Autor: Luis Andrés Villalón Vega
De Calama para Chile y Forbes
Unos días fui incluido en la lista 30 Under 30 de Forbes Chile, una distinción que busca destacar ajóvenes que están transformando el país desde diversos ámbitos. Recibir este reconocimiento ha sido profundamente significativo, pero más allá del orgullo personal, hay una dimensión que me mueve aún más: el haberlo hecho desde Calama. En una ciudad históricamente marginada de las grandes conversaciones sobre innovación, educación O desarrollo, lograr que una historia como la mía llegue a una vitrina nacional tiene un valor simbólico. Es una forma de decir que desde los territorios también se sueña en grande, que no todo el talento está en Santiago, y que la resiliencia del norte puede ser motor de futuro. Este reconocimiento no es solo mio.
Es también de quienes han creído en mi, de los profesores que me formaron en liceos y universidades públicas, de los barrios donde aprendí el valor del esfuerzo colectivo, y de cada loíno que se levanta día a día con la convicción de construir algo mejor. A quienes hoy sienten que sus sueños están lejos, les digo: sí se puede. Calama no solo extrae cobre, también forja talento, compromiso y futuro.