretendía; otros, que los desconocían. aunque ella fue reasignada como analista jurídica de la División Administrativa de la misma cartera. Sandoval declaró en la causa que Diez advirtió a Presidencia el conflicto de interés que podía producirse de avan-zar en la adquisición. Nada sucedió durante los meses que siguieron.
“Yo estoy acá porque me ha nombrado el Presidente de la República y estaré hasta el momento que él lo decida”, afirmaba el 8 de enero la mi-nistra Fernández, a solo días de dejar el cargo Sandoval.
Aquel día también aseguró “que no podía estar involucrada en el proceso” de compraventa y que, “por eso, se hace un patrocinio, un mandato a un abogado”. Sus palabras resonaron hace poco más de una semana, el 10 de marzo, cuando renunció voluntariamente, en medio del a n u n c i o d e u n a a c u s a c i ó n constitucional en su contra, mientras que en el Tribunal Constitucional (TC) estaba ad portas de discutirse un requeri-miento que también solicitaba su inhabilidad. Su dimisión, como en el caso de Sandoval, “arrastró” a otros funcionarios de la cartera. Salió con ella su jefe de gabinete, Claudio Pérez, y el asesor jurídico del gabinete, Luis Correa Bluas. Mientras que a mediados de esta semana las renuncias llegaron a La Moneda con la de Leonardo Moreno, el exasesor de Presidencia y exjefe de Seguimiento de Políticas Públicas.
“Abrí la reunión, indicando que no entendía cómo había sucedi-do eso (... ). No me interesaba ver quiénes eran los responsables, solo quería saber cómo resolver jurídicamente esta materia”, relató Moreno al declarar en la causa sobre la primera reunión, conocidos ya públicamente los problemas de la adquisición.
El exasesor también habría recibido una minuta desde el Servicio Nacional de Patrimonio en la que se indicaban consecuencias jurídicas y comunicacionales, pero, dijo, no la vio hasta el 22 de enero, cuando ya era tarde.. Las renuncias se han producido en los últimos tres meses