Editorial: BAJA DE LA TASA DE INTERÉS
Editorial: BAJA DE LA TASA DE INTERÉS E n una decisión esperada, el Banco Central redujo la tasa de interés en un cuarto de punto, llevandola a 4,75%, su menor nivel en tres años y medio.
Se trató del primer recorte en siete meses, en una medida orientada a estimular la actividad económica y que podria ser reforzada con nuevas bajas durante que el nivel promedio de aranceles en Estados Unidos se proyecta superior a lo estimado al cierre del IPoM de junio, un elemento adverso para los exportadores hacia ese destino, aunque probablemente se vea atenuado tras la exclusión del cobre refinado de los incrementos tarifarios. Por otro lado, persisten las tensiones geopoliticas, pese al término del conflicto entre Irán e Israel. Se trata de un entorno que sigue exigiendo prudencia, pero que habilita espacio para una política monetaria más flexible, en linea con el enfoque adoptado por el instituto emisor. Ello se justifica en parte porque, si bien la actividad local ha evolucionado conforme a lo previsto, existen indicios de reversión en algunos factores de oferta que habían impulsado la economia a inicios de año. En su análisis para rebajar la tasa, el Banco Central destacó el deterioro del mercado laboral, caracterizado por una lenta creación de empleo y un incremento en la tasa de desocupación.
Las cifras del INE dieron cuenta ayer que ésta alcanzó a 8,9% en el trimestre abril-junio -sin variación respecto del trimestre anterioren un escenario en que acumula más de dos años y medio por sobre el 8%, mientras la tasa de desempleo entre mujeres comienza a asentarse en torno a 10%, los periodos sin trabajo se prolongan y comienza a observarse una afectación creciente entre profesionales calificados.
Se trata de hechos criticos que inciden directamente en el bienestar de las familias, lo que refuerza la necesidad de que la política monetaria sea menos restrictiva, aunque esta, en ningún caso, puede ser la única herramienta de respuesta. los próximos trimestres.
La resolución, adoptada en forma unánime por el Consejo y ya internalizada por el mercado, venía siendo cimentada en los últimos Informes de Politica Monetaria (IPoM), a partir de la evidencia de una moderación en la trayectoria de los precios internos. En este marco, el recorte de 25 puntos base -el primero desde diciembre de 2024era ampliamente previsto, tanto en su oportunidad, como en su magnitud. Un factor clave fue que la inflación total se ubicó por debajo de lo anticipado en el IPoM de junio.
En dicho mes, el Indice de Precios al Consumidor (IPC) bajó 0,4%, llevando la medición anual de 4,4% a 4,1%; mientras que la inflación subyacente -que excluye los componentes más volátilesno registró cambios mensuales y su incremento anual se ubico en 3,8%, A ello se sumó que tanto la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE), como de la Encuesta de Operadores Financieros (EOF) muestran expectativas ancladas en 3%. Este cuadro se ha mantenido pese a la persistente incertidumbre internacional, derivada de las tensiones comerciales y su impacto en la economia global. El instituto emisor señaló. Aunque la actividad ha evolucionado conforme a lo previsto, existen Indicios de reversión en algunos factores de oferta. EDITORIAL