Autor: Valentina Marticorena M. La Estrella de Valparaiso
Abogado ciego de 60 años litigó por primera vez en Viña del Mar
Abogado ciego de 60 años litigó por primera vez en Viña del Mar ste martes 19 de E agosto, en el Tribuen realidad la discapacidad nunca puede ser tan grande como para conseguir un objetivo. La ceguera no lo fue para mí", reflexiono. La historia de Lillo está marcada por la resiliencia. Perdió su matrimonio, amistades, trabajo y vinculos en la parroquia donde se desempeñaba, pero decidió comenzar de cero. Aunque inicialmente se matriculó en la carrera de Traducción e Intérprete en la Universidad de las Américas, esta no pudo impartirse en jornada vespertina. Fue entonces cuando se le propuso estudiar Derecho, desafío que aceptó sin dudar.
El proceso no fue sencillo. "Sí, se me hizo difícil, sobre todo porque es una carrera donde hay mucho que leer, mucho material que leer, y el braille no es de rápida lectura ni tampoco es de rápida escritura. Tuve que estudiar bastante en equipo, grupos de tres, cuatro personas. Pero tenía que estudiar el doble y memorizarlo favorablemente", contó.
De los 66 alumnos que ingresaron con él en 2018, solo tres se han titulado hasta ahora, y Lillo es uno de ellos. "Me di cuenta que nal de Garantía de Viña del Mar, se vivió un hecho que marcó un hito para la inclusión y la superación personal. Litigó por primera vez como abogado defensor Héctor Eduardo Lillo Gómez, quien tiene 60 años y es completamente ciego.
Lillo es Licenciado en Ciencias Jurídicas y Sociales desde 2023 y juró ante la Corte Suprema de Justicia en junio de este año, consolidando así un camino que inició de manera tardía, pero con convicción. 'Me tocó comparecer por primera vez como abogado litigante en una causa en materia penal, en el juzgado de garantía de Viña del Mar. Soy abogado desde hace poco tiempo. Yo empecé a estudiar bien adulto a los 53 años, y ahora ya cumpli 60 en enero de este año", relató. Su vida cambió drásticamente a los 25 años, cuando perdió la vista producto de un glaucoma congénito no detectado a tiempo.
A pesar de las dificultades, encontró un nuevo rumbo en el Derecho, apoyado por el Centro de Grabación para Ciegos de Viña del Mar, institución clave en su formación. "El Centro de Grabación para Ciegos fue fundamental para mí, y es fundamental todavía para muchas otras personas. Si he trabajado con baja visión, es fundamental porque ellos hacen una tarea espléndida, hermosa, de grabación de los textos que nosotros necesitamos", señaló. Un camino de esfuerzo INSPIRACIÓN PARA OTROS El nuevo abogado tiene claro el mensaje que quiere entregar a quienes enfrentan situaciones similares. "El mensaje más importante es que los límites los establece uno mismo. No la discapacidad, no las demás personas, uno mismo se limita o expande sus fronteras. Si se puede.
Yo creo que uno siempre tiene que buscar en la vida algo que le incomode, porque quedarse en la zona de confort a uno lo va estancando y lo detiene y lo anula". El hito alcanzado por Héctor Eduardo Lillo también refleja el aporte del Centro de Grabación para Ciegos de Viña del Mar, institución que por más de cuatro décadas ha sido un soporte vital para personas con discapacidad visual.
Su expresidenta, Rose Marie Michalland Byxbee, recordó los orígenes de la entidad: "En 1984 se junto un grupo de damas de la Cruz Roja de Viña porque vieron que había muchos ciegos y estaban como a la deriva, muy limitados en su quehacer.
De a poquito fueron formando este centro que es de grabación para ciegos, es decir, se les graba a ellos para que tengan una forma de entretención, de culturizarse un poco y de entretenerse". Con el paso de los años, el trabajo del centro trascendió la entretención para transformarse en una herramienta educativa. "Además de esto, de las grabaciones, muchos de ellos quisieron ir a la universidad entonces siempre el centro se preocupo de grabar todos los textos de estudio. Incluso a los niños que quedaban en el colegio se les grababan los textos, porque si no, como estudian, y los mayorcitos no todos saben braille tampoco. Entonces así es como se han recibido", relato. O. Héctor Lillo Gómez, no vidente, alcanzó un hito personal con el apoyo del Centro de Grabación para Ciegos. HÉCTOR LILLO, EJEMPLO DE SUPERACIÓN E INSPIRACIÓN PARA LA COMUNIDAD NO VIDENTE.