Autor: Rocío Santibáñez cronicacodiarioatacama.cl
El fin de una era: la tornería Resk cerró sus puertas tras más de 60 años
El fin de una era: la tornería Resk cerró sus puertas tras más de 60 años a reconocida tornería L Resk, ubicada en la calle Chañarcillo con Colipí, asus puerdiocierre definitivo tastrasaños de tradición historia, donde su giro principal se enmarcó por décadas enla fabricación y reparación de piezas de maquinarias o repuestos, prestando servicio al sector minero, la agricultura y eltransporte público en la ciudad de Copiapó.
Lanieta del dueñoy fundador de esta reconocida tornería, Patricia Araya Resk, manifestó que “esta decisión fuetomada debido a que su dueño José Resk Nara decidió que se hacumplido unciclo y conello se espera dar nuevas alternativasala icónica esquina de Chañarcillo con Colipf”. Además, mencionó que esta decisión se ha planteado durante estos últimos años y en este último periodo se resolvió poner término definitivamente, destacando que “el cierre de untrabajo familiar que ha perdurado pormuchos años es un momento cargado de emociones profundas y contrastadas.
Sesiente una mezcla de nostalgiay satisfacción, como siseestuviera cerrando un capítulo significativo de una historia llena de esfuerzo y dedicación”. La nieta de José Resk, comentóque “la nostalgia puede invadir el corazón al recordar los momentos compartidos, cada generación de torneros aportó las risas, los desafíos y las memorias construidas a lo largo del tiempo.
Cada rincón del lugar resuena con anécdotas, desde las más alegres hastalas que enseñaron lecciones valiosas”. También compartió con LA TORNERÍA DEDICÓ SUS MEJORES DÍASA LA FABRICACIÓN Y REPARACIÓN DE PIEZAS DE MAQUINARIAS O REPUESTOS, emoción las sensaciones que este cierre provocaba en la familia, señalando que “al mismotiempo, hay una profunda satisfacción por todo lo logrado. Eltrabajoarduo, los sacrificios y la dedicación dieron sus frutos, y esa realización trae consigo un sentido de orgullo.
Este cierre no solo representa el fin de una etapa, sino el comienzo de nuevas oportunidades y direcciones”. Javier Varas, ex trabajador del taller, quién estuvo allídurante aproximadamente 40 años, manifestó que “llegó un instante donde Don José, que es el dueño y una persona adulta mayor, ya noestaba presente en la tornería.
Así que la familia determinó cerrarla y bueno, el miércoles fue la últi ma vez que estuvo abierta la tornería”. El antiguo empleado del taller recuerda este lugar como un espacio cálido y familíar, donde predominaba la enseñanza y la cooperación ante la competencia y rivalidad, señalando que “Don José hacía como una familia, los maestros más antiguos le enseñaban a los más jóvenes, traíamos gente de las diferentes escuelas técnicas y se hacía una comunidad”. “No había competencia ya que todo era intentar que la gente fuera la mejor de la mejor, de hecho, yo creo que el 80% delos torneros que trabajan en la región pasó porla tornería Resk”, comentó.
Elextrabajador de latomnería destacó que su dueño hacía que la gente se sintiera bien, además, lamentó el cierre definitivo de esta maestranza, agregando que “todo tiene un principio yun final, uno nunca quiere que llegue que llegue ese final por el aprecio altiemcanti po que se estuvo ahí y la dad de gente que conoció.
Nadie puede hablar mal de eso, entonces las cosas buenas se echan de menos y a uno le da pena quese termine”. “También mencionó que “era una escuela realmente, los últimos alumnos que recibí venían delliceo Palomar, y de los cinco que recibíamos, tres seguían trabajando en tornería, entonces, esoerabuenoparala región, para todos nosot1os”. C3. DETRADICIÓN. La maestranza abrió sus puertas por última vez este miércoles. Nieta del propietario dice que “se espera dar nuevas alternativas a la icónica esquina de Chañarcillo con Colipí”. FOTO PRINCIPAL: KARL GHINGA GR