Una oportunidad para liderar el futuro sostenible
Una oportunidad para liderar el futuro sostenible Economía Circular en la Logística Chilena Una oportunidad para liderar el futuro sostenible Para el sector logístico chileno, la economía circular representa la oportunidad de integrar tecnología, eficiencia operacional y nuevas fuentes de negocio. A continuación, revisaremos cinco estrategias clave para que las empresas comiencen su paso hacia una logística circular.
El El concepto de economía circular es una realidad que está redefiniendo redefiniendo la forma de hacer negocios a nivel global y que, en el sector logístico chileno, ofrece un camino claro hacia la sostenibilidad y la competitividad. Dejar Dejar atrás el modelo lineal de “extraer, producir y desechar” implica adoptar prácticas como la logística inversa, el rediseño de empaques con materiales reciclables y la integración de tecnologías tecnologías para optimizar rutas.
Lejos de ser solo una exigencia legal, la circularidad brinda a las empresas la oportunidad de innovar y de mejorar sus márgenes de manera sustentable. chile se ha sumado a esta tendencia con normativas cada vez más exigentes, que buscan reducir la huella ambiental y promover promover la reutilización de recursos. Leyes como la de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) obligan a las compañías compañías a encargarse de los residuos que generan, especialmente en lo referente a envases y embalajes.
Además, la Ley de Plásticos de un Solo Uso está marcando un antes y un después en las prácticas logísticas, al limitar materiales plásticos tradicionales y empujar a las empresas a rediseñar o sustituir sus soluciones de empaque. Pero estas obligaciones, que para muchos suponen retos financieros y operacionales, representan también un verdadero trampolín para diferenciarse en un mercado cada vez más consciente y regulado.
Repensar la logística para un mundo circular cuando hablamos de logística circular, nos referimos a un ecosistema capaz de extender la vida de los productos y materiales, materiales, y de minimizar todo tipo de desperdicios. desperdicios.
En concreto, esto se traduce en prácticas como la recuperación y reacon dicionamiento de embalajes, la utilización utilización de rutas más eficientes para reducir emisiones y la incorporación de materiales materiales biodegradables o reciclables en cada etapa de transporte.
Según un informe reciente del World Economic Forum, “circular Transformation of Industries: Unlocking Economic Value 2025”, cerca de 95% de las empresas espera que las soluciones circulares sean “importantes “importantes o extremadamente importantes” en sus operaciones en un plazo de tres años. Este mismo informe refleja que más de la mitad de quienes ya adoptan modelos circulares proyectan mejoras sustanciales sustanciales en su productividad y en la gestión de costos.
Para el sector logístico chileno, donde el transporte de carga y la manipulación de distintos tipos de embalajes son esenciales, esenciales, la economía circular representa la oportunidad de integrar tecnología, eficiencia operacional y nuevas fuentes de negocio. A continuación, revisaremos algunas estrategias clave: 1.
Rediseño de embalajes yuso de materiales sostenibles Frente al desafío de la Ley de Plásticos de un Solo Uso, muchas empresas están migrando hacia empaques con base en cartón reciclado y plásticos biodegradables biodegradables o reutilizables. Además de disminuir residuos, estos cambios generan valor reputacional y muestran un compromiso real con la sostenibilidad. 2. Logística inversa para cerrar el ciclo La responsabilidad por los residuos no termina cuando el producto llega al cliente.
La implementación de la logística logística inversa que contempla la recolección, recolección, clasificación y reintegro de envases envases usados no solo ayuda a cumplir la Ley REP, sino que crea oportunidades de ahorro a largo plazo. Recuperar palets, cajas o materiales de embalaje permite prolongar su vida útil y reducir la compra compra de insumos nuevos, generando un impacto positivo en los costos. 3.
Eficiencia energética y flotas sostenibles La transición hacia vehículos eléctricos o híbridos y la optimización de rutas mediante mediante herramientas de big data son dos pilares críticos para reducir la huella de carbono. cada kilómetro menos recorrido recorrido y cada litro de combustible no consumido consumido contribuyen no solo a la protección del medioambiente, sino también al ahorro ahorro de costos operacionales.
El mismo Por Christian Arriaqada, Director Ejecutivo de Integradora de Economía Circular Thinking.. Una oportunidad para liderar el futuro sostenible estudio del World Economic Forum destaca destaca que implementar modelos circulares circulares en la cadena logística puede llegar a disminuir emisiones de CO2 hasta en un 65%, cuando se combinan avances en rutas, materiales y procesos de reciclaje. 4.
Digitalización para una planificación inteligente La digitalización de procesos y el uso de inteligencia artificial permiten a las empresas empresas predecir tendencias de demanda, consolidar cargas y agrupar entregas para reducir tiempos y espacios en bodega. bodega. Este enfoque minimiza las ineficiencias ineficiencias y hace posible una operación más resiliente, capaz de responder a imprevistos imprevistos sin generar gastos excesivos ni impactos ambientales innecesarios. 5. Colaboración y alianzas estratégicas La economía circular no es un esfuerzo esfuerzo individual, sino sistémico. Por ello, construir redes de colaboración con proveedores, proveedores, recicladores y otros actores del mercado es esencial para compartir conocimientos y costos. Una asociación inteligente puede resolver, por ejemplo, el problema de la gestión de residuos en aquellas áreas donde la capacidad de reciclaje reciclaje aún es incipiente o la infraestructura infraestructura de recolección está en desarrollo.
Retos que valen la pena Uno de los principales desafíos a corto corto plazo es la inversión inicial que muchas muchas veces requiere la implementación de nuevas tecnologías, flotas eléctricas y capacitación de personal para manejar estas transformaciones. De igual modo, la administración de la logística inversa puede ser compleja: requiere sistemas de recolección eficientes y una cultura empresarial empresarial que valore la reintroducción de materiales en la cadena de producción. En la práctica, esto implica diseñar cir cultos de retorno y educar a clientes y proveedores para que colaboren de manera manera fluida. Aun así, la experiencia muestra que los beneficios superan con creces los obstáculos. obstáculos.
Las empresas que han emprendido emprendido este camino ven recompensas en tres dimensiones fundamentales: En lo ambiental, la reducción de residuos y de emisiones se traduce en una contribución contribución tangible a la lucha contra el cambio climático. En lo competitivo, las firmas obtienen mejores relaciones con clientes y proveedores, abren puertas a nuevos mercados y refuerzan su reputación. En lo económico, la disminución de gastos vinculados a multas o ineficiencias, sumada sumada a la mayor fidelidad de los clientes, favorece la rentabilidad en el mediano y largo plazo. Mirando al futuro con optimismo La logística circular plantea un cambio cambio profundo en los procesos internos y en la mentalidad de las organizaciones. Se trata de invertir en innovación, formar formar equipos capacitados e implementar mejoras permanentes para optimizar recursos. Pero, sobre todo, se trata de asumir un liderazgo que va más allá del cumplimiento regulatorio: implica con vertirse en un actor que impulsa soluciones soluciones concretas frente a los desafíos globales globales de sostenibilidad. En un escenario donde los grandes compradores compradores internacionales exigen estándares estándares cada vez más elevados a sus proveedores, proveedores, adoptar la circularidad desde la logística ofrece una ventaja diferencial innegable.
Aquellas empresas que avancen avancen hoy en estos temas no solo estarán preparadas para enfrentar regulaciones presentes y futuras, sino que también podrán posicionarse como socios estratégicos estratégicos para corporaciones globales que valoran la transparencia y la responsabilidad responsabilidad ambiental. En síntesis, la transición hacia la economía circular no debe verse como una carga impuesta, sino como una invitación a la innovación. Cuando combinamos combinamos un uso eficiente de energía, la digitalización y el rediseño de embalajes, estamos sentando las bases de un modelo modelo de negocio que se sostiene en el largo plazo.
La urgencia ambiental y las nuevas nuevas demandas del mercado apuntan a la misma meta: un modelo logístico capaz de reducir costos, mejorar la competitividad competitividad y, al mismo tiempo, proteger el planeta para las generaciones futuras. El paso hacia una logística circular es un camino lleno de oportunidades. Sí, existen barreras, pero los beneficios -en reputación, ahorro de costos y acceso a mercadosconvierten a la economía circular en una apuesta ganadora. Y en este gran reto global, el sector logístico chileno tiene todo para destacar y liderar con soluciones creativas y responsables. El momento de dar el siguiente paso es ahora. /NG.