Cartas: Falta de rigurosidad
Falta de rigurosidad ?Chile vive un momento critico: estamos gobernados por los hijos acomodados e incompetentes de las élites, muchos de ellos descendientes de los líderes de la ex-Concertación.
Esta coalición, otrora exitosa en la transición a la democracia y la lucha contra la desigualdad, nos dejó un legado inesperado y lamentable: dirigentes cuya ineptitud y arrogancia moral han sumido al país en el estancamiento. El reciente rechazo al proyecto Dominga es un claro ejemplo. El argumento del Gobierno, respaldado por Etcheverry, citó un informe de Cochilco que incluye 51 iniciativas mineras, entre ellas Dominga, como una de las más relevantes. Paradójicamente, la misma inversión que fue rechazada por razones ambientales es utilizada para justificar alternativas al desarrollo minero. Este nivel de contradicción no sólo refleja desinformación, sino una falta de rigurosidad alarmante en quienes toman decisiones de alto impacto. Esta situación no es aislada, sino parte de un patrón más amplio. Una generación que heredó privilegios, pero carece de méritos y preparación, gobierna desde la negligencia. Sus decisiones afectan la confianza en las instituciones y perpetúan una desconexión con los problemas reales del país. Chile merece un liderazgo basado en el mérito, la responsabilidad y el compromiso con el bien común. Es momento de exigir un cambio, porque el país no puede seguir hipotecando su futuro en manos de la incompetencia heredada. Rodrigo Durán Guzmán